Claudia Sheinbaum y Marcelo Ebrard han cambiado de tiempo atrás la imagen que han mostrado como Canciller y Jefa de Gobierno de la Ciudad de México, respectivamente. Él ha apostado por mostrarse en las diferentes redes sociales: desde Twitter hasta TikTok. Ella, en paseos de bicis, junto a su familia, en diferentes recorridos en los que se le ve sonriente. En sus postales los dos presumen también su cercanía con el Presidente Andrés Manuel López Obrador.
-Con información de Dulce Olvera
Ciudad de México, 21 de junio.– El pasado 26 de mayo el Canciller Marcelo Ebrard Casaubón cambió la foto de su perfil de Twitter. Atrás dejó la imagen institucional del Secretario de Relaciones Exteriores —que había mantenido a lo largo del Gobierno— y en su lugar puso una fotografía junto a su esposa Rosalinda Bueso. No es la única postal: en las últimas semanas las redes sociales del Secretario han mostrado imágenes que muestran su “lado humano”: abrazando a un perrito, con unos guantes de box, compartiendo selfies con quien se cruce a su lado e incluso ha abierto un canal de comunicación a través de WhatsApp a la par que ha explorado las bondades de TikTok para conectar con una nueva generación.
Junto a estas imágenes, el Canciller también ha compartido en las últimas semanas tres fotografías de tiempo atrás con el Presidente Andrés Manuel López Obrador: “Juntos hemos luchado y juntos miramos hacia el futuro de la Cuarta Transformación”, escribió, por ejemplo, el 30 de mayo. O hace unos días, el 16 de junio: “Hace veintidós años decidí sumarme al proyecto del mayor líder de la izquierda y el mejor presidente que ha tenido México en la historia moderna”.>
Para nadie es un secreto que la ruta que se ha trazado Marcelo Ebrard apunta hacia Palacio Nacional. El fin de semana dio los primeros pasos de ese camino al anunciar la integración de un equipo, que coordinará la Senadora Malú Micher, para ganar en la encuesta que definirá la candidatura de Morena para la elección de 2024, a la cual también aspira la Jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum Pardo, fundadora —a diferencia de Ebrard— de Morena y vista como una colaboradora de toda la confianza del Presidente.
Sheinbaum también ha cambiado de tiempo atrás la imagen que ha mostrado como Jefa de Gobierno de la Ciudad de México. Ahora se le ve ya sea en paseos de bicis, junto a su familia y en diferentes recorridos en los que se le ve sonriente o posando junto al Presidente López Obrador, con quien ha destacado la trayectoria que los une desde hace tiempo. Aunque estos días no lo pudo acompañar en su gira por la capital debido a que dio positivo a COVID-19, enfermedad que —informó ayer él mismo— contrajo de igual forma el Canciller.
Ambos han empleado esa cercanía con el Presidente de cara a la militancia de Morena y al electorado. Si bien López Obrador ha insistido en que no habrá «tapados» ni se inmiscuirá en el proceso de selección, las veces que ha dado señales hacia Morena, éstas han sido seguidas al pie de la letra.
Hay algo que en Morena no reconocen y que el Presidente tampoco quiere asumir, pero hay una cultura en México muy enraizada en el ADN de los partidos políticos: es el Presidente en turno —del país o del partido— quien guía y conduce la designación del candidato. Mucho de ese ADN político que define la historia de los partidos tradicionales como el PAN, PRI o PRD inevitablemente va a suceder en Morena; es un asunto que no se puede cambiar de un gobierno para otro, siempre hay alguien que tiene influencia para decidir. En el caso de Morena, el Presidente ya definió la terna de finalistas”, expresó en entrevista el analista político y periodista Pedro Mellado.
LOS DOS PUNTEROS
Sheinbaum y Ebrard son los principales aspirantes de Morena a la Presidencia para 2024. Así lo muestran todas las encuestas que se han publicado a la fecha. Ambos han sido mencionados en la lista del Presidente López Obrador y ambos se encuentran en la cima de las preferencias, muy arriba de cualquier otro contendiente tanto de Morena (como el Secretario Adán Augusto López), como de la oposición, que por un lado se ha afianzado en torno a la alianza PRI-PAN-PRD, cuyo principal aspirante, el panista Ricardo Anaya está fuera del país en medio de la investigación que se le sigue por el caso Odebrecht; y por el otro, el partido Movimiento Ciudadano, que tiene en el joven Alcalde Luis Donaldo Colosio Riojas —que apenas dio sus primeros pasos en la política en 2018— a su mejor opción por el apellido con el que cuenta.
“Los dos punteros de las encuestas están en el mismo partido simplemente porque la oposición se fue diluyendo desde la elección de 2018 hasta ahora en una oposición que sabotea, boicotea todos los días cada una de las medidas del Presidente de la República; han estado en moratoria constitucional desde que se juntaron. De ahí no va a salir nada, tendrán candidato y algún tipo de proyecto escrito en la casa de Claudio X. González, pero el proyecto importante para el país es el que va a salir desde dentro de Morena”, planteó en entrevista el escritor, periodista y analista Fabrizio Mejía.
Al mismo tiempo, Ricardo Monreal es un tercero en la disputa por la candidatura del partido guinda. El Senador ha acentuado sus diferencias con la llamada 4T y con el Presidente López Obrador. Ha salido en defensa de Alejandro Moreno Cárdenas, “Alito”, el dirigente del PRI señalado de corrupción, a quien considera un perseguido político. Esa situación ha valido ver a Monreal como un político independiente del Gobierno, pero también le ha significado ser señalado como un activo de la oposición.
En ese sentido, Fabrizio Mejía opinó que el Senador “Ricardo Monreal siempre apuesta a ser el tercero en discordia y siempre ha ganado con esa estrategia y ahora no se lo están permitiendo. No tiene base social, ha sido un hombre de cargos públicos y su estancia en el Senado no ha sido brillante ni propositiva”.
A su vez, el analista Mellado comentó que “Monreal está en rebeldía o ya está preparando de alguna manera su salida para buscar la postulación por otro camino, lo cual no parece descabellado porque la coalición PAN, PRI, PRD —que aspira todavía a sumar a Movimiento Ciudadano— quizás está considerando que una de las necesidades dentro de su estrategia política rumbo a la elección presidencial es fracturar a Morena. Y pareciera que en este momento quien estaría con un ánimo más dispuesto como para entrar en ese clima de conflicto pareciera ser el Senador Monreal. Sigue hablando de lo mismo, que no cree en las encuestas, que no se siente minimizado a pesar de que no ha sido considerado por el Presidente como precandidato y de que él va estar en la boleta, aunque no aclara si por Morena o por otro partido. Los que están en la oposición pensarían que la fractura que Monreal podría causarle a Morena ayudaría para un eventual triunfo de la coalición opositora”.
LOS DOS PROYECTOS
Marcelo Ebrard ya sabe lo que es no resultar electo en una encuesta para seleccionar a un candidato. El ahora Canciller perdió en noviembre de 2011 la candidatura presidencial del PRD, cuando se encontraba en su mejor momento político luego de haber gobernado la Ciudad de México, con buenos niveles de aceptación. Pese a ello, reconoció que las encuestas internas no lo favorecían y declinó a favor de López Obrador, quien meses después fue postulado por los partidos del Trabajo (PT) y Movimiento Ciudadano (MC).
Sheinbaum, por el otro lado, ya ha lidiado con un conflicto derivado de este método que es usado en Morena. En agosto de 2017, ella fue la ganadora de la encuesta de la candidatura para la Jefatura de Gobierno, una situación que causó en un rompimiento con Ricardo Monreal, uno de los aspirantes, quien cuestionó la transparencia del proceso y estiró la liga hasta finales de ese año, cuando se reunió con López Obrador, que en aquel entonces dijo que hablaría con él para que no se fuera a Movimiento Ciudadano, al PAN, al PRD o ni al PRI. “Los que ya están con Morena queremos que no se vayan, ese es el caso de Ricardo y por eso voy a hablar con él”, dijo en noviembre de 2017. De esta manera, el ahora Senador permaneció dentro del movimiento.
Morena marcó el domingo 19 de junio, en su Asamblea en Toluca, Estado de México, que el camino para 2024 debe estar marcado por la unidad. “Estamos más unidos que nunca, nada personal está por encima de los intereses sagrados del pueblo de México”, dijo Sheinbaum hace poco más de una semana. Mientras que Ebrard enfatizó: “Sabrá nuestra dirigencia mantener la unidad, porque la unidad se construye con el respeto, cuando hay suelo parejo, cuando se escucha al pueblo”.
“Las encuestas son una buena opción para que no haya objeciones con los resultados. Va haber una interna y una externa. El asunto es que, como dirigente político, López Obrador es insustituible porque ni Ebrard ni Sheinbaum se hicieron desde abajo”, comentó Fabrizio Mejía. “Lo que me preocupa de las encuestas es eso, que un movimiento político como el obradorismo que se creó a pesar de las encuestas, vaya a terminar en una encuesta de popularidad”.
Y es precisamente a donde se encamina uno de los campos de la contienda. Al escaparate virtual de los seguidores, los likes y los videos. Al menos así lo parece entender el Canciller quien se ha volcado a una estrategia digital compartiendo un número en WhatsApp y un puñado de TikToks que buscan romper con la agenda solemne de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE). La Jefa de Gobierno también ha buscado encaminarse hacia esa ruta con videos como el que difundió su equipo en noviembre pasado comiendo tacos de canasta, el cual tuvo un impacto en redes sociales.
@m_ebrard Feliz #DíaDelPadre a todos los papás de #México ?? #Seguir #Follow #parati #foryoupage #foryou #fyp #trending #trend #tendencia #tiktokshortfilm #tiktok #like #marceloebrard #domingo #Mexico
Terminando la semana, buen fin!! pic.twitter.com/tKJd2VNXm4
— Marcelo Ebrard C. (@m_ebrard) June 18, 2022
Cuando visites el zócalo capitalino no te puedes perder de comer unos ricos tacos de canasta “El Puro Veneno”, están muy buenos. pic.twitter.com/LfeAi6P8vj
— Claudia Sheinbaum (@Claudiashein) November 14, 2021
Aunque esta competencia de popularidad en redes difícilmente será la única clave que determinará el triunfo en la encuesta de Morena. Uno de los aspectos fundamentales para muchos analistas es la continuidad del proyecto de Gobierno de Andrés Manuel López Obrador.
“La percepción es que Claudia Sheinbaum, por su cercanía con López Obrador desde hace muchísimo tiempo, sería esa continuidad. El equipo de Sheinbaum lo que tiene que ver es qué quiere decir profundizar la 4T, no sólamente ‘barrer Dos Bocas’ o mantener el AIFA, no, tiene que ver con asuntos de justicia, que es el gran pendiente y el modelo de autosuficiencia alimentaria, el asunto ambiental. Ahí puede Sheinbaum profundizar”, comentó Mejía.
Y agregó: “En el caso de Marcelo Ebrard por su historia, viene de una salida bastante tardía del PRI, de Manuel Camacho Solís con el Partido del Centro Democrático que no tuvo una repercusión electoral nunca, y es alguien que siempre ha ganado cuando acepta sus derrotas, en ese sentido se puede delinear una candidatura digna de esa parte de Morena más ligada al centro. Ahí hay una posibilidad de que apareciera un tercero entre los punteros dentro del movimiento obradorista, pero hasta el momento no lo veo. Se habla de Adán Augusto, de Rocío Nahle o Tatiana Clouthier. Pero está por verse si habrá tres candidaturas”.
Mellado señaló a su vez que “es evidente” que el Presidente López Obrador “tiene dentro de su visión de preferencia a Claudia Sheinbaum y a Marcelo Ebrard”: la Jefa de Gobierno ”porque es la que está más claramente comprometida con la ortodoxia del discurso de la 4T” y el Canciller porque “ha sido un leal incondicional y muy eficaz colaborador del Presidente”.
Para el analista y periodista, en este punto es que adquiere relevancia que también se haya “destapado” al Secretario de Gobernación Adán Augusto López Hernández, quien el domingo pasado fue el que puso sobre la mesa, en el llamado “desayuno de la unidad” las reglas que tendrá que seguir Morena rumbo a 2024. Si bien hay quienes lo ven como otro aspirante más, Mellado destacó que su papel será crucial para mantener esa unidad.
“Pienso que el Presidente metió a Adán Augusto para que en el momento clave, sea él quien con todo el respaldo moral, ético y político del Presidente, diga quién ganó. Será la fiel en la balanza, la bisagra que evite la ruptura en una contienda que puede terminar muy cerrada según las encuestas de Mitofsky, Massive Caller y Demotecnia”, afirmó.