1. La soldadera (1966)
Mientras esperan el tren que los llevará a su luna de miel, los recién casados Juan y Lázara (Silvia Pinal) son separados por un comandante del ejército federal que anda reclutando hombres para combatir a los revolucionarios. Desplazándose junto con la tropa, Lázara sigue a Juan hasta que éste muere en un combate, por lo que un villista se adueña de ella, quitándole el fusil que había tomado, sin embargo una mujer le regresa el fusil, le cruza el pecho con cartucheras y le enseña a disparar; de inmediato aparecen escenas de mujeres solas disparando, luchando en la bola, saqueando una tienda.
Las mujeres están muy presentes y muy activas a lo largo de la película, pero, así como los hombres hablan de las razones de la Revolución, de la tierra y de la libertad, a Lázara lo único que le interesa es su «casita» (la que no ha tenido), y le importa un comino la Revolución; por eso, tan pronto está con los federales como con los villistas o los carrancistas. Ella sólo va de un hombre a otro, suspirando por tener una casa, y se la pasa llorando la mitad de la película, eso sí, con las cartucheras bien puestas.
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2. Enamorada (1946)
Con una fotografía de Gabriel Figueroa, Emilio «El Indio» Fernández cuenta una historia que se desarrolla en tiempos de la revolución, donde las tropas zapatistas del general José Juan Reyes (Pedro Armendáriz) toman la tranquila y conservadora ciudad de Cholula, Puebla. Mientras confisca los bienes de los ricos del pueblo, el general Reyes se enamora de la bella, rica e indomable Beatriz Peñafiel, (María Félix) hija del hombre más notable de Cholula. El desprecio inicial que Beatriz siente hacia el revolucionario da paso a la curiosidad y, finalmente, a un profundo y auténtico amor.
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3. La cucaracha (1958)
Película censurada por el clero, pues consideraban una ofensa la escena de la iglesia, en la que «La Doña» entraba al templo sin velo, además de darle la espalda al altar, fue clasificación C, a pesar de ello, se considera como una de las 100 mejores películas del Cine Mexicano.
Derrotado y casi sin tropas, el villista coronel Zeta (Emilio Fernández) llega a un pueblo controlado por los carrancistas. Aunque son aliados, Zeta encarcela y ordena fusilar al coronel Zúñiga y a varios de sus hombres para tomar el control del pueblo. Entre los muertos está el Coronel Valentín Razo (Pedro Armendáriz), el amante de «La Cucaracha» (María Felix), una bragada soldadera que capitanea un grupo de mujeres armadas. A los combates entre las tropas se suman los enfrentamientos entre Zeta y «La Cucaracha» y la aparición de Isabel (Dolores del Río), una mujer burguesa obligada a unirse al grupo de revolucionarios.