El cortometraje fue filmado en parte en la Escuela Superior de Música y en el Centro Nacional de las Artes de la Ciudad de México. De acuerdo con Argüero, los testimonios que han escuchado de estudiantes de música y de músicas profesionales, aunque no precisamente de esta escuela, también señalan esta problemática.
Ciudad de México, 18 de septiembre (AP).— El cortometraje mexicano de ficción Crescendo, sobre el acoso sexual en el ámbito escolar y laboral, recibió el Premio Estudiantil de la Academia de Cine .
Su director, Percival Argüero, dijo que surgió como una necesidad de aportar a la conversación sobre este problema generalizado desde una historia de empoderamiento.
Crescendo es el proyecto de graduación de Argüero, de 35 años, del Centro de Capacitación Cinematográfica (CCC), una escuela pública de cine. El director comenzó a desarrollar la historia junto con su hermana Hipatia, quien fue la guionista en 2016 antes de que explotara el movimiento #MeToo pero cuando la conversación sobre el acoso sexual ya era bastante fuerte en México.
“Se hizo muy evidente que las mujeres estaban hablando de esto de manera muy, muy pública y pa’ que lo escucháramos todos y entonces esa fuerza y esa rabia, que nos inundó a quienes empezamos a escuchar y empezamos a darnos cuenta de la seriedad del problema, esa rabia fue la que nos impulsó a Hipatia y a mí a desarrollar la historia”, dijo Argüero en una entrevista por videollamada con The Associated Press desde la Ciudad de México.
El premio, anunciado esta semana, es el tercero para el CCC en sus 45 años de historia. Los anteriores habían sido entregados en 2001 (El ojo en la nuca, de Rodrigo Plá) y 1993 (El último fin de año, de Javier Bourges). La Academia recibió mil 474 inscripciones de 207 escuelas de cine de Estados Unidos y 121 internacionales para el premio. Los otros dos cortos internacionales galardonados son de Bélgica y Estonia.
“Es un reconocimiento a la formación artística de alta especialidad y al compromiso de estudiantes, docentes y la institución que se sostiene de los recursos públicos”, señaló el director general del CCC, Alfredo Loaeza, en un correo electrónico enviado a AP. “Nos enorgullece especialmente que se premie un corto que visibiliza el tema de violencia de género y las relaciones de poder”.
Antes de estudiar cine, Argüero estudió filosofía en la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM). Su hermana Hipatia también es egresada de la institución en Letras Inglesas. La misma UNAM se ha visto sacudida por los reclamos de mujeres estudiantes que exigen estar libres de acoso por parte de maestros y alumnos. Algunas facultades incluso fueron tomadas por grupos feministas antes de la pandemia del nuevo coronavirus.
El cortometraje fue filmado en parte en la Escuela Superior de Música y en el Centro Nacional de las Artes de la Ciudad de México. De acuerdo con Argüero, los testimonios que han escuchado de estudiantes de música y de músicas profesionales, aunque no precisamente de esta escuela, también señalan esta problemática.
“Es un problema sistémico, como que atraviesa toda nuestra experiencia y está ahí presente en nuestras instituciones”, dijo Argüero. “A nosotros como artistas nos toca ver todas estas situaciones de acoso, de abuso de autoridad en el ámbito artístico, es lo que tenemos más cerca y es sorprendente, porque con quien te pongas a chambear (trabajar) para desarrollar un proyecto de esta naturaleza tiene las historias de terror de acoso y violencia sexual”.
El resto de las escenas también fueron filmadas en la capital a lo largo de siete noches y dos días. Tenían un equipo de producción de unos 40 integrantes en el que otra hermana de Argüero, Larisa, fungió como productora.
En el cortometraje, presentado en la pasada edición del Festival Internacional de Cine de Morelia, la violinista Victoria está a punto de tener una importante audición para ingresar a un exigente cuarteto de cuerdas de un profesor al que admira. Es invitada junto con su novio a la despedida de una violinista mayor que deja la agrupación por estar embarazada y durante la fiesta se va dando cuenta de que el director tiene una actitud rara con la violinista saliente y sus sospechas aumentan cuando ella le advierte que tenga cuidado.
Aunado a esto compite con su amiga René por el puesto y empieza a fantasear, primero con lastimarla y también con que René está tratando de seducir al director. El corto es ambiguo, ¿decide intentar un trío sexual con su amiga y el director?, ¿su amiga se lo propone o es solo una fantasía? Victoria está cada vez más tensa por la situación que apunta a un clásico acoso en el que se intercambian favores sexuales en audiciones, una práctica normalizada en el pasado y que ahora se combate en las artes.
“Hipatia y yo teníamos muy claro que queríamos narrar una historia de empoderamiento, ése fue el pensamiento rector a lo largo del desarrollo”, dijo. “Una película que sea sobre el empoderamiento frente al abuso de autoridad. Eso necesariamente nos obligó a narrar una historia de una mujer que se mete muy profundo en este problema, en esta situación y emerge victoriosa”.
El elenco es una mezcla de actores y músicos. La protagonista, interpretada por Sofía Sylwin, es actriz profesional, el director del cuarteto es interpretado por el compositor Jacobo Lieberman, quien ha hecho bandas sonoras para múltiples películas y documentales como, La jaula de oro, Tempestad y El hombre que vio demasiado. Alexander Bruk y Pablo Chemor, quienes interpretan a los otros dos miembros del cuarteto, son músicos en la vida real.
Tuvieron un entrenador de interpretación musical, Nabani Aguilar, que los guio durante tres meses para lograr los movimientos de un ejecutante de violín profesional y tener un playback convincente. La música fue grabada antes de la filmación y producida por Charles Daniels. El resultado final ha pasado la prueba con músicos profesionales.
“Incluso inconscientemente los músicos cada vez que ven una película en la que los actores tocan música están muy atentos para ver si está actuando o está tocando y hemos recibido puros comentarios bien positivos”, dijo Argüero.
Argüero prepara guiones de la que espera sea su futura ópera prima. La ceremonia de entrega del Premio Estudiantil de la Academia de Cine será el 21 de octubre, de manera virtual por la pandemia. Ese día el equipo de Crescendo sabrá si ganaron una medalla de oro, plata o bronce. El cortometraje puede también buscar ahora una nominación al Óscar en 2021.
“Creo que tenemos un trabajo muy grande por hacer particularmente quienes no nos identificamos como mujeres”, dijo Argüero. “Tenemos muchísimo que aprender y tenemos que desprogramarnos. Es un trabajo muy duro, es un trabajo muy pesado, de pronto es muy incómodo tener estas conversaciones… lo que tenemos que hacer es aprender a escuchar, escuchar a estas víctimas de la violencia de género”.