El mandatario mexicano afirmó que «no hay persecución a nadie» por parte del Ejecutivo, por lo que no se denuncia a ninguna persona por consigna política. «Estos asuntos los trata en primera instancia la Fiscalía que es un poder autónomo y luego el Poder Judicial», aclaró.
Ciudad de México, 21 de octubre (SinEmbargo).– El Presidente Andrés Manuel López Obrador aseguró la mañana de este jueves que no hay ninguna venganza o persecución contra Rosario Robles Berlarnga, extitular de la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol) y de la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu), esto luego de que el Juez de Control del Centro de Justicia Federal del Reclusorio Sur, Ganther Alejandro Villar Ceballos, determinara ayer que la exfuncionaria debe continuar en prisión preventiva, ya que persiste un “elevado” riesgo de que se fugue.
«Creo que es una decisión del Poder Judicial, de los jueces, de ellos depende y por lo que corresponde al Ejecutivo no hay ninguna venganza. Nosotros no hacemos eso. Eso es inmoral, indigno. Eso le resta a cualquiera autoridad y para nosotros lo más importante es la autoridad moral. De parte del Ejecutivo no hay persecución a nadie. No se denuncia a nadie por consigna política y estos asuntos los trata en primera instancia la Fiscalía que es un poder autónomo y luego el Poder Judicial», dijo.
López Obrador abordó el tema durante su habitual conferencia de prensa matutina, donde consideró que hace falta informar más sobre el funcionamiento del Gobierno, pues en el antiguo régimen no se hacía. «Ayer, antier, hablábamos de la costumbre de que el poder lo concentraba el Presidente y esto viene de lejos. Esto se arraigó con el Porfiriato», recordó. «De ahí viene también la simulación política porque en la Constitución se establecía la división, el equilibrio de los poderes, pero en la realidad los poderes Legislativo y Judicial eran apéndice. Estaban subordinados», acusó.
En ese entonces, agregó, «el Presidente era el que ponía a los diputados, a los senadores, a los jueces, a los magistrados, a los ministros, a todos, al Procurador». «Eso es lo que quedó en el imaginario colectivo. Tenemos que ir poco a poco informando, orientando de cómo es un auténtico Estado de Derecho», comentó frente a los medios de comunicación en el Salón Tesorería de Palacio Nacional.
«En el caso de Rosario Robles es un asunto del Poder Judicial que es el que resuelve y si el Juez decidió una orden o actuó por consigna debería de ser sancionado porque los jueces tienen que actuar con autonomía. A nosotros nos están ahora resolviendo casos en el Poder Judicial en los que no estamos de acuerdo, pero esto muestra ya que se avanza en la separación de poderes», sostuvo el Jefe del Ejecutivo federal.
Una investigación periodística publicada en 2017 reveló que Rosario Robles, exsecretaria de Desarrollo Agrario (2015-2018) y de Desarrollo Social (2012-2018), habría permitido el desvío de fondos públicos por más de cinco mil millones de pesos (247 millones de dólares) a través de universidades y empresas fantasma en el caso conocido como la Estafa Maestra.
En agosto de 2019, la Fiscalía General de la República (FGR) logró que un Juez impusiera prisión preventiva a Robles en el penal femenino de Santa Martha, en el oriente de Ciudad de México, alegando riesgo de fuga de la acusada, quien habría intentado ocultar un domicilio que figuraba en su licencia de conducir.
"No hay ninguna venganza, nosotros no hacemos eso, es inmoral e indigno", dice el presidente @lopezobrador_ sobre el caso de Rosario Robles, a quien anoche le negaron llevar su proceso en libertad. pic.twitter.com/Q6DXHLHZ6i
— Ruido en la Red (@RuidoEnLaRed) October 21, 2021
Sin embargo, la defensa de Robles sostiene que el documento utilizado por el Ministerio Público era falso.
«Mi madre está acusada por un delito no grave, nunca debió haber pisado (la cárcel) Santa Marta Acatitla porque no merece ningún tipo de medida cautelar», dijo ayer a las puertas de la audiencia Mariana Moguel Robles, hija de la exfuncionaria.
Robles, único miembro del Gabinete de Peña Nieto que ha pisado la cárcel, ha recibido un trato muy distinto al del exdirector de Pemex Emilio Lozoya (2012-2016), quien afronta en libertad sus dos causas de corrupción gracias a su colaboración con la Fiscalía, incluso fue captado hace unos días comiendo en un restaurante de lujo.
El Fiscal General, Alejandro Gertz Manero, justificó el año pasado estas diferencias porque Robles no estaba siendo «solidaria» con la justicia, a diferencia de Lozoya, quien implicó dentro de la trama de Odebrecht a altos cargos de la pasada Administración, incluido al expresidente Peña Nieto. Rosario Robles se planteó en marzo pasado declararse culpable a cambio de reducir la pena de 21 años que exige la Fiscalía, pero no logró cerrar un acuerdo al respecto.
–Con información de EFE