Como parte de las demandas, Greenpeace pidió al Gobernador Alfredo Del Mazo que se comprometiera de manera pública a 13 puntos que plantearon para mejorar el transporte público y la movilidad en el Estado de México.
En enero pasado, colectivos civiles «retaron» al mandatario estatal y al Secretario de Movilidad, Raymundo Martínez Carbajal, a utilizar durante un día, sin escoltas, el transporte público de la entidad.
Ciudad de México, 18 de febrero (SinEmbargo).- Para exigir al Gobernador del Estado de México, Alfredo del Mazo Maza, un compromiso público que contemple acciones, presupuestos y plazos de un plan de movilidad para que mejore el transporte público en la entidad, Greenpeace desplegó dos mensajes en las instalaciones del Palacio de Gobierno.
«El transporte en el Estado de México mata», se lee en las lonas de color amarillo.
Uno de los mensajes fue colocado en el interior del edificio, el segundo, en el balcón principal, en el que también se podía observar el rostro del mandatario estatal. Sin embargo, minutos más tarde trabajadores del Gobierno del Estado de México -con el rostro cubierto- cortaron las cuerdas que sostenían la lona, según denunció la ONG en sus redes sociales, por lo que optaron por sostenerla con las manos.
La organización argumentó que en el Edomex la inseguridad ha cobrado la vida de 500 personas en los últimos cuatro años debido a hechos delictivos con violencia, mientras que las muertes han aumentado las muertes por asma, enfermedad vinculada a la mala calidad del aire.
Como una de las demandas, Greenpeace pidió a Del Mazo Maza que se comprometiera de manera pública a 13 puntos que plantearon para mejorar el transporte público y la movilidad en el Estado de México.
Entre ellos, la organización enlistó «hacer una re-ingeniería de movilidad para eficientar el transporte público mediante corredores estructurados».
Además, pidió renovación de las unidades con tecnologías de cero emisiones y que cuenten con accesibilidad, un sistema de tarifas integrado y preferenciales, implementar centros de transferencia modal, invertir en transporte masivo y la creación de un programa que permita reducir en un 80 por ciento los delitos a bordo de las unidades.
Entre otras medidas, Greenpeace añadió transformar vialidades principales en calles completas, una red de infraestructura vial y conectada, mejorar la banquetas, construir biciestacionamientos, así como la implementación de una política de seguridad vial.
El gobierno de @alfredodelmazo insiste en intentar callar la protesta y una vez más cortan la manta. Al Estado de México no les gusta ser señalados, pero tampoco dar propuestas para mejorar el transporte en el Estado.#ElTransporteMata y deben resolverlo: https://t.co/3blhBQYuB4 pic.twitter.com/GrtYLws73M
— Greenpeace México (@greenpeacemx) February 18, 2020
En el acto, también participó un grupo de personas pertenecientes a la ONG. Unos, vestidos con playeras en las que se leía el mismo mensaje. Otros, con un overol rojo y cascos amarillos.
«Queremos que haya un compromiso público del Gobierno del Estado de México [..] queremos que el transporte, tanto público como privado, sea transformado», pidió la ONG.
Más tarde, representantes del Gobierno del Edomex salieron a atender a los manifestantes. Sin embargo, Carlos Samayoa, responsable en temas de movilidad de Greenpeace, acusó que las propuestas no eran insuficientes.
«Queremos una decisión de Gobierno de que va a cambiar la cosa [..] una persona normal no debería tener miedo a usar el transporte público […] queremos acción y cambios estructurales», señaló Samoaya.
Finalmente, la comitiva fue recibida por el Delegado regional de Movilidad, Omar Vega, y por el Subdirector regional Christian Noé Velázquez Guerrero. Sin embargo, Samoaya expresó que trató de una reunión «de preámbulo» para acordar los términos de una mesa de trabajo que Greenpeace solicitó con funcionarios de alto nivel.
La ONG creo una petición para «exigir a Alfredo Del Mazo mejor transporte público en Estado de México». En la protesta afuera de las instalaciones del Palacio de Gobierno acudieron las organizaciones Metrobús Toluca Ya, Intégrate Project y Fundación Xihmai.
En enero pasado, colectivos civiles «retaron» al Gobernador Alfredo del Mazo Maza y al Secretario de Movilidad, Raymundo Martínez Carbajal, a utilizar durante un día, sin escoltas, el transporte público de la entidad.
¡La volvimos a poner!
Luego de que el Estado cortara la manta con el mensaje que hemos puesto a @alfredodelmazo la hemos desplegado una vez más. La indiferencia del gobierno del Estado de México es evidente.
No dejemos que nos intenté callar. ¡Difunde! https://t.co/3blhBQYuB4 pic.twitter.com/7CF71P4Olf
— Greenpeace México (@greenpeacemx) February 18, 2020
Esto, luego de que la tarifa aumentó un 20 por ciento, lo que afectó tanto a los 12 millones de usuarios como a los choferes que entregan cuotas a las empresas concesionadas.
“El transporte público en el Estado de México -una de las zonas más contaminadas por uso excesivo de automóvil- está en un estado deplorable. Los tomadores de decisiones, en este caso el Gobernador y su Secretario de Movilidad, probablemente no conozcan las dificultades que enfrenta toda la gente que lo usa. Tal vez han oído hablar de la inseguridad, pero jamás la han experimentado. Él dice que es bastante bueno y decente”, afirmó en conferencia de prensa Carlos Samayoa, responsable en temas de movilidad de Greenpeace, quien recordó que un transporte público de calidad aminora el uso de automóvil y con ello la mala calidad del aire derivada de sus emisiones.
Pese a los «tarifazos» que se han implementado desde el 2013, acusaron que no se ha visto reflejado en las promesas de mejoras en calidad, seguridad y sustentabilidad ni cuentan con un plan de movilidad íntegro y transparente para ello.
Además, aunque el transporte mexiquense es de los más caros e inseguros en el país, no otorga tarifas preferenciales a los grupos vulnerables como estudiantes, adultos mayores y con capacidades diferentes.
Dante Álvarez, miembro de Metrobús Toluca Ya, documentó que el 70 por ciento de los 17 millones de habitantes del Estado de México usa el transporte colectivo, de los cuales el 30 por ciento son estudiantes o adultos mayores que no reciben ingresos, y el 40 por ciento tiene carencias económicas por lo que el aumento de 10 a 12 pesos “está pasando factura al sector más vulnerable de la población”.
Diana Bobadilla Martínez, de la fundación ambiental Xihmai, agregó que familias mexiquenses de tres o cuatro integrantes está gastando alrededor de 1,600 pesos semanales por transportarse, pero ganan en ese periodo 1,800 pesos o menos por lo que se está volviendo “un gasto insostenible” el derecho a la movilidad.
-Con información de Dulce Olvera