La colonización de Australia hace 50 mil años no fue un accidente, asegura Michael Bird, de la Universidad James Cook, pues los primeros aborígenes arribaron en embarcaciones posiblemente desde Indonesia. Lo que sería el primer viaje para el continente, lo habrían emprendido unas 200 personas, indica el estudio.
Sídney (Australia), 21 de mayo (EFE).- Los primeros aborígenes de Australia no llegaron a ese territorio por accidente hace unos 50 mil años, sino que fue parte de una migración a gran escala liderada por exploradores marítimos, según un estudio divulgado hoy.
Los investigadores utilizaron mapas del fondo marino, técnicas de simulación marítima e información genética para de recrear el viaje de los primeros habitantes del continente, según un comunicado de la Universidad James Cook (UJC) que participó en el estudio.
Los investigadores simularon centenares de viajes para trazar las rutas probables de las embarcaciones que habrían salido de tres posibles puntos en las islas de Timor y Roti (Indonesia), tomando en cuenta factores como vientos, corrientes marítimas y el remo.
«Nuestro resultado muestra que la colonización de Australia no fue un accidente», dijo Michael Bird, de la UJC y líder de la investigación.
«El modelo muestra que la deriva accidental fue un elemento improbable en el éxito del cruce y la llegada en la ahora costa sumergida del noroeste (de Australia) y mas bien fue el viaje deliberado en embarcaciones», añadió Bird.
El estudio proporciona nueva evidencia de que los primeros aborígenes que colonizaron el continente hace más 50 mil años lo hicieron a través de un viaje marítimo planeado y coordinado.
Los resultados genéticos además sugieren que hasta dos centenares de personas hicieron el viaje a través de una cadena de más de 100 islas habitables, y que actualmente están sumergidas, frente a la costa de Kimberley, en el noroeste de Australia.
Sean Ulm, del Consejo Australiano de Investigación, que participó en el estudio publicado en la revista Quaternary Science Reviews, dijo que esto implica repensar las capacidades marítimas de los primeros habitantes de Australia.
«Los viajes adrede en esta escala se basaban en capacidades cognitivas, lingüísticas, simbólicas y técnicas avanzadas», dijo Ulm.
«Hubiera requerido la construcción de embarcaciones y tecnología de navegación desarrollada así como planificación e intercambio de información antes de emprender un viaje a mar abierto de hasta una semana de duración», añadió