Los paneles producidos por LG Display son utilizados por LG para crear algunos de sus televisores más premium. Entre ellos destaca especialmente su televisor curvo LCD Ultra HD de 105 pulgadas.
Los paneles OLED son la base también de otro de los buques insignia de LG, el televisor Crystal Sound de 65 pulgadas.
Paju (Corea del Sur), 20 Mar. (Europa Press).- Los paneles OLED son en la actualidad uno de los materiales más preciados en la industria de la electrónica, utilizados para las pantallas tanto de smartphones (como es el caso del reciente LG G8, el Google Pixel 3 o el Huawei Mate 20) como de televisores, así como otros usos. En Paju (Corea del Sur), se ubica la mayor fábrica de pantallas del mundo, incluidos paneles OLED, y propiedad de la firma surcoreana LG, capaz de producir 70 mil láminas de pantalla OLED y de elaborar más de un millón de televisores al mes sumando OLED y LCD.
Este panel debe su posición en la industria a que elimina la necesidad de retroiluminación, como sucede con otros de cristal como el LCD, ya que transmite la imagen y la luz directamente a través de impulsos eléctricos en el material. Además, al ser plástico, el OLED es un material flexible que puede utilizarse en aplicaciones como dispositivos con pantallas plegables.
Los paneles OLED tienen un grosor de 0.95 milímetros, frente a los 30 milímetros de media que emplean otros sistemas como el LCD, según ha explicado la compañía a un reducido grupo de periodistas españoles en una visita en su planta de Paju, en Corea del Sur. Este menor grosor, sumado a la diferencia del material a la hora de generar la luz por sí mismo, consigue lograr una mayor amplitud de la gama de color y unos negros más profundos, no contaminados.
PAJU, LA CIUDAD DE LAS PANTALLAS
LG Display, la división de LG Electronics especializada en la producción de paneles, es la mayor productora de pantallas OLED a nivel mundial. Según datos de la empresa, produjo 90 mil láminas de pantallas de este tipo al mes en 2018, y espera que a mediados de 2019 esta cifra aumente a 130 mil, suficientes para armar 10 millones de televisores OLED de 55 pulgadas al año.
La división de pantallas de LG posee siete fábricas de pantallas en el mundo: dos solo en Corea del Sur, situadas en las ciudades de Paju y Gumi; otras tres plantas más en China (Yantai, Nanjing y Guangzhou, esta última comprada a mediados de 2018); y otras de menor tamaño en Vietnam (Haiphong) y Polonia (Breslavia).
La de Paju, ciudad situada al noroeste del país, a escasos kilómetros de la frontera con Corea del Norte, es la mayor de las fábricas de paneles OLED de LG Display en su país natal, y que también supone la mayor fábrica de pantallas del mundo, según datos de la empresa. Es la que ocupa a un mayor número de los 59 mil empleados de la sección de pantallas, en una planta del tamaño de una ciudad que da trabajo a 20 mil personas.
La planta de Paju es la mayor de LG tanto por empleados como por volumen de fabricación, siendo responsable de la elaboración de 70 mil láminas de pantalla OLED al mes, de manera que se pueden crear más de un millón de televisores al mes sumando estos paneles con los de cristal LCD que también se fabrican en la planta.
DISPOSITIVOS CON PANTALLAS OLED
La compañía ha permitido a Europa Press visitar una de sus líneas de producción de Paju destinada a la fabricación de paneles LCD, una fábrica de ocho plantas con varias líneas de producción en cada una. En concreto, en la línea visitada ya no trabajan empleados, debido a que todo el proceso está automatizado.
Sólo esta línea de producción, en la que LG elabora cristales LCD de séptima generación de un máximo de 42 pulgadas, ha supuesto una inversión de 30 millones de dólares a la compañía. La mayor de sus máquinas automáticas tiene un coste de 15 millones de dólares.
Los paneles producidos por LG Display son utilizados por LG para crear algunos de sus televisores más premium. Entre ellos destaca especialmente su televisor curvo LCD Ultra HD de 105 pulgadas, que la compañía ha descrito como el primero de su tipo con estas dimensiones en un showroom realizado en las instalaciones de Paju.
Esta «joya de la corona» de la gama de televisores de LG, con un formato de pantalla cinematográfico de 21:9, tiene un precio de 100 mil dólares y por el momento solo ha sido adquirida por dos personas en el mundo. También se añade un modelo de televisor LCD de 98 pulgadas que utiliza la resolución 8K.
Los paneles OLED son la base también de otro de los buques insignia de LG, el televisor Crystal Sound de 65 pulgadas. Este televisor cuenta con la particularidad de que el sonido se emite directamente a través de la pantalla, que vibra y suprime los altavoces tradicionales.
SMARTPHONES Y PANTALLAS FLEXIBLES
Además de televisores, los paneles OLED de LG Display se utilizan también para fabricar pantallas de smartphones, tanto en modelos propios como de otros fabricantes. La empresa surcoreana trabaja también en el desarrollo de sus primeras pantallas flexibles, que «están en producción para presentarse pronto», según ha confirmado el senior manager de LG Display, Jean Lee, aunque sin dar una fecha denitiva.
Antes de la llegada de sus pantallas flexibles para móviles, la compañía ha presentado ya un dispositivo de pantalla plegable, aunque en este caso es un televisor. Se trata de LG Signature OLED TV R de 65 pulgadas, el primer televisor del mercado con una pantalla enrollable, que se presentó oficialmente en CES 2019 tras mostrarse ya en la edición de 2018 de la misma feria
Este dispositivo puede utilizarse en tres posiciones: recogido en su base, desplegado, o en una posición intermedia en la que muestra un menú, como se ha mostrado a un reducido número de periodistas en el centro de innovación de la compañía situado en Magok, cerca de Seúl.