Según la encuestadora De la Riva, los mexicanos cambiaron su postura frente a Estados Unidos. Pasó “de una relación de dependencia, subordinación disfrazada de amistad, trato civilizado y protección a cambio de lealtad, a una relación abierta de dominio, repudio abierto y relación de obediencia a cambio de no agresión”. ¿Qué representó el triunfo de Trump para los mexicanos? Los mexicanos han incorporado palabras como “guerra”, “devaluación”, “remesas” y “violencia e incertidumbre”.
Por Rocio Melgoza
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Ciudad de México, 20 de enero (SinEmbargo/EconomíaHoy).- Donald Trump pasó a la historia probablemente como el Presidente electo más controversial en Estados Unidos. El empresario y republicano ganó las elecciones del pasado 8 de noviembre de 2016 a pesar de las encuestas que no lo colocaban como favorito, derrotando así a la demócrata y favorita Hillary Clinton.
¿Qué representó el triunfo de Trump para los mexicanos? De acuerdo con la empresa especializada en investigaciones de mercado y opinión De la Riva Group, los mexicanos asociaron los resultados a conceptos como: “guerra”, “devaluación”, “remesas” y “violencia e incertidumbre”.
En una encuesta realizada a mexicanos, De la Riva Group señala que sabemos que la presidencia de Trump es algo malo, pero que no sabemos qué tan malo será o hasta dónde puede llegar.
Hacernos esas preguntas significa vivir en incertidumbre y ansiedad. Al no poderlas responder, se generan certezas maquilladas con frases como:
• “Estamos en manos de Dios”.
• “Pero nos tenemos como familia”.
• “Por algo pasan las cosas”.
• “No hay mal que por bien no venga”.
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Según De la Riva, los mexicanos cambiaron su postura frente a Estados Unidos. Pasó “de una relación de dependencia, subordinación disfrazada de amistad, trato civilizado y protección a cambio de lealtad, a una relación abierta de dominio, repudio abierto y relación de obediencia a cambio de no agresión”.
Estados Unidos representaba un referente mundial de democracia y respeto a la ley, era la ruta hacia la civilización. «Ahora es la ruta hacia la bestialización y ha oficializando la gratificación de los instintos bajos», de acuerdo con De la Riva Group.
La politóloga y escritora Denise Dresser señala que el discurso nacionalista del magnate y empresario dio voz a aquellos norteamericanos que no se atrevían y lo oficializó. Fue así como logró movilizar a la mitad de «un país polarizado que culpará a la otra mitad de sus problemas, reales o percibidos. Muchos creyeron en la promesa nativista, populista, aislacionista, racista del slogan Make America Great Again«.
En ese sentido, explicó Dresser, “Trump ha dicho muchas cosas que tienen resonancia entre su base electoral, convirtiendo a México en el ‘chivo expiatorio’: el muro, los migrantes el Tratado de Libre Comercio».
El proteccionismo económico de su campaña electoral se hizo realidad aun cuando no ha tomado posesión al cargo. En la primera semana de este 2017 comenzó a ‘latigar’ y a amenazar a empresas armadoras como Ford y Toyota de cobrarles aranceles elevados en la frontera con México de seguir invirtiendo en nuestro país.
También, en su primera conferencia de 2017, Trump volvió a arremeter contra los mexicanos al declarar que seremos quienes paguen el muro fronterizo que plantea construir para frenar el paso de migrantes hacia «su nación».
«Trump ganó porque diseminó con éxito la narrativa de Estados Unidos de una sociedad asediada, una cultura asediada, amenazada, el enemigo es musulmán o es mexicano y se construyó una visión nativista supremacista», señaló Denisse Dresser.
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NACIONALISMO ERRÓNEO
La académica considera que en el mundo se viven varios ejemplos de nacionalismos y racismo y «Estados unidos ha perdido su excepcionalidad, ahora se está convirtiendo en una Ucrania, Polonia, Hungría, o como Alemania en la década de 1920 y en 1930».
Esta variable, más la coyuntura por el alza a los combustibles, el llamado ‘gasolinazo’, le ha venido bien al presidente y fundador de Movimiento Regeneración Nacional (Morena), Andrés Manuel López Obrador, quien subió en las encuestas desde el triunfo de Trump.
Una encuesta del diario Reforma sobre preferencias rumbo a las elecciones presidenciales de 2018, dada a conocer esta semana, arrojó que su partido encabezaba las preferencias de intención de voto.
AMLO, ¿TRUMP A LA MEXICANA?
Denise Dresser considera que López Obrador subió en las encuestas «porque apela a sentimientos similares al nacionalismo, en esta cosa de volver al país grande de nuevo, este liderazgo personalizado, caudillismo, un mensaje parecido a: Soy un salvador providencial, le estoy apostando a esas cosas que quieres oír».
Para Julia Borbolla, especialista en psicología, López Obrador es una especie de «Trump a la mexicana» ya que el discurso descalificador es el que posicionó a republicano y es el mismo que «ahora está posicionando a López Obrador».
«El nacionalismo no es malo cuando sirve para crecer, es malo cuando sirve para excluir y el nacionalismo que Trump está promoviendo es excluyente, y nosotros tenemos que hacer lo contrario», refirió a EconomíaHoy la especialista en psicología.
Por lo anterior, Julia Borbolla considera que debemos aprender del pasado «pero también del presente de lo que México ha ganado, de la creatividad flexibilidad de pensamiento, una gran capacidad de adaptación, tenemos que dejar a tras esta historia milenaria de conquista, de sentirnos traicionados y tomar la historia más reciente».
Sin embargo, consideró que desde el ámbito institucional «en estos momentos no veo que el gobierno nos infundan estos sentimiento, pero tengo esperanza de que en el futuro llegue alguien que nos los infunda», mencionó Borbolla.
Por otro lado, Dresser considera que, muy a su pesar, México debe hacer, algo que hizo muy exitosamente Carlos Salinas durante su administración.
«Él instrumento una política de cabildeo con Estados Unidos y con el TLC, eso ayudó vender la imagen de México y para eso el Gobierno tiene que empezar limpiando su propia casa. Lo que hizo Carlos Salinas implicó que Octavio Paz ganara el Premio Nobel de la Paz, que Lupita Jones ganara Miss Universo y que México montara en el Museo Metropolitano de Nueva York una grandiosa exposición de nuestra Historia en 200 años», señaló Dresser.
«No podemos pararnos de pie dignamente cuando vemos que el Presidente nombra a sus cuates como procuradores, o cuando vemos gobernadores corruptos y prófugos, en la medida que gobierne mejor Peña Nieto la imagen de México será mejor».
CAMBIAR DE CHIP
Julia Borbolla hizo un llamado a revalorar el nacionalismo mexicano.
«No somos un burrito ni un jorongo. Tenemos que repetirnos todo lo bueno que tenemos los mexicanos y contrarrestar ese nacionalismo de ultranza que se está propagando con un nacionalismo auténtico, tenemos que combatir eso haciendo un nacionalismo de ultranza mexicano que esté a la altura de un narcisista que nos admire». Las dos mujeres que ‘desnudaron’ a Donald Trump
Finalmente, Denisse Dresser indicó: «Es momento de sacar la casta y que jóvenes se informen de lo que está pasando en el norte, que se involucren más allá de la coyuntura, es tiempo de ser ciudadanos y ciudadanos del mundo, cosa que muchos mexicanos no han aprendido a saber que México puede aportar mucho, no desde el juzgamiento, sino desde la dignidad y el orgullo».
