La ciudad de Oamaru, Nueva Zelanda, construyó los primeros túneles para que los pingüinos más pequeños del mundo puedan regresar a alimentar a sus crías.
Ciudad de México, 20 de noviembre (SinEmbargo).– La ciudad de Oamaru, Nueva Zelanda, ha construido los primeros túneles en ese país para que un colonia de pequeños pingüinos azules puedan atravesar una carretera.
La avenida se encuentra entre el mar y los nidos de los pingüinos azules, los más pequeños del mundo.
Por el día van a conseguir alimento al agua y por la noche regresan para alimentar a sus crías.
Dr Philippa Agnew, un científico de investigación de la Blue Penguin Colony, dijo al Herald de Timaru, que «los pingüinos se enfrentan a una multitud de personas que tratan de acercarse a ellos».
Otros de los peligros que enfrentan son las luces de los coches que los ciegan, problema que también se ha acrecentado por los flashes de la cámaras de los turistas que buscan tomarles fotos.
Jason Gaskill, gerente de la Blue Penguin Colony, dijo a CNN que el Ayuntamiento y la oficina de turismo local dieron los recursos para la obra y algunas empresas empresas donaron mano de obra y recursos para concluir la obra el pasado mes de septiembre.