La escultura de Franco sin cabeza, instalada en el Centro Cultural del Born en Barcelona, España, apareció con una muñeca inflable entre sus brazos. La figura del dictador forma parte de una exposición que pretende llamar la atención sobre la impunidad de los símbolos fascistas.
Ciudad de México, 19 de octubre (SinEmbargo/ElDiario.es).- La polémica estatua ecuestre instalada frente al Centro Cultural del Born, en Barcelona, ha sido objeto hoy de un nuevo acto de «vandalismo» tras su inauguración ayer. Alguien ha decidido colocar una muñeca hinchable entre los brazos del dictador, a horcajadas sobre su caballo.
No es el primer ataque que recibe la escultura. Este lunes un peatón tiró un par de huevos contra ella, que tuvo que ser limpiada por los operarios del Centro Cultural. Los Mossos d’Esquadra tuvieron que intervenir «para apartar a esta persona, pero sin violencia ni mayores problemas», según explicaron los organizadores.
La escultura decapitada del dictador forma parte de la muestra temporal «Franco, Victoria, República. Impunidad y espacio urbano», que pretende llamar la atención sobre la impunidad de los símbolos fascistas en el espacio urbano.
Su instalación ha causado enfrentamientos entre los partidos políticos del gobierno y la oposición, ya que mientras el gobierno apela a su carácter memorístico, la oposición interpreta que se trata de una exhibición de símbolos fascistas.
Hoy Esquerra ha vuelto a pedir a Ada Colau, alcaldesa de Barcelona, que reconsidere su postura. Alfred Bosch, a preguntas de los periodistas sobre los altercados producidos ayer, ha respondido que «el transcurso de la inauguración de la exposición con estatuas franquistas demuestra que no es una buena idea».
Por su parte, la Fundación Nacional Francisco Franco ha exigido que se aclare cómo fue decapitada la estatua, aunque tengan que «recurrir a la vía legal» si es necesario. Para la Fundación, la exhibición es la escultura sin cabeza es un «bárbaro aquelarre».
