Los campesinos criticaron que la reducción y desaparición de programas productivos orientados al campo y su conversión en programs de consumo directo “podrían generar un proceso de reversión productiva, con pocos incentivos e instrumentos de política publica, de fomento productivo, que no lograrían una mayor producción y productividad”.
Ciudad de México, 21 de noviembre, (SinEmbargo).- Organizaciones campesinas agrupadas en el movimiento “El Campo es de Todos” lamentaron que el proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF) 2020 presente fuertes recortes al campo.
A través de un comunicado, las organizaciones campesinas señalaron que mientras los recortes al campo aumenta, “se consolidan recurso, programas y proyectos que son ajenos a la producción rural – base del desarrollo de nuestros pueblos, de su calidad de vida, de la capacidad de generar futuro para nuestros jóvenes”.
Añadieron que el presupuesto destinado al campo “contrastas con la política de autosuficiencia y soberanía alimentaria, que las autoridades federales han planteado como meta, ya que una política pública sin recursos suficientes, bien aplicados y supervisados, no es política pública”.
Los campesinos criticaron que la reducción y desaparición de programas productivos orientados al campo y su conversión en programs de consumo directo “podrían generar un proceso de reversión productiva, con pocos incentivos e instrumentos de política publica, de fomento productivo, que no lograrían una mayor producción y productividad”.
Alertaron que estos elementos podrían provocar una contracción en las actividades agropecuarias.
A la par, calificaron la propuesta de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) como inadecuada, ya que los instrumentos seleccionados para reorientar los recursos son insuficientes.
Los campesinos señalaron que “desaparecer los programas de fomento productivo y transformarlos en instrumentos de aplicación crediticia, sólo conducirá a la quiebra a los productores de más bajos ingresos o a los productores de transición no consolidados”.
Además llamaron al Estado a “no rehuir su responsabilidad en la conducción económica de este sector rural tan profundamente agobiado y sacrificado”.
Por lo que solicitaron a los diputados que el presupuesto asignado al campo sea suficiente y eficiente, a fin de que permita “resolver los grandes retos”, y lugar la soberanía alimentaria y recuperar el mercado interno.
El posicionamiento estuvo firmado por la Unión General Obrera, Campesina y Popular; la Coordinadora Nacional Plan de Ayala; la Central Independiente de Obreros Agrícolas y Campesinos “José Dolores López”; la Unión Nacional Integradora de Organizaciones Solidarias y Economía Social; la Unidad de la Fuerza Indígena y Campesina; el Frente Popular Francisco Villa; la Asociación de Figuras Económicas Rurales y Agroindustriales.
Así como la Unión Popular Revolucionaria Emiliano Zapata; las Redes de Organizaciones de la Sociedad Civil; y la Coordinadora Nacional de Movimientos Populares-Línea de Masas.