Una mujer de 99 años se unió a las prostestas contra la política migratoria de Trump. También se pronunciaron al menos 20 alcaldes estadounidenses, quienes denunciaron que aun cuando el Presidente revocó la medida de separar a las familias migrantes el país pasa por una crisis humanitaria que se ha agravado por las políticas del gobierno actual.
«El hecho de que por el momento Trump se ha vuelto un poco menos inhumano no resuelve el problema», opinó el Alcalde de Santa Fe.
Vermont, Estados Unidos, 22 de junio (AP).— Una mujer de Vermont, Estados Unidos, de 99 años que cumplirá 100 este fin de semana, se unió a las protestas contra la separación de niños inmigrantes de sus familias en la frontera con México.
Jane Kurtis, quien reside en Woodstock, dijo que sabía que tenía que hacer algo tras escuchar la noticia de la separación de las familias. “Me revolvió el estómago, como cuando uno va a vomitar”, declaró a la televisora WPTZ-TV.
La protesta duró aproximadamente una hora el jueves. Los manifestantes sostenían letreros frente a los automóviles que pasaban y marcharon alrededor de un parque en Woodstock.
Kurtis opinó que Estados Unidos nunca debería separar a los niños de sus familias.
Después de separar a más de 2 mil 300 niños de sus padres, el gobierno del presidente Donald Trump dio marcha atrás esta semana y dijo que las familias serán detenidas juntas.
ALCALDES OPINAN QUE CRISIS HUMANITARIA CREADA POR TRUMP NO HA CESADO
Alcaldes de varias ciudades estadounidenses se reunieron ayer en un centro de detención de migrantes en Texas y denunciaron que a pesar de la orden del Presidente Donald Trump que pone fin a las separaciones familiares, no ha concluido la crisis humanitaria que él mismo creó.
La alcaldesa de Seattle, Jenny Durkan, dijo que los albergues de inmigrantes están abrumados debido a los procesos penales iniciados por el gobierno de Trump.
«La razón por la cual estos niños no pueden ser devueltos a sus padres es porque el sistema ha quedado abrumado por esta política”, dijo Durkan. «No queda claro si los menores que han sido separados de sus familias están siendo tratados como menores no acompañados. Las autoridades no saben dónde están los padres de estos niños. Esto es una crisis humanitaria”.
Durkan se sumó a unos 20 alcaldes de todo Estados Unidos que pidieron la reunificación inmediata de las familias de los inmigrantes.
Los alcaldes hablaron uno tras otro en una conferencia de prensa frente a tiendas de campaña cerca de la ribera del Río Bravo, desde donde se veían campos agrícolas. Denunciaron que la orden ejecutiva de Trump suscita más preguntas que respuestas.
El Alcalde de Nueva York, Bill de Blasio, destacó que los niños todavía no saben cuándo volverán a ver a sus padres.
Los alcaldes pidieron entrar a la instalación para ver las condiciones de confinamiento, pero el Departamento de Salud y Asistencia Social no se los permitió, denunció el alcalde de Columbia, Steve Benjamin.
Ante la furia colectiva, el presidente Trump dio marcha atrás el miércoles y firmó una orden ejecutiva que según dijo derogó la política de separar a los niños de sus padres.
En Texas, el Alcalde de Los Ángeles, Eric Garcetti, señaló que reina la incertidumbre sobre qué representación legal se le está dando a los inmigrantes, y cuál es el período máximo de detención para una persona procesada por cruzar ilegalmente la frontera.
“Necesitamos una ley que resuelva esto, y eso sería apenas el primer paso. Luego tenemos que cumplir la promesa hacia los dreamers», dijo Garcetti, en referencia a los jóvenes que llegaron siendo niños al país pero que hoy carecen de permiso de residencia.
Los alcaldes de Miami, Los Ángeles y Central Falls (Rhode Island) recordaron sus propios pasados como inmigrantes de países latinoamericanos al cuestionar la política de “tolerancia cero” de Trump.
Alan Webber, Alcalde de Santa Fe (en Nuevo México), denunció que la decisión de Trump del día anterior no significa que todo está resuelto.
«El hecho de que por el momento Trump se ha vuelto un poco menos inhumano no resuelve el problema”, dijo Webber.