La construcción tiene 22 metros de alto y simula una flor mágica que se levanta de un delgado tallo, construida en el lujoso pueblo de Barvija es la única residencia diseñada por la arquitecta anglo-iraquí.
Ciudad de México, 19 de abril (RT/Sin Embargo).- El último proyecto de la famosa arquitecta anglo-iraquí Zaha Hadid, fallecida en 2016, ha sido finalmente completado en la región de Moscú. Situada en el lujoso pueblo de Barvija, la casa futurista, que tiene el aspecto de una flor mágica, se levanta sobre un delgado tallo a una altura de 22 metros entre las copas de los árboles. Es la única residencia privada diseñada por la difunta arquitecta.
El empresario y promotor inmobiliario ruso Vladislav Doronin, propietario de la casa, conoció a Hadid en Londres hace diez años y habló con ella de arquitectura y arte. Se cayeron bien y Doronin sugirió que diseñara un edificio residencial en Moscú, e incluso la presentó al alcalde de la ciudad, si bien el proyecto nunca se materializó porque no recibió los permisos de construcción. Sin embargo, el promotor ruso estaba decidido a trabajar con Hadid, por lo que le encargó el diseño de su casa.
Ella le pidió que describiera lo que él quería: «Quiero despertarme por la mañana y sólo quiero ver el cielo azul. No quiero ver a ningún vecino, deseo sentirme libre», respondió. Hadid tomó una servilleta y dibujó un boceto, que a Doronin le encantó.
Según el jefe de Hadid, Patrick Schumacher, ella refirió al magnate de la propiedad como «el James Bond ruso» debido a su estilo, gusto, riqueza y deseo de crear algo extraordinario. Por su parte, Doronin recuerda que Hadid era sarcástica, intelectual y aguda, por no hablar de lo increíblemente interesante que era hablar con ella. Por cierto, algunos rumores sostenían que el dueño de la casa la estaba construyendo para su entonces novia, la supermodelo Naomi Campbell.
Hadid también diseñó otro proyecto en la capital rusa: el edificio de oficinas Dominion.