La vinculación a proceso fue otorgada después de una extenuante audiencia que se prolongó por casi 12 horas, donde se presentaron los datos de prueba suficientes para determinar el veredicto.
Ciudad de México, 18 de junio (SinEmbargo).— La Fiscalía General del Estado de Oaxaca (FGEO) informó que logró obtener de un Juez de control con sede en Tuxtepec, auto de vinculación a proceso contra un expolicía municipal de Acatlán de Pérez Figueroa identificado como “S.R.R.”, señalado como probable responsable del homicidio de Alexander, un adolescente de 16 años.
A través de un comunicado, la dependencia detalló que el asesinato del joven ocurrió el pasado 9 de junio, en esa localidad de la región de la Cuenca de Papaloapan.
La vinculación a proceso fue otorgada después de una extenuante audiencia que se prolongó por casi 12 horas, donde se presentaron los datos de prueba suficientes para determinar el veredicto.
.@FISCALIA_GobOax logra vincular a proceso y poner en prisión a ex policía municipal de Acatlán de Pérez Figueroa por homicidio de adolescente@RVasconcelosM@FGRMexico@SEGOB_mx@M_OlgaSCordero@USEmbassyMEX@USAmbMex@sipinnaoax@SIPINNA_MX@DIF_NMX @causaencomun @GobiernoMX pic.twitter.com/9swbLY2T8b
— Fiscalía General (@FISCALIA_GobOax) June 18, 2020
De acuerdo con la carpeta de la investigación 18130/FCUECATLÁN/2020, el 9 junio del año en curso, alrededor de las 22:30, Alexander circulaba a bordo de una motoneta marca Vento en compañía de otros jóvenes sobre la carretera El Amate-Acatlán de Pérez.
Fue en el tramo carretero Vicente Guerrero, la altura del crucero “La Cruz”, cuando la patrulla 023 de la Policía Municipal -que circulaba sin luces y en sentido contrario, les cerró el paso abruptamente.
Del vehículo descendió el policía municipal. La Fiscalía detalló que el presunto homicida portaba una escopeta, misma que disparó contra el joven, privándole de la vida a causa de laceración encefálica por los perdigones percutidos.
El policía y presunto homicida fue capturado y llevado a la audiencia, donde fue vinculado a proceso después de que se dieran las pruebas. El Juez de control determinó darle al imputado la medida de prisión preventiva oficiosa y dio 2 meses para el cierre de la investigación complementaria.
“Con estas acciones, la Fiscalía General reitera que no habrá impunidad en este ni en ningún caso donde elementos de los cuerpos policiacos atenten contra la integridad y la vida de las familias oaxaqueñas”, concluyó la dependencia.
EL CRIMEN
Alexander estudiaba en Orizaba, Veracruz, pero por la contingencia y la suspensión de clases presenciales derivadas de la COVID-19 decidió irse a Oaxaca a pasar la cuarentena con su madre. Tenía al menos dos meses en la comunidad Vicente Oaxaca, en el municipio de Acatlán.
El martes 9 de junio salió de su casa por la tarde-noche, tomó su moto y se dirigió con un par de amigos a una gasolinera para ir a comprar refrescos y echar gasolina, pues irían por unas pizzas para festejar el cumpleaños de uno de sus compañeros, narraron Monserrat y Alexis.
“Por la contingencia hay muchas tiendas cerradas, solo estaba abierta una gasolinera que está a unas cuatro o cinco cuadras de la casa. Ellos iban a comprar refrescos, pero como ni eso había, solo echaron gas”, relató el hermano.
Al salir de la estación de servicio, una patrulla ( la número 023) interceptó el paso de los jóvenes. Testimonios recabados por la familia afirman que los agentes no les emitieron ningún comando, no les gritaron nada, sólo trataron de cerrarles el paso con las luces y torretas apagadas.
“Cuando la patrulla se les atravesó, ellos la quisieron pasar un lado –me imagino que para no pegarle–, pero la reacción de los policías fue empezar a dispararles a los que iban en la moto. Les dispararon a dos”, dijo Alexis.
“El niño (Alexander) traía su cubre-bocas, y ya, porque traía su cubrebocas dicen que lo confundieron con un maleante […]”, agregó Monserrat.
Alexis relató que los demás amigos –al ver lo ocurrido–acudieron de inmediato a dar aviso a la madre de Alexander.
“Mi mamá llegó ahí. Mi hermano estaba todavía debajo de la moto, tirado. Ella, como pudo, movió la moto. La gente comenzó a acercarse y a los 10 minutos llegué yo. Vi que mi hermano todavía tenía signos vitales, pero cuando ya lo trasladamos a la clínica y lo revisaron, ya no tenía vida”, detalló el entrevistado.
TRATARON DE SEMBRAR EL ARMA
Aunado al asesinato trataron de sembrar un arma al joven, pero no lo lograron porque una mujer se percató de los hechos y les reclamó, aseguraron los entrevistados.
“Todavía que lo mataron, quieren ensuciar su nombre diciendo que él portaba un arma, cuando eso no es cierto”, dice molesta Monserrat.
Una vecina de la comunidad habría visto cuando un policía se acercó, limpió un arma y con un guante se la puso en la mano al joven, narró la tía. Sin embargo, la mujer, se acercó a los policías y les advirtió lo que presenciaba, de acuerdo con Alexis:
“Cuando la señora vio que estaban haciendo eso, ella se metió y les preguntó qué estaban haciendo; que ella estaba viendo lo que hacían; querer encubrir y la señora, les dijo ‘que quitaran el arma, porque todos sabían que no la traía el niño’. Los policías ya no dijeron nada y se hizo para atrás”.
“El policía quiso ensuciar el nombre de mi sobrino, le pusieron la pistola con un guante, ese policía la limpió y se la puso en su mano, para decir que él, Alexander, los había atacado, pero eso no es cierto. Hay muchos testigos que eso no es cierto”, abundó Monserrat.
-Con información de Sugeyry Romina Gándara