Ciudad de México, 19 de octubre (SinEmbargo).– Hoy, que el Pleno de la Cámara de Diputados vota la Ley de Ingresos, mientras la Comisión de Presupuestos analiza el Decreto del Presupuesto de Egresos de la Federación para el 2016, el Consejo Coordinador Empresarial (CCE) subraya la necesidad de implementar medidas y ajustes que estimulen el consumo, el ahorro, la inversión, el empleo y el crecimiento.
Sin embargo, respecto a la miscelánea de impuestos, reconoce que las condiciones económicas «no son propicias» para hacer cambios «más profundos» en materia fiscal. En congruencia con ese escenario complejo, dice, «la austeridad es una exigencia y debe ser consigna para todos los poderes y órdenes de gobierno, incluyendo órganos autónomos. Hay que asignar los recursos donde realmente son prioritarios».
Afirma que es necesario incentivar más la inversión privada, la cual genera recaudación de impuestos adicional.
«Por eso esperamos que finalmente sí van a pasar medidas como aumentar el tope a la deducción inmediata de inversiones para las empresas, a fin de que también puedan beneficiarse las de tamaño mediano, para acelerar sus proyectos productivos. Asimismo, reducir la tasa impositiva sobre dividendos y extenderla a todas las empresas», expone el Consejo en su mensaje semanal.
Con ello, explica, se trata de agilizar la circulación del dinero en la economía real; facilitar la creación de empleos y dar cauces a un mayor dinamismo en las cadenas de abastecimiento, todo lo cual deberá generar recaudación de impuestos adicional.
En cuanto al mercado interno, el sector empresarial espera que se incluirán opciones como aumentar el valor máximo de exención de ISR para venta de casas habitación, que actualmente está topado a sólo 700 mil UDIs ya que, justifica, el sector inmobiliario es uno de los más poderosos y rápidos motores de crecimiento al arrastrar a más de 60 sub-sectores económicos.
Además, la deducción de automóviles tiene un límite de apenas 130 mil pesos, y deberá aumentarse al menos a la cifra previa a la reforma del 2013.
En lo referente al Presupuesto, la consigna es que los acuerdos den cauce a «un verdadero ajuste y énfasis en la eficiencia en la asignación de los recursos, con los principios de transparencia» y comparar objetivos con resultados.
El Consejo insta a ahorrar el costo de programas, gastos o proyectos que «no son fundamentales ni recomendables» para el momento actual; que pueden fusionarse con otros, sustituirse o, de plano, eliminarse.
El reto para generar confianza es claro, concluye: responsabilidad fiscal, que asegure la solvencia del sector público y la estabilidad macroeconómica; eficiencia presupuestal y en el gasto prioritario; no descuidar la inversión y el estímulo a la actividad productiva.
