La agencia Reuters informó que el compromiso del Gobierno mexicano fue «colaborar con Estados Unidos en la captación de un objetivo primordial» a cambio de retirar los cargos contra el General Salvador Cienfuegos.
Ciudad de México, 20 de noviembre (SinEmbargo/EFE).– El Gobierno de Estados Unidos retiró los cargos de narcotráfico y lavado de dinero contra el General Salvador Cienfuegos Zepeda, extitular de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), a cambio de que el Gobierno de México capture a un líder de la droga del más alto nivel y ligado al «trafico de grandes cantidades del opioide sintético fentanilo», informó la agencia Reuters.
La agencia de noticias con sede en Reino Unido citó a «una importante fuente mexicana», sin revelar el nombre. Esa fuente expuso que el compromiso del Gobierno que encabeza el Presidente Andrés Manuel López Obrador fue «colaborar con Estados Unidos en la captación de un objetivo primordial».
Reuters aclaró que no pudo detectar que líder del narcotráfico en México es el objetivo de canje por el General Cienfuegos Zepeda, y su fuente no le reveló el nombre para no arriesgar la investigación que estaría en curso.
De acuerdo con la lista de los ocho fugitivos más buscados por la Administración de Control de Drogas de Estados Unidos (DEA, por sus siglas en inglés), la mitad son mexicanos.
Se trata de Rafael Caro Quintero, quien fue líder del Cártel de Guadalajara; Ismael Zambada García, alias «El Mayo», a quien se considera la cabeza del cártel de Sinaloa; Nemesio Oseguera Cervantes, alias «El Mencho», quien manda en el cártel Jalisco Nueva Generación, y Jesús Alfredo Guzmán Salazar, hijo de «El Chapo Guzmán» y quien integra también el cártel de Sinaloa.
La nota de Reuters, firmada por los periodistas Diego Oré, Frank Jack Daniel y Mark Hosenball, también consignó la opinión de Daniel Millán Valencia, quien es el director general de Comunicación Social de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), y quien aseguró desconocer un acuerdo para canjear al General Cienfuegos, el militar mexicano de más alto nivel detenido en EU, por un capo de la droga.
Además, los periodistas consignaron que un portavoz del Departamento de Estado en EU declinó hacer comentarios; lo único que dijo, expusieron los autores, es lo que oficialmente se anunció: que el caso de Cienfuegos fue desestimado en una señal de confianza en la justicia mexicano y debido a consideraciones diplomáticas.
CIENFUEGOS LLEGA A MÉXICO
El exsecretario mexicano de Defensa durante el Gobierno de Enrique Peña Nieto (2012-2018) el miércoles 18 de noviembre a México procedente de la ciudad de Nueva York luego de que Estados Unidos retirara los cargos en su contra por narcotráfico y lavado de dinero. El exsecretario de la Defensa Nacional no fue detenido, autoridades mexicanas solo le informaron que ya es investigado en el país, según informó ese día la Fiscalía General de la República (FGR).
De acuerdo con la dependencia, el General de División en retiro descendió de la aeronave Gulfstream 4, matrícula N40VC, del Gobierno de los Estados Unidos, a las 18:48 horas, en el Aeropuerto de Toluca, Estado de México. Vestía ropa formal y corbata.
Las autoridades detallaron que fue llevado a una sala privada en las oficinas de hangar de la FGR para realizar un dictamen pericial médico en el que se concluyó que su estado de salud es favorable.
El exfuncionario fue notificado sobre la existencia de una investigación en su contra iniciada por la FGR con la información que recibió del Departamento de Justicia de los Estados Unidos de América.
Cienfuegos quedó libre el miércoles de todos los cargos de tráfico de drogas y lavado de activos que habían presentado contra él las autoridades estadounidenses, y está previsto que viaje de regreso a su país de manera inmediata, acompañado por efectivos de las fuerzas de seguridad de EU.
La Jueza Carol Amon, de la corte del distrito este de Nueva York, en Brooklyn, desestimó la acusación contra Cienfuegos a petición del Gobierno de EU, que menos de 24 horas antes de la vista judicial ya programada anunció que había llegado a un acuerdo con México para que fueran ellos los que investigaran al general y, en caso necesario, presentar cargos.
Un día después, el Canciller mexicano Marcelo Ebrard Casaubón dijo que México no defiende a una persona, sino un principio: “Para México no existe el escenario de la impunidad”. Y el Presidente Andrés Manuel López Obrador aceptó que “se puede interpretar” que se está dando impunidad al General Salvador Cienfuegos Zepeda, quien ya duerme en su casa.
Ebrard fue contundente: “Para México no existe escenario de impunidad. Sería muy costoso para México haber optado por tener esa conversación con Estados Unidos. Lograr que se desestime por primera vez en la historia los cargos contra un exsecretario de la Defensa, que sea retornado a México y luego no hacer nada sería casi suicida. Para eso mejor no decimos nada. Que se quede allá. ¿Qué defiende México? Un principio”, agregó.
TRABAJO DIPLOMÁTICO
«No hay nada oculto, nosotros actuamos a partir de principios y lo que se hizo en este caso fue intervenir en materia política, diplomática, para expresar nuestra inconformidad», dijo este miércoles desde Palacio Nacional el Presidente López Obrador, en una rueda de prensa matutina dedicada exclusivamente al tema y de casi dos horas.
El Presidente había criticado la detención en Estados Unidos porque ejemplificaba la injerencia externa de la DEA en México.
Por ello, para el mandatario este fue un acto de diplomacia, con intervención directa de la SRE, al reconocer que se intervino por la reputación del Ejército, y evitar que sin pruebas «se socaven nuestras instituciones».
Cienfuegos fue detenido el pasado 15 de octubre en el aeropuerto de Los Ángeles y posteriormente trasladado a Nueva York.
El General se declaró no culpable de los cinco cargos de los que se le acusaba por narcotráfico y lavado de activos, supuestamente cometidos mientras era ministro.
La Fiscalía del distrito este de Nueva York le acusaba de estar implicado en la producción, tráfico y distribución de mil kilogramos de mariguana, 500 gramos o más de metanfetamina, cinco kilogramos o más de cocaína y un kilogramo de heroína, delitos que aseguraban cometió entre 2015 a 2017, cuando estaba al frente de la Secretaría de la Defensa Nacional de México.
–Con información de EFE.