Un youtuber alertó de las estafas más comunes que ocurren en Chapultepec, para evitar que los visitantes caigan en ese tipo de fraudes, en los que muchas veces están coludidos hasta los policías que vigilan el lugar.
Ciudad de México, 19 de octubre (SinEmbargo).- Un video publicado en Youtube alertó sobre cinco estafas comunes de las que pueden ser víctimas las personas que visitan Chapultepec, en la Ciudad de México.
El youtuber identificado como Caballero Guus se dio a la tarea de explicar en qué consisten estas estafas. Por ejemplo, mencionó a los fotógrafos que ofrecen su trabajo por 10 pesos.
Explicó que el fraude consiste en ofrecer una fotografía por un costo mínimo, pero que luego de imprimirla, el precio puede llegar a los 300 pesos.
Bajo el argumento de que el costo de la captura de la imagen es de 10 pesos, pero la impresión es mucho más cara, el fotógrafo presiona al cliente para que pague, y si éste se niega, otros fotógrafos, e incluso policías, que están coludidos, rodean a la víctima para intimidarla y que pague.
Otra estafa consiste en adivinar en «dónde quedó la bolita», en el que muchas de las personas que parecen espectadores, en realidad están de acuerdo para llevar a cabo el fraude a quienes aceptan participar en el juego.
Los cómplices tienen el propósito de robar las pertenencias de quienes se acercan a ver el juego, así como de incitarlos a que participen.
El brujo con un muñeco de trapo, es otra de las estafas que se puede encontrar en Chapultepec, y es similar al juego de la bolita, ya que también recurre a cómplices que le ayudan a estafar a las personas, mientras el asegura que puede mover a su muñeco con brujería.
Mientras los curiosos están distraídos viendo el truco, los cómplices los despojan de sus pertenencias sin que se den cuenta. Además, el «brujo» pide algún billete a alguno de los asistentes, y si éste se lo proporciona, hace algún truco de magia para quedarse con el dinero.
Caballero Guus también alertó sobre la comida que se vende en las inmediaciones de Chapultepec, ya que en muchas ocasiones sólo aparenta ser un buen alimento pero en realidad sólo «disfrazan» la comida para venderla. Ejemplificó con una torta de jamón a la que le ponen la mitad de los ingredientes para que se vea apetecible.
También mencionó que al ofertar ciertos productos, si el cliente pide algún ingrediente de más, lo cobran al doble de precio, por lo que sugirió que los visitantes eviten comprar comida en esos lugares.
Por último mencionó a los populares «pajaritos de la suerte», en el que un señor con una ave adiestrada ofrece a los visitantes leerles la suerte a través de un papelito que el pájaro saca de un cajita, pero cada papelito cuesta alrededor de 50 pesos.
Además, también se puede presentara la situación de que el ave saca muchos papelitos, los cuales el dueño de pájaro le cobra al cliente, aunque éste sólo haya pedido un papelito, y si la víctima se niega a pagar, sucede como en el caso de los fotógrafos, en donde acuden cómplices del estafador para presionar al visitante a que pague todos los papeles.
