Marcela Villalobos, activista en el tema de desaparecidos y presidenta de Amnistía Internacional México, advirtió que son muchas las voces desde la sociedad civil que han advertido de un desmedido uso de la fuerza por parte de las diferentes corporaciones policiacas, para que se revise el índice de letalidad.
Por Edith Domínguez
Ciudad de México, 20 de diciembre (POPLab).– Tres de las víctimas del enfrentamiento del pasado 17 de diciembre en la comunidad de Venado de Yóstiro, en Irapuato, entre agentes de la Guardia Nacional y un grupo armado, habrían sido rehenes de los delincuentes. Versiones policiales indican que fueron usados como «escudos humanos» y cayeron abatidos por las balas de los elementos policiales. Sin embargo, su estatus de víctimas no ha sido reconocido aún por las autoridades, que solo mencionan que «siete civiles fallecieron» en estos hechos, que también causaron la muerte de uno de sus elementos y lesiones a otro más.
El incidente ocurrió la madrugada del pasado 17 de diciembre, a las 00:25, cuando se registró un fuerte enfrentamiento a un costado de la carretera federal Abasolo-Irapuato, entre miembros de la Guardia Nacional y presuntos delincuentes.
Los agentes, al circular sobre la calle Camacho, fueron topados por un grupo de hombres armados que los comenzaron atacar.
Al repeler la agresión, comenzó la persecución. Más de 80 elementos comenzaron el operativo buscando entre los huizaches, las viviendas cercanas y los cultivos que rodean la zona.
Algunos de los agresores ingresaron a la última casa ubicada en el interior de una finca, desde donde, alrededor de las 01:20, siguió el enfrentamiento de los sicarios con los elementos de la Guardia Nacional.
De acuerdo algunos moradores el enfrentamiento duró más de una hora, al escuchar las detonaciones, sólo apagaron los focos y se encerraron en sus viviendas.
Después del segundo enfrentamiento, en el interior de la casa los tres hombres que estaban privados de libertad murieron de varios impactos de arma de fuego.
Una versión es que los agresores habrían usado a los tres civiles para cubrirse del ataque de los elementos de la Guardia Nacional, aunque los tres civiles fueron localizados amarrados de pies y manos y cubiertos de la cara. Dos de las víctimas habrían sido privadas de su libertad en el municipio de Salamanca.
Hasta este momento no han sido identificados según fuentes en el Gobierno.
En el interior de la vivienda, también fueron localizados cuatro presuntos agresores, entre ellos estaban los cuerpos de Guadalupe y su esposo José Alberto, propietarios del inmueble donde se desarrollaron los hechos. Los cuerpos fueron identificados por el padre de José, quien llegó al lugar e informó a los agentes federales desconocer a qué se dedicaba su hijo.
Ya por la mañana, agentes y Ministerio Público de la Fiscalía estatal arribaron a la zona, sólo se confirmó el número de personas asesinadas, sin dar mayores datos de la «agresión a a elementos de Guardia Nacional y de Seguridad Pública»:
La #GuardiaNacional informa: pic.twitter.com/3lr57ngjcX
— Guardia Nacional (@GN_MEXICO_) December 17, 2019
«… durante el procesamiento de la escena recabó diversos indicios, entre ellos armas de fuego y elementos balísticos, así mismo en el interior del inmueble donde se encontraban los agresores, fueron localizados los cuerpos sin vida de cuatro personas más, tres del sexo masculino y uno del sexo femenino; a los cuerpos les son practicados los estudios forenses correspondientes…»
La Guardia Nacional, por su parte, sólo informó de las ocho personas muertas en el enfrentamiento, entre ellas un agente federal, además que un segundo elemento lesionado.
HAY ABUSO DE LA FUERZA POR PARTE DE CORPORACIONES: ACTIVISTA
Marcela Villalobos, activista en el tema de desaparecidos y presidenta de Amnistía Internacional México, advirtió que son muchas las voces desde la sociedad civil que han advertido de un desmedido uso de la fuerza por parte de las diferentes corporaciones policiacas, para que se revise el índice de letalidad.
«Resulta preocupante que este tipo de situaciones (como la ocurrida en Yóstiro) sigan ocurriendo sin ninguna investigación sino con la justificación de que eran delincuentes y ya con eso se lavan las manos». Se requiere investigación profunda, no podemos seguir diciendo que por abatir delincuentes haya víctimas colaterales en el camino, dijo Villalobos. Pero incluso con cualquier presunto delincuente hay que seguirse el debido proceso, por lo cual no puede justificarse un mal uso de la fuerza.
«Ya sabemos que la Guardia Nacional está compuesta en su mayoría por militares, que tienen un entrenamiento totalmente distinto al de cualquier fuerza civil, que tendría que estar preparada con los protocolos necesarios de actuación para el uso de la fuerza», por medio de herramientas de inteligencia y de estrategia.
Estos enfrentamientos con la finalidad de abatir al enemigo con el uso desproporcionado de la fuerza no pueden ser la regla, si acaso deben ser la excepción y nunca con este índice de letalidad, que según estándares internacionales debe ser de uno a uno, y no terminar siendo de siete u ocho del lado de los civiles o presuntos delincuentes contra uno de las fuerzas armadas o la Guardia Nacional, exhortó Marcela Villalobos.
GRUPOS CRIMINALES, DEBILITADOS, DICE DIEGO
Guanajuato vive una situación de violencia extrema: sus ciudadanos padecen prácticamente todos días los embates de la delincuencia común y organizada: robos, secuestros, extorsiones y el peor de todos, el asesinato, que posiciona al estado en el primer lugar nacional y se cierne no solo sobre su población en general sino especialmente en sus policías.
De enero a noviembre de este año, el estado de Guanajuato está a la cabeza en rubros criminales como el número de homicidios dolosos, con tres mil 211 casos, de acuerdo a la cifra del Secretariado Ejecutivo Nacional de Seguridad Pública, le sigue Baja California con dos mil 657, y en tercer lugar lo ocupa el Estado de México con dos mil 603.
En las cifras de asesinatos en Guanajuato destaca que al menos 66 fueron mujeres y hombres integrantes de las policías municipales, fuerzas del estado, elementos del Ejército y funcionarios de seguridad. Según el conteo de POPLab, hasta hoy 19 de diciembre, iban ya 70 bajas. Ambas cifras posicionan a Guanajuato en el primer lugar nacional de homicidios de agentes.
Y mientras el Presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador exhibe en «la mañanera» a los gobernadores que no asisten a las reuniones de seguridad, entre ellos, el de Guanajuato, y los exhorta a atender el tema, Diego Sinhue Rodríguez Vallejo minimiza el regaño, asegurando que «no ha ido ni va a ir» a dichas reuniones porque no es ahí donde se toman las decisiones de los operativos que conjuntamente con las fuerzas locales “están debilitando los cárteles delincuenciales”, tan es así que, presumió, “hasta pudo caminar por Santa Rosa de Lima”, lugar de residencia de José Antonio Yepez alias “El Marro”.
En tanto que, en campo, a bordo de las patrullas, el temor crece en las corporaciones policiacas de prácticamente todo el estado, ya que resienten el coletazo de esos «debilitados» grupos.
En Irapuato, donde hace unos días ejecutaron a una reconocida comandante, un oficial aceptó que hay tal facilitad para matar a los policías que “parecemos pájaros, con resortera (nos tumbas)”, de ahí que se estén dando renuncias sensibles en ese municipio ante el anuncio de que pasarán a los tránsitos a las filas de la Policía.
Ante este panorama, el Gobernador Diego Sinhue Rodríguez Vallejo dijo que los “grupos criminales ya están debilitados” y que el estado recupera más territorio.
“Se ha debilitado a los grupos crimínales, esperado que el próximo año se empiecen a notar la disminución (de homicidios). Hoy cada vez están más debilitados los grupos, cada vez nosotros avanzamos más el territorio, muestra de ello yo pude caminar por Santa Rosa, ustedes (son testigos)” pero omitió aclarar que ello fue posible ante un gran despliegue policíaco.
“NO HE ESTADO NI IRÉ A ESAS REUNIONES”
A pesar de que Guanajuato repetirá este año como primer lugar en asesinatos de policías y el primer lugar en homicidios dolosos, Rodríguez Vallejo insistió que “no he estado ni asistiré a las reuniones (de seguridad de Gobierno federal) porque ahí no se toman las decisiones, son reuniones que dan el parte informativo”.
Incluso atribuyó que dichas reuniones son por cuestiones políticas “por los cambios que hará López Obrador y ahora quiere echarle la culpa a todos”. Según informó, el Gobernador trata los temas directamente con la Marina, el Secretario de la Defensa y se reúne con los grupos de operaciones especiales del Ejército y de inteligencia de la Marina. “Yo con ellos me reúno aparte… (ahí) donde se definen los operativos”.
Trascendió que al estado llegarán en breve mil 100 elementos de la Guardia Nacional para reforzar los operativos de prevención y vigilancia en la región, esto ante incidentes que han diezmado la confianza en recuperar pronto el clima de tranquilidad de antaño.
Atentados de los últimos días, como el perpetrado contra un centro de rehabilitación donde se privó de la libertad a una veintena de personas, de las cuales 10 continúan desaparecidas, así como el hallazgo de un par más de fosas clandestinas, se suman al sentimiento de desamparo ante el ataque cometido contra los policías de Villagrán, que causó la muerte de siete oficiales y un soldado, esto cuando aún permanece en la memoria la horrible ejecución de la comandante Sonia en Irapuato.