El deslave, que aún no tiene una explicación oficial, ha provocado conmoción nacional por ocurrir en una zona marginada que nació como asentamiento irregular.
Ciudad de México, 19 de septiembre (EFE/SinEmbargo).- Entre miedo y tristeza, personas afectadas por el derrumbe en el Cerro del Chiquihuite en Tlalnepantla, Estado de México, participaron este domingo en el simulacro nacional.
El ejercicio de seguridad ocurrió a nueve días de que rocas sepultaran casas del Chiquihuite, donde se encontraban Paola Daniela Campos Robledo, de 22 años, y Mía Mayrin y Jorge Dilan Mendoza Campos, de 3 y 5 años, respectivamente.
Paola y Dilan aún no han sido localizados. Autoridades mexicanas continuaron esta semana con las labores de rescate tras el hallazgo de una menor muerta en el derrumbe del Cerro del Chiquihuite.
El martes, personal de rescate extrajo el cuerpo de la menor de 3 años, con lo que suman dos cuerpos recuperados tras la tragedia acontecida el 10 de septiembre.
La niña permanecía desaparecida junto con su hermano, también menor de edad y su madre, que siguen desaparecidos luego de que su casa fuera destruida por el desgajamiento del cerro el 10 de septiembre.
La Fiscalía General de Justicia del Estado de México confirmó el martes en la noche en Twitter que el cuerpo de la menor, identificada como Mía, ya había sido reconocido por sus familiares y en breves se les entregaría.
«Luego de diversas diligencias realizadas por la fiscalía, el cuerpo de una menor de 3 años de edad, rescatado esta tarde en la zona del derrumbe en el cerro del Chiquihuite, ha sido reconocido por sus familiares, en breve será devuelto bajo los protocolos correspondientes», apuntó la dependencia.
Las autoridades del municipio de Tlalnepantla confirmaron el hallazgo y expresaron sus condolencias a los familiares la menor.
Diversos medios locales reportaron que el cuerpo de la pequeña fue devuelto a sus familiares el miércoles en la madrugada para ser velado.
El derrumbe se produjo cuando empezaron a desprenderse toneladas de tierra que dejaron sepultadas varias viviendas.
El suceso dejó en ese momento una joven muerta y varios lesionados.
Además, desde entonces eran buscados Paola Daniela Campos Robledo, de 22 años, y Mía Mayrin y Jorge Dilan Mendoza Campos, de 3 y 5 años, respectivamente.
Samuel Gutiérrez, coordinador Estatal de Protección Civil y Gestión de Riesgos del Estado de México, dijo el martes en entrevista con medios de comunicación que no hay señales de vida en la zona de desastre, aunque continuaban con las labores de búsqueda.
El deslave, que aún no tiene una explicación oficial, ha provocado conmoción nacional por ocurrir en una zona marginada que nació como asentamiento irregular.
Los vecinos denuncian que ya habían alertado a las autoridades de posibles riesgos de derrumbe en la zona, que incluso aparece en los Atlas de Riesgo oficiales por su peligrosidad.