El comediante Stephen Colbert y el Presidente Obama protagonizan un sketch cómico en el que el Primer Mandatario es ayudado a mejorar sus habilidades para conseguir un nuevo empleo, ya que como nos lo podemos imaginar, está a punto de dejar su actual función. Más allá de las jocosas expresiones y de una mandarina con copete de Trump, este video nos muestra la cara más amable y simple de quien es considerado el hombre más poderoso del mundo.
Ciudad de México, 20 de octubre (SinEmbargo).- El 20 de enero se acerca, fecha oficial en que el Presidente estadounidense Barack Obama dejará su cargo y así la Casa Blanca. Teniendo eso en mente, el comediante y conductor de televisión, Stephen Colbert, decidió ayudar al todavía Primer Mandatario a practicar para conseguir un nuevo empleo… y todo parece indicar que a Obama no le costará hallar una nueva carrera.
Durante la entrevista Stephen se disfraza de “Randy”, el jefe de oficina, quien le ayudará a Obama a practicar sus habilidades durante una entrevista de trabajo, ya que como refiere el comediante, “para un hombre de 55 años de edad [Obama] es difícil comenzar de nuevo”.
Al revisar el C.V. de Obama, a Randy le preocupa que en los últimos 8 años no haya sido promovido de puesto, aunque claro, Obama se defiende diciendo que llegó a lo más alto y que quizá su esposa sea la única con más autoridad que él.
Luego le corrige algunos detalles de apreciación. Por ejemplo, Obama dice que se irá de la Casa Blanca por mandato constitucional, pero Randy le dice que eso, a oídos de sus nuevos empleadores, suena como que lo corrieron por robarse materiales de oficina, por lo que le recomienda evitar esas expresiones.
De acuerdo con Randy, el que Obama haya impulsado políticas de todo tipo, evitado así inclusive conflictos nucleares, sólo significa una cosa en términos de un empleador: «es eficiente utilizando Microsoft y Excel”, además de que restablecer relaciones con Cuba se entiende como habilidad para tener “conversaciones en español”.
Asimismo, durante la grabación, Obama admite no saber por qué se ganó el Premio Nobel en 2009, además de demostrar que es bueno para atender la salud de los demás, pero no con el ObamaCare sino con un consejo práctico: te duele algo, no lo muevas… ¡y listo! No hay dolor.
Finalmente y entre muchos otros disparates, Obama admite tener 77 millones de seguidores en redes sociales, todo gracias a su posición como Presidente y a fotos de gatitos.
Sea como fuere, Stephen no era el único comediante en el salón.