Durante esta emergencia sanitaria por la COVID-19 se hace más palpable el llamamiento del Papa Francisco a cuidar la naturaleza.
Ciudad del Vaticano, 18 de junio (AP).- El apasionado llamamiento del Papa Francisco a proteger la naturaleza se hace aún más urgente en medio de una pandemia que altera los estilos de vida y deja patente la fragilidad de la vida, indicó el Vaticano el jueves.
El brote mundial de COVID-19 se produjo cuando varios departamentos del Vaticano tenían avanzada la redacción de un documento pidiendo a los fieles que tomen medidas concretas y locales por el quinto aniversario de la encíclica de Francisco, que denunció la explotación del entorno y pidió encarecidamente cuidar del planeta.
La crisis del coronavirus, señaló el Vaticano en su petición por el aniversario, “hace aún más evidente, cinco años después de su publicación, el valor” de la encíclica del Papa.
Aunque los pobres “son los menos responsables del calentamiento global, son los más vulnerables en cuanto a sus efectos”, señaló el documento de aniversario, de 227 páginas. Lamentando la creciente brecha entre ricos y pobres, el Vaticano dijo que la pandemia había dejado clara la necesidad de reconsiderar políticas de reducir los programas del estado del bienestar. No identificó a países concretos.
“La emergencia sanitaria, la soledad, el aislamiento para combatir el contagio, nos pusieron repentinamente cara a cara con nuestra fragilidad como criaturas finitas”, indicó el texto. La pandemia “nos recuerda descubrir o redescubrir qué es esencial en nuestras vidas”, indicó el Vaticano.
El documento repasa cómo han respondido los católicos en todo el mundo a la encíclica del Papa. Enumera muchos ejemplos de proyectos concretos e iniciativas de base emprendidas en los últimos años por iglesias locales, organizaciones benéficas o parroquias para evitar daños medioambientales o salvar recursos naturales.
Se ponen de ejemplo medidas tomadas en el diminuto estado del Vaticano, como reciclar el agua que pasa por las fuentes monumentales o hacer que los empleados de la Santa Sede lleven sus propias tazas para utilizar en la cafetería del Vaticano, en lugar de emplear recipientes de plástico de un solo uso.
Las autoridades vaticanas señalaron que se han instalado paneles solares en el observatorio astronómico de la Santa Sede en Arizona, Estados Unidos.
