En junio pasado, el país se indignó con el caso de la pequeña Valeria, quien fue secuestrada, violada y asesinada en Nezahualcóyotl, Estado de México.
Dos meses antes, el cuerpo de “Calcetitas rojas” fue localizado en la Avenida Borde de Xochiaca, también en Neza. A la pequeña la mataron dos veces: primero la golpearon hasta que su corazón dejó de latir; luego la dejaron sin identidad. Nadie se acercó a reclamarla. No se sabe su nombre, ni su apellido.
Así navegó durante meses, y así fue sepultada…
Ciudad de México, 18 de marzo (SinEmbargo).- A un año de que el cuerpo sin vida de “Lupita”, “la niña de las calcetitas rojas”, fue encontrado en el Bordo de Xochiaca, en Nezahualcóyotl, Estado de México, familiares y amigos de la pequeña se manifestaron frente al Palacio municipal.
De acuerdo con diarios locales, además de la familia de «Lupita», parientes de otras mujeres que han sido asesinadas en el Estado de México en los últimos meses, se unieron para colocar una cruz rosa en memoria de la pequeña.
Este acto simbólico en honor de la pequeña de cuatro años se realizó sobre el camellón de la avenida Chimalhuacán, justo frente a las oficinas del Alcalde Juan Hugo de la Rosa y de las instalaciones de policía.
La pequeña bautizada como “Calcetitas rojas” fue golpeada hasta la muerte y su cuerpo abandonado en Nezahualcóyotl, Estado de México, el pasado 18 de marzo. Durante 9 meses, nadie identificó el cadáver y nadie fue señalado por el crimen.
