La perra de nombre «Lima» fue inscrita por su propietario a través del portal web que ofreció el partido político, y fue aceptada sin ningún cuestionamiento de parte de los socialdemocrátas. De acuerdo con el Bild, este caso demuestra lo manipulable que es la consulta.
Ciudad de México, 20 de febrero (Infobae/SinEmbargo).- El periódico alemán Bild logró inscribir a una perra de tres años como miembro del Partido Socialdemócrata (SPD), según reveló este martes el tabloide, al comienzo de la votación interna en la que los militantes decidirán si aceptan formar parte de una coalición junto al partido de la canciller Angela Merkel.
El experimento del diario estaba destinado a averiguar si la consulta que el SPD hace a partir de este martes entre sus más de 450 mil militantes es susceptible de manipulación.
El SPD había estipulado que todo militante que hubiera ingresado al partido antes de las 18:00 horas del 6 de febrero tendría derecho a participar en la consulta.
La solicitud de ingreso de la perra, llamada «Lima», se efectuó por vía digital dos horas antes de que venciera el plazo.
Su inscripción se hizo con la dirección de correo electrónico del dueño de «Lima». La perra recibió también su apellido, fue ingresada con 21 años de edad (según explica el periódico, su equivalente en años humanos) y su ocupación fue marcada como «desempleada».
«Nos alegramos de que hayas decidido militar en Partido Socialdemócrata Alemán», contestó minutos después la agrupación. En tanto pasadas dos horas, y vencido el plazo de inscripción, el SPD confirmó su ingreso y la habilitó a votar por el futuro de la Gran Coalición (GroKo).
Posteriormente, «Lima» recibió diversas invitaciones para participar activamente en la consulta, tanto de los partidarios que pedían su apoyo para la coalición y formar gobierno tras las elecciones de septiembre, como de los opositores que busca separar al SPD de la Unión Demócrata Cristiana (CDU) de Merkel.
El Bild asegura que «la carrera de ‘Lima’ dentro del partido» muestra lo manipulable que es la consulta que decidirá sobre la formación de Gobierno en Alemania tras meses de negociaciones fallidas.
«Lo que logró el periódico con su experimento con un animal en pocos minutos lo pueden lograr otros con intenciones para nada humorísticas. Trolls rusos o todos aquellos que quieren desestabilizar nuestro país», dice el editorial.
Tal el caso de la campaña para reclutar nuevos militantes que votasen por el jefe de las Juventudes Socialdemócratas (JUSO), Kevin Kühnert, que fue criticada por el temor a que ultraderecha aprovechara la situación para infiltrar el SPD y frustrar la formación de Gobierno.
En tanto en la que fue la única respuesta del SPD ante el experimento, un portavoz argumentó que el proceso de inscripción dependía de la veracidad de los datos aportados por el interesado, y que un engaño podía ser penado por ley.
EL FUTURO DE LA GROKO
Este martes abrió el proceso de votación interna de la socialdemocracia, que se realizará por correo hasta el 2 de marzo. Los militantes eligen si aceptan o no el acuerdo cerrado entre los líderes del CSU, el SPD y el partido regional bávaro CSU para formar una coalición de gobierno, o si por el contrario el partido de la rosa se convierte en oposición.
Si el voto positivo triunfa, Angela Merkel volverá a ser electa canciller de Alemania por cuarta vez consecutiva y el país tendrá un gobierno con mayoría parlamentaria. A cambio, el SPD recibirá los influyentes ministerios de Exteriores, Finanzas y Trabajo.
Si en cambio triunfa el «NO», Merkel tendrá que llamar a nuevas elecciones, lo que según las encuestas significaría un fortalecimiento de la ultraderecha, o bien encarar un gobierno en minoría, lo que abriría una etapa de inestabilidad política pocas veces vista en el país.
