Los últimos días, en solidaridad con los habitantes de esa zona de Quintana Roo, miles de ciudadanos han protestado. Se le reclama al Gobernador Roberto Borge Angulo el haber cometido un atentado contra un patrimonio que no le pertenece a él, ni a su gobierno o a su familia y que es de todos los mexicanos.
Ciudad de México, 20 de enero (SinEmbargo).– Gerardo Vázquez Morales, Juez Segundo de Distrito en el Estado de Quintana Roo, concedió este día la suspensión provisional para que se detenga cualquier tipo de acto que implique la ejecución de remoción de cualquier tipo de vegetación así como el relleno con material pétreo en la zona denominada Malecón Tajamar.
A la par, un grupo de activistas llevó este día al Ayuntamiento Benito Juárez, en Cancún, algunos de los animales que han muerto durante la destrucción del manglar Tajamar.
Los ambientalistas, quienes se oponen al proyecto del Malecón Tajamar por el daño ecológico que provoca, pidieron reunirse con el Presidente Municipal Paul Carrillo de Cáceres, por lo que colocaron los cadáveres de dos iguanas y una ardilla en la antesala de la oficina del Edil.
Los activistas Katherine Córdova, Gerardo Solís Barretos y Alberto Villalobos se encuentran en reunión a puerta cerrada con las autoridades de la presidencia municipal.
La destrucción del manglar fue autorizada por el Gobierno federal y las autoridades municipales y estatales. Como la comunidad local se oponía, una brigada de policías y de maquinaria pesada ingresó este sábado a esa zona y empezó su destrucción. A la mañana siguiente, el daño era casi irreparable. Activistas dicen que en su prisa por acabar con la población vegetal y animal, los equipos sepultaron especies vivas.
Los últimos días, en solidaridad con los habitantes de esa zona de Quintana Roo, miles de ciudadanos han protestado por medio de mensajes en las redes sociales. Se le reclama al Gobernador Roberto Borge Angulo el haber cometido un atentado contra un patrimonio que no le pertenece a él, ni a su gobierno o a su familia y que es de todos los mexicanos.
Mediante un comunicado, Roberto Borge manifestó el sábado que los trabajos de chapeo y desmonte en el Malecón Tajamar se han llevado a cabo “con apego a la Ley”.
Asimismo, destacó que el Fonatur, desarrollador del Malecón Tajamar, obtuvo en 2005 de la Dirección General de Impacto y Riesgo Ambiental (DGIRA) de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), la Manifestación de Impacto Ambiental (MIA), la cual está vigente y le permite realizar trabajos en el área del Malecón Tajamar.
Sin embargo, este día el Juzgado Segundo de Distrito reconoció que se debe conceder la suspensión «en virtud de la naturaleza del acto reclamado [el desmonte y relleno del manglar], estando en juego derechos de las personas en lo individual así como de una colectividad».
«Con la medida suspensional no se afecta el interés público, al contrario se beneficia; pues como se ha hecho referencia, en el caso se involucran derechos de una colectividad, íntimamente vinculadas a su vez con el impacto ambiental, el cual prevalece sobre el interés particular de la persona física o moral que ejecute las obras relacionadas», dice el falló del Juez dado a conocer este día por Salvemos Manglar Tajamar.
En el Malecón Tajamar existen especies que se encuentran en peligro de extinción, las cuales están incluidas en la Norma Oficial Mexicana NOM-059 de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), entre ellas hay aves migratorias, cangrejo azul, rana leopardo, iguana rayada, cocodrilo Moreletti, garza tigre, pelícano café, entre otras, añadió el ambientalista.
Además, las cerca de 60 hectáreas estaban compuestas por diversas especies de Mangle (Rojo, Blanco, Negro y Botoncillo), así como por Palma Nakax y Palma Chit, mismas que se encuentran amenazadas.
De acuerdo con la Comisión Nacional para el Conocimiento y Uso de la Biodiversidad (Conabio), México ocupa el cuarto lugar de 125 naciones que poseen este bosque y en nuestro territorio representan el 0.4 por ciento de la superficie.