Tras estar bajo una estricta cuarentena durante más de dos meses, algunos habitantes de la ciudad de Wuhan, en China, han asistido a multitudinarias fiestas nocturnas en piscinas en parques acuáticos; la cadena Maya Beach también ha realizado fiestas en sus instalaciones de Shanghái y Chongqing.
Beijing, China, 19 de agosto (AP).- Durante más de dos meses, los 11 millones de residentes de Wuhan soportaron una estricta cuarentena mientras el coronavirus circulaba por la ciudad del centro de China.
Ahora, algunos se dejan llevar en las multitudinarias fiestas nocturnas en piscinas de una popular cadena de parques de diversiones. El Parque Acuático Wuhan Maya Beach reabrió sus puertas a finales de junio, y los asistentes han subido este mes.
Wuhan fue el epicentro del brote de coronavirus en China y registró la mayoría de los decesos del país. La ciudad y su provincia estuvieron aisladas de finales de febrero a principios de abril. La gente no podía salir ni entrar a la ciudad y la mayoría estaban confinados en sus casas.
La propagación de la enfermedad se ha erradicado casi por completo en China, aunque esporádicamente surgen brotes aislados.
Las atracciones al aire libre y los lugares turísticos han reabierto sus puertas gradualmente, aunque con restricciones, en toda la nación.
Para acceder al parque acuático de Wuhan, los asistentes a la fiesta deben reservar su boleto por Internet con antelación e incluir su número de identificación.
Ese día, tienen que presentar la identificación y un código verde generado por una aplicación móvil que rastrea los movimientos de la población y si están sujetos a una cuarentena por el virus.
La cadena Maya Beach está celebrando fiestas similares en sus instalaciones en ciudades como Shanghái y Chongqing.