La nueva legislación que establece el etiquetado de advertencia, ayudará a la labor de los nutriólogos para orientar a los pacientes a que tengan una alimentación adecuada, pues a veces quienes tienen algún padecimiento no consumen los productos correctos.
En octubre de 2019, el Congreso mexicano aprobó la nueva ley que establece el etiquetado frontal de advertencia en alimentos y bebidas; estas etiquetas son octagonales.
México, 22 ene (EFE).- El 70 por ciento de los fallecimientos en México se deben a enfermedades originadas por la mala alimentación, por lo que la colocación de sellos octagonales de advertencia en alimentos procesados ayudará en el reto de hacer más saludable la dieta de la población, consideraron este miércoles especialistas.
La nueva legislación que establece el etiquetado de advertencia, ayudará a la labor de los nutriólogos para orientar a los pacientes a que tengan una alimentación adecuada, pues a veces quienes tienen algún padecimiento no consumen los productos correctos.
«El paciente dice ‘no voy a consumir sal’ pero compran jamón, salchicha, quesos y, a final de cuentas, cuando leemos la lista de ingredientes encontramos el sodio disfrazado», indicó la nutrióloga Catalina Hernández Reyes, docente de nutrición de la Universidad del Valle de México (UVM) Campus Chapultepec, y recoge un boletín.
En octubre de 2019, el Congreso mexicano aprobó la nueva ley que establece el etiquetado frontal de advertencia en alimentos y bebidas; estas etiquetas son octagonales.
Este tipo de etiquetado ya se había establecido con éxito en otros países, Chile fue el primero en establecerlo, le siguió Perú y Uruguay; México es el cuarto país en implementarlo en América Latina.
El etiquetado en forma de octágono, comentó la nutrióloga Aurea Itzel Morales, no es casual.»Cuando vemos en las vialidades un letrero que dice: alto, es un símbolo que representa tener cuidado, poner atención a algo; eso va a ayudar a los niños a entender los diferentes etiquetados».
De acuerdo con Morales, el siguiente paso es explicar las implicaciones de consumir en exceso los contenidos anunciados.
«¿Qué me puede pasar, en qué me afecta? Ese sería el principal papel de las instituciones educativas, difundir de manera clara y con fundamento la información sobre los efectos de ello», aclaró.
Ambas especialistas coincidieron que para mantener a una población alimentada adecuadamente, se debe tener acceso a alimentos principalmente de origen natural antes de que sean procesados.
«Si no va a ser todo natural, cuando menos que los alimentos industrializados que consumimos nos den aporte nutrimental adecuado y que no me genere un riesgo a la salud», comentaron.
Para generar una cultura de buena alimentación en México, Morales indicó que es necesario trabajar en equipo, haciendo énfasis en la influencia de la familia.
«No podemos dejarle el trabajo siempre al Gobierno, al sector salud, a una maestra, a una escuela, debe ser labor de equipo» y dijo que si en la familia se tiene un buen ejemplo de alimentación, «vamos a cimentar una mejor educación en la alimentación», concluyó la experta.