Un grupo comercial estadounidenses reconoce tensiones con empresarios chinos pues las empresas del país oriental son clave para el desarrollo de sus compañías.
Beijing (AP) — Las compañías estadounidenses se sienten menos bienvenidas en China y algunas están mudando sus operaciones a otros países, reportó el miércoles un grupo comercial, en medio de crecientes tensiones entre el Presidente electo de Estados Unidos Donald Trump y el Gobierno chino en materia de comercio.
El reporte de la Cámara Estadounidense de Comercio en China refleja frustraciones entre empresas que ven a China como un mercado clave, pero que enfrentan esfuerzos crecientes para bloquear acceso a tecnología y otras industrias promisorias.
El documento se dio a conocer poco antes de la ceremonia de investidura presidencial de Trump —a realizarse el viernes_, quien prometió incrementar aranceles a artículos de China y declarar a Beijing como un manipulador de divisas, movimiento que abriría el camino a imponer sanciones sobre la nación asiática.
Los líderes del país comunista han prometido hacer más productiva la economía china dominada por el Estado a través de la apertura de más industrias a competidores privados y extranjeros. Los grupos empresariales han dicho que tales iniciativas han tenido poco impacto.