El padre de Molly decidió disfrazarse de diferentes personajes mientras le llevaba la comida y la bebida para sacarle una sorisa.
Madrid, 20 de enero (Europa Press).- Molly Bird, de 21 años de edad, originaria de Australia, se enteró de que era positivo a COVID-19 el 3 de enero de 2022, por lo que inmediatamente tuvo que aislarse durante siete días.
Afortunadamente para Molly, la casa de sus padres tiene un dormitorio en la parte trasera que tiene su propio baño y puertas que se abren al jardín, por lo que pudo aislarse sin dejar de tomar aire fresco.
No obstante, para hacer más amenos los largos siete días, Dave, el padre de Molly, decidió disfrazarse de diferentes personajes mientras le llevaba la comida y la bebida.
De esta manera, Bird grabó este divertido video, en el que se muestra a Dave acercándose diariamente al dormitorio de su hija con precaución, pero intentando sacarle una sonrisa.
En las imágenes se observa al padre de Molly usar diferentes materiales para sus disfraces, desde bolsas de plástico hasta conos de tránsito.
El video rápidamente se hizo viral por todo el mundo, mientras internautas aplaudieron la forma en la que el padre le hacía más amena la cuarentena a su hija.