La pulverización de la izquierda en México, ha sido muy evidente en las pasadas elecciones, nada ha cambiado en la configuración del votante, los números son desoladores para la izquierda tradicional en manos del PRD, ¿Qué es lo que le sucedió?, una dirigencia aferrada, el control de los “chuchos”, la separación de López Obrador y el nulo caso a lo que ya venía advirtiendo el padre del PRD el Ingeniero Cuauhtémoc Cárdenas, han sido los componentes para el duro golpe recibido en las elecciones intermedias.
¿Qué lecciones dejará?, me parece que ninguna, bajo el control del grupo en el poder del PRD, el partido tradicional de izquierda está destinado en carácter de ultimátum a renovarse o morir, es decir, el panorama que se vislumbra es la decadencia gradual y paulatina del PRD. MORENA y López Obrador han logrado capitalizar al votante de izquierda y a los votantes afines al llamado “Proyecto de Regeneración Nacional”, los números quizá engañan, pues se dice que: sólo lograron ganar la capital del país y obtener el 10% de la votación total de estas elecciones intermedias.
Pero no sólo ha sido eso, MORENA ha logrado posicionarse en el país, en estados como Puebla, Tabasco, en donde ha quedado en muchos distritos como segunda o tercera fuerza electoral, la inercia de 18 años y la desaparición del PT harán que cada día se encuentren más afiliados y simpatizantes en las filas del partido de López Obrador con miras a la presidencial del 2018.
Mucho se ha dicho que el poder está demostrado con las coaliciones y queda claro que las coaliciones electorales dan muy buen resultado, como ejemplo la aplastante victoria en coalición del entonces candidato al gobierno de Puebla Rafael Moreno Valle, o los resultados que le presenté la semana pasada respecto al beneficio de la coalición VERDE-PRI, que en otro panorama de ir en candidaturas solitarias, me parece que estaría hasta en riesgo de perder el registro.
¿Qué sucederá? No se debe olvidar que las elecciones no han terminado, el próximo año estarán en juego las gubernaturas de: Aguascalientes, Zacatecas, Sinaloa, Tlaxcala, Puebla, Hidalgo, Oaxaca, Quintana Roo, Tamaulipas, Chihuahua, Veracruz y Durango, parte del control nacional con rumbo al 2018, los destapes se empiezan a dar y queda claro que no será nada sencillo ser el abanderado de un partido político con miras al 2018, pero la configuración es muy clara.
El único candidato perfilado sin competidor “interno” al 2018 es Andrés Manuel López Obrador, en el PAN se han adelantado los tiempos y Margarita Zavala ha expresado su intención de aparecer en la boleta del 2018. ¡En el PAN!, me parece que no, el PAN está controlado por el Nieto de Madero y no lo soltarán, Madero quiere aparecer en la boleta, pero olvidan que Rafael Moreno Valle está con la mira puesta al 2018 desde hace ya algunos años, el PRD no tiene un candidato dibujado aún, pero Mancera se empieza a desmarcar tras la derrota y maneja la idea de que él es un ciudadano sin partido, en ese sentido también el maltratado y bloqueado Marcelo Ebrard podrá contender por Movimiento Ciudadano o en el mejor de los casos buscar la candidatura ciudadana, en el partidazo los suspirantes son visibles, Osorio Chong, Beltrones, Emilio Gamboa Patrón, pero creo que están trabajado al menos en redes la imagen de su Secretaria General Ivonne Ortega, pensando en un mundo electoral en donde las mujeres son las mayores representantes del voto mexicano y con la aparición en la escena al 2018 de Margarita Zavala, la idea de Ortega no suena nada descabellada.
A estos ya sabidos, debemos sumarle al candidato natural, en caso de que el experimento en Nuevo León de buenos resultados, me refiero a “El Bronco” y a cuanto astuto quiera incursionar en la nueva moda mexicana, de las candidaturas independientes.
Debemos estar atentos y saber distinguir entre una candidatura independiente, con candidato independiente “verdaderamente” a un candidato oportunista que utilizará esta figura para lograr la candidatura pese a su militancia en algún instituto político o representación en algún espacio de poder público.
Así las cosas el panorama 2018 se antoja muy complicado, el PRI se frotará las manos los próximos tres años, esperando se cumplan los designios y lleguen a la boleta todos estos candidatos que aquí he planteado, pues como lo hemos advertido, al pulverizar el voto y dividir al electorado, la base priista, el voto corporativo y voto duro les dará el triunfo electoral de igual manera que en las pasadas elecciones.
Nos vemos la próxima semana.
@Nexoestudios