López Obrador destacó que en su Gobierno no han habido hechos de represión, aunque «sí han habido algunas cosas que lamentamos, pero se han corregido».
Ciudad de México, 18 de mayo (SinEmbargo).- El Presidente Andrés Manuel López Obrador defendió la participación del Ejército en las calles asegurando que la política en su Gobierno es «completamente distinta» a pesar de las recomendaciones de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) de bajar el número de elementos militares en tareas de seguridad pública, debido a su relación con las desapariciones en México.
«Debemos de actuar con juicio práctico, con argumentos, puede ser que ideológicamente no nos guste la participación del Ejército en tareas de seguridad pública, pero si esa participación se lleva a cabo con respeto a los derechos humanos y no hay en los mandos superiores la intención de reprimir al pueblo, ya eso hace una diferencia considerable», dijo el mandatario.
No va a sacar a los militares de las calles.
A pesar de que es una recomendación para disminuir los indices de desaparición, el presidente @lopezobrador_ continuara con su política. pic.twitter.com/5FxK1gqVaC
— Ruido en la Red (@RuidoEnLaRed) May 18, 2022
«Si al Ejército se le da orden de llevar a cabo masacres limpias y de rematar a heridos, pues eso es reprobable, eso es inhumano […] y no sólo eso, es hasta un delito de quien ordena ese proceder», añadió el Presidente.
López Obrador destacó que en Gobierno no han habido hechos de represión, sin embargo, «sí han habido algunas cosas que nosotros lamentamos, pero se han corregido».
Además el titular del Ejecutivo ejemplificó el cambio de política del Ejército durante su mandato, al exponer el caso reciente donde militares fueron perseguidos y expulsados por presuntos sicarios del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), en Nueva Italia, Michoacán, y que no incurrieron en una respuesta armada.
Asimismo, mencionó el caso de la detención de Ovidio Guzmán López, hijo de Joaquín «El Chapo» Guzmán Loera, en el que hicieron «la valoración de que iban a significar más de 200 muertos», y optaron por su liberación y evitar muertes de «inocentes y familias que no tenían nada que ver».
«Es distinta nuestra política, completamente distinta», finalizó el Presidente.