Los expertos del Instituto Tecnológico de Morelia y la Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla implementaron un sistema de reconocimiento de patrones de ladridos e identificaron cuáles eran los que expresaban alerta o agresividad y cuáles representaban alguna actitud o sentimiento positivo.
Ciudad de México, 18 de junio (SinEmbargo).- ¿Se han preguntado qué trata de comunicar su mascota cuando ladra? El doctor en ciencias computacionales Humberto Pérez Espinosa y un grupo de expertos en distintas ramas, desarrollaron el prototipo de un software que es capaz de clasificar los sonidos que emite el mejor amigo del hombre para saber si son causados por alguna situación de riesgo o simplemente por felicidad.
«Todos sabemos que los perros tratan de comunicar algo a través de los ladridos, pero son pocas las personas que en realidad desarrollan la habilidad de comprender lo que tratan de decirnos», señaló el experto, en entrevista para SinEmbargo.
En la primera etapa de trabajo para llegar este punto, un aplicador acudía a la residencia del perro, se ponía de acuerdo con los dueños, llegaba como un extraño tocando la puerta y en ese momento se grababa la primera reacción –que es cuando el perro ladra frente a la presencia de un desconocido–, posteriormente se retiraba la persona y regresaba con una actitud más sospechosa o agresiva, allí se realizaba la segunda grabación, y finalmente, los dueños entretenían al perro con su juguete favorito o algún estímulo que lo alegrara.
«De esa manera pudimos crear una base de datos de ladridos grabados en diferentes contextos», explicó.
Los expertos analizaron las distintas propiedades acústicas de los ladridos con la aplicación de algunas técnicas de limpieza para eliminar los ruidos propios de una casa. Así implementaron un sistema de reconocimiento de patrones y a partir de una señal de audio identificaron cuáles eran los ladridos con grados de alerta o agresividad y cuáles los que se grabaron al jugar con la mascota y representaban alguna actitud o sentimiento positivo.
La plataforma, a partir de una grabación, procesa la señal, clasifica los ladridos, regresa una respuesta sobre cuál es el nivel de alarma que representan, así es posible comunicar con otras aplicaciones que le permitirán al usuario conocer si existe alguna situación de riesgo en su vivienda, por ejemplo, robos o incendios.
La plataforma denominada «Clasificación y reconocimiento de ladridos» es un trabajo en conjunto entre la empresa de publicidad e innovación Efecto Mescalina, el Instituto Tecnológico de Morelia y la Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla (UPAEP).
Actualmente, el grupo de especialistas trabaja para ofrecer mediante la app, mayores beneficios para las mascotas. «Podría utilizarse para atender cuestiones de salud del perro, para cuidar el bienestar de las mascotas, saber por ejemplo, si les duele algo, si están enfermos, etcétera», dijo el doctor Pérez.
«Hay una preocupación de las personas por sus mascotas, así pueden tener una mayor consciencia de su cuidado. Una aplicación de este tipo puede tener usos prácticos, tanto para estar al cuidado del perro, como para saber si la casa y quien se encuentre en ella están en peligro», continuó.
Para lograr la obtención de los patrones, se grabaron los ladridos de 35 perros de razas comunes en los hogares mexicanos, entre los que encontraron Schnauzer, French Poodle, Chihuahua, entre otras.
“El software ya está completo en una versión beta, falta robustecerlo con más ladridos y modelos de reconocimiento, pero ya es funcional; la segunda etapa es hacerlo flexible hacia diversas aplicaciones, no solo de seguridad, sino que se pueda conectar a una API (interfaz de programación de aplicaciones) para generar datos sobre la salud o bienestar del perro o su dueño, u otras cuestiones, pero eso quedará abierto para que se basen en nuestra plataforma”, explicó en entrevista para la Agencia informativa del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnologia (Conacyt).
Actualmente, los creadores –quienes trabajaron con una empresa, a través de los fondos del programa de estímulos a la innovación de Conacyt–, lanzaron una campaña para conseguir fondos y desarrollar otras partes del proyecto que tienen planeadas, entre ellas, identificar si el perro ladra porque tiene algún tipo de malestar. Además, buscan patentar su proyecto.
Mescalina trabaja en el desarrollo de una especie de pechera que incluye un micrófono encargado de grabar todo el tiempo para enviar los datos a través de Internet, a la plataforma que se aloja en la nube para regresar posteriormente la clasificación de los ladridos mediante una aplicación móvil.