Manuel Elkin Patarroyo primero fue denunciado por ambientalistas por «tráfico ilegal» de primates, y después recibió varias amenazas de muerte. Sin embargo, asegura que su vacuna beneficiará a unos 3 mil 500 millones de personas.
Bogotá, 20 de enero (EFE).- El inmunólogo colombiano Manuel Elkin Patarroyo, descubridor de la primera vacuna contra la malaria, anunció hoy que este año espera hacer «la entrega formal» de una versión perfeccionada, «con una eficacia cercana al cien por ciento».
El científico hizo el anuncio en el acto de presentación del Premio de Investigación Científica Manuel Elkin Patarroyo, creado por la Embajada de España por medio del Centro Cultural y Educativo Reyes Católicos, y dirigido a fomentar la investigación científica entre estudiantes de niveles no universitarios del país.
«Estamos bien adelante desde el punto de vista del desarrollo de la nueva vacuna clínicamente hecha. La primera protegió entre el 30 y el 40 por ciento pero era que le faltaban muchos más fragmentos, muchos más pedazos, muchos más componentes para llevarla cerca del cien por ciento y eso es lo que actualmente estamos trabajando», dijo a EFE.
Una vacuna contra la malaria beneficiará a unos 3 mil 500 millones de personas que viven en lugares tropicales donde es endémica esta enfermedad que mata anualmente a más de 700 mil personas en todo el mundo.
Patarroyo, de 71 años y director de la Fundación Instituto de Inmunología de Colombia (Fidic), descubrió en 1987 la primera vacuna contra la malaria, que donó a la Organización Mundial de la Salud (OMS), y desde entonces trabaja para perfeccionarla y ampliar su rango de protección.
El científico destacó que en este proceso ha tenido «algunos inconvenientes», en referencia a una denuncia de ambientalistas que hace varios años acusaron a su equipo de «tráfico ilegal» de monos en la región amazónica de la triple frontera de Colombia con Brasil y Perú.
Esa denuncia retrasó varios años el trabajo de los científicos que dirige en el Fidic, hasta que en 2015 el Consejo de Estado le autorizó a volver a utilizar cierto tipo de monos de la Amazonía en sus experimentos contra la malaria.
Al respecto, el científico dijo hoy que hay «algunos animalistas que se oponen a que se trabaje con los monitos, siendo que estos monitos son devueltos en excelentes condiciones a su medio ambiente».
«Obviamente el bienestar y el beneficio que se le puede proporcionar a la humanidad se ha visto retrasado precisamente por eso», añadió.
En octubre pasado el inmunólogo denunció que a pesar de contar con el aval de la justicia para sus investigaciones, recibió amenazas de muerte a causa de un programa de televisión en el que se dio información falsa sobre los procedimientos con monos del Amazonas.
«La verdad, fueron 110 amenazas de muerte de las cuales, según me dijeron (las autoridades) cinco eran bastante serias puesto que provenían de gente de cuidado», afirmó.
No obstante, insistió en que seguirá trabajando en investigaciones de la vacuna contra la malaria.
«En definitiva nada nos va a echar de para atrás en nuestro propósito de vida de resolver estos problemas de salud universal para entregárselos a la humanidad nuevamente libres de costo y de compromiso», manifestó.
Aseguró que una vez esté concluida la vacuna con una eficacia casi total, la donará nuevamente «a la humanidad».
Patarroyo ha sido distinguido mundialmente con premios como el Príncipe de Asturias de Investigación Científica y Técnica (1994), y en el mismo año con el Robert Koch, el más prestigioso galardón científico de Alemania, entre otros galardones.