Campesinos, amas de casa y jóvenes integrantes del movimiento civil Mexicali Resiste bloquearon este domingo las instalaciones de la cervecera estadounidense Constellation Brand, tras conocer documentos y dictámenes que demuestran “el tráfico de influencias, la desconsideración del gran impacto ambiental, así como la violación a los derechos humanos y colectivos que resguardan el acceso al agua”. De acuerdo con los manifestantes, la concesión otorgada a la empresa en el actual gobierno del panista de Francisco, «Kiko», Vega de Lamadrid representará la privatización de una tercera parte del agua.
Ciudad de México, 19 de febrero (SinEmbargo/Zeta/Infobae).– Integrantes del movimiento civil Mexicali Resiste bloquearon este domingo las instalaciones de la cervecera estadounidense Constellation Brand en protesta por los documentos y dictámenes que demuestran el presunto tráfico de influencias y el gran impacto ambiental que provocará la construcción de la planta.
“Hemos bloqueado los accesos de Constellation Brands a raíz de la obtención de documentos y dictámenes que demuestran el tráfico de influencias, la desconsideración del gran impacto ambiental así como la violación a los derechos humanos y colectivos que resguardan el acceso al agua”, expuso el grupo de manifestantes en un breve comunicado recogido por el semanario Zeta.
En la protesta participaron campesinos, amas de casa y jóvenes integrantes del movimiento bloquearon los accesos de esta empresa norteamericana instalada en el Valle de Mexicali.
Se trata del mismo grupo que a principios de enero bloqueo los acceso a las instalaciones de Petróleos Mexicanos (Pemex) –en las afueras de Mexicali- en protesta contra el alza a la gasolina y que después de casi dos semanas de permanecer en el lugar fueron desalojados “pacíficamente” –con la presencia de 400 elementos de las fuerzas federales- y de ahí se trasladaron hasta las oficinas de Recaudación e Rentas del Estado a manera de protesta contra el aumento en el costo de reemplacamiento y revalidación vehicular.
Es el mismo grupo que obligó al Gobierno estatal a detener una Ley que pretendía privatizar el agua.
De acuerdo con Zeta, el grupo ciudadano ha sido convocante de las últimas cuatro multidinarias manifestaciones en Mexicali, y que han reunido acerca de 15 mil ciudadanos en la primera, 30 mil la segunda y cerca de 50 mil la tercera, en todas el tema del agua, la privatización y la instalación de la cervecera de capital estadounidense en Mexicali han sido parte de los reclamos.
Apenas el pasado lunes fueron desalojados de manera violenta por elementos de la policía municipal de Mexicali, del cordón humano formado en torno al edificio del Palacio Municipal –hubo 14 detenidos- y la madrugada del 30 de enero también fueron convencidos de desalojar pacíficamente las instalaciones tomadas del Gobierno del Estado y Congreso, también con el uso persuasivo de cerca de 500 elementos de la Policía Estatal Preventiva y de la Ministerial.
Los manifestantes expresaron que la concesión otorgada a la empresa Constellation Brand el actual gobierno del panista de Francisco, «Kiko», Vega de Lamadrid representará la privatización de una tercera parte del agua.
El conglomerado cervecero estadounidense Constellation Brands es propietario de las marcas de Grupo Modelo en Estados Unidos, y el año pasado acordó la adquisición de Ballast Point, un fabricante de cerveza artesanal, por mil millones de dólares.
Sus cervezas importadas de México –que incluyen Corona y Modelo Especial– fueron clave en el crecimiento anual del 24 por ciento de la empresa de 2010 a 2015, según Kenneth Shea, analista de Bloomberg Intelligence.
En tres años de su gobierno, “Kiko” Vega no sólo ha acumulado una deuda millonaria, también el “hartazgo social”, siendo Mexicali el epicentro de las protestas en su contra. En enero pasado, cuando entró en vigor el llamado gasolinazo, surgió la afirmación de que la capital del estado había “despertado” al lograr organizar tres manifestaciones masivas, la última con hasta 45 mil personas. Sin embargo, desde finales del año pasado se gestó un movimiento de rebelión cívica que se inició con protestas contra el reemplacamiento, el incremento a las tarifas de luz y la Ley de Agua, aprobada el 20 de diciembre de 2016.
Dicha norma permitía, entre otros aspectos, la privatización del servicio de agua potable, el aumento y liberalización de las tarifas y el corte del suministro hídrico tras 90 días de impago. La iniciativa fue aprobada en la sala de juntas del Congreso local por diputados de los partidos Acción Nacional (PAN), de la Revolución Democrática (PRD) y del Movimiento Ciudadano (MC). Ante la ola de manifestaciones, el Gobernador decidió abrogar la ley, pero continuó con la construcción de un acueducto para abastecer, con aguas del Valle de Mexicali, a Constellation Brands, una planta que fabricará cerveza del Grupo Modelo para exportarla a Estados Unidos.
Hace más de un mes y medio, en Mexicali se logró lo que en ninguna otra parte del país: la organización ciudadana, a través de redes sociales, por un bien común. Desde hace 27 años el estado no registraba protestas de esa magnitud, la última se vivió en enero de 1990, durante la primera administración panista en Baja California a cargo de Ernesto Ruffo Appel, cuando miles marcharon por las altas tarifas eléctricas que se impusieron en la región.
Las protestas contra “Kiko” Vega se han tornado violentas. El más reciente se registró el pasado lunes a las afueras del Palacio Municipal de Mexicali, donde unas 300 personas mantenían un plantón para exigir al Alcalde panista, Gustavo Sánchez, la reducción del impuesto predial y la eliminación del cobro por alumbrado público, entre otras demandas.