El pasado 31 de julio de 2015, los tres implicados en el crimen sometieron a sus cinco víctimas en el interior de un departamento en la colonia Narvarte. El día de hoy, uno de los implicados recibió una condena por 315 años.
Ciudad de México, 19 de enero (SinEmbargo).- Uno de los implicados en el homicidio del fotoperiodista Rubén Espinosa Becerril, la activista Nadia Vera Pérez y otras tres mujeres en la colonia Narvarte, fue condenado a 315 años de cárcel, informó la Procurduría General de Justicia capitalina (PGJDF).
El juez 25 penal, con sede en el Reclusorio Preventivo Oriente, determinó que el imputado es penalmente responsable de los delitos de feminicidio agravado diversos cuatro, homicidio calificado con ventaja, robo agravado en pandilla, y robo agravado cometido respecto al vehículo Mustang que era propiedad de una de las víctimas.
Además, el acusado deberá pagar una multa por 57 mil 708.75 pesos, y le serán suspendidos todos sus derechos políticos.
La autoridades explicaron que respecto a los otros dos probables implicados en el caso, el proceso continúa en etapa de instrucción.
Los hechos ocurrieron el pasado 31 de julio de 2015, entre las 12:00 y las 15:00 horas, los tres implicados en el crimen sometieron a sus cinco víctimas en el interior de un departamento ubicado en la calle Luz Saviñón, de la colonia Narvarte, donde privaron de la vida a Yesenia Atziri Quiroz Alfaro, de 18 años; Mile Virginia Martin; Nadia Dominique Vera Pérez, de 32 años; Rubén Espinosa Becerril, de 31 y Olivia Alejandra Negrete Avilés, de 40 años y que trabajaba en el lugar como empleada doméstica.
Tanto Nadia Vera como Rubén Espinosa habían llegado a la Ciudad de México en 2015 escapando de un entorno de agresiones y amenazas recibidas en la Ciudad de Xalapa, Veracruz, que en entrevistas con diversos medios de comunicación atribuyeron a empleados del Gobierno de aquel Estado.
Nadia Vera, quin había formado parte del movimiento 132 y de la Asamblea Estudiantil de Xalapa, había sufrido además un allanamiento y una violenta detención en 2012.
Espinosa, por su parte, reiteradamente denunció haber observado vigilancia por parte de personas que consideraba agentes del Gobierno y similares a los que, como denunciaron sus compañeros reporteros, les tomaban fotografías en las manifestaciones de descontento social que cubrían.