Portavoz asegura que Rusia no dudará en hacer uso del artículo 51 del Estatuto de las Naciones Unidas, que regula el derecho de los Estados a la propia defensa.
Moscú, 17 nov (EFE).- El Presidente ruso, Vladímir Putin, ha ordenado localizar y liquidar a todos los responsables del atentado terrorista contra el Airbus ruso en Egipto, en el que murieron 224 personas, informó hoy el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov.
Por otra parte, Peskov descartó que desplegar tropas terrestres en Siria para luchar cuerpo a cuerpo contra los yihadistas del Estado Islámico (EI).
«El presidente Putin ha dicho en reiteradas ocasiones que Rusia se limitará al componente aéreo» en su intervención en el país árabe, «y que no se plantea la posibilidad de una operación terrestre», subrayó.
Rusia sí intensificará sus bombardeos en Siria contra el EI «de tal modo que los criminales entiendan que la venganza es ineludible», anunció el propio Putin en una reunión dedicada a informar sobre los resultados de la investigación del siniestro.
Poco antes, el jefe del Servicio Federal de Información (FSB, antiguo KGB), Alexánder Bortnikov, reconoció que el avión ruso que se estrelló en Egipto con 224 personas a bordo explotó debido a una bomba colocada por terroristas.
«Puedo decir que fue un atentado terrorista», señaló Bortnikov, en una reunión del Consejo de Seguridad nacional con Putin, de la que la televisión estatal mostró extractos.
El jefe del Kremlin aseguró que Rusia encontrará y castigará a los culpables del atentado, ocurrido el pasado 31 de octubre sobre el Sinaí egipcio.
«Los buscaremos estén donde estén y los encontraremos en cualquier rincón del mundo», prometió Putin.
«El asesinato de nuestra gente en el Sinaí es uno de los crímenes más sangrientos por número de víctimas. Y no vamos a quitarnos las lágrimas de nuestras almas y corazones. Esto quedará para siempre con nosotros. Pero ello no impedirá encontrar y castigar a los culpables», advirtió.
El avión de la compañía MetroJet se estrelló 23 minutos después de despegar de la localidad turística de Sharm el Sheij con destino a San Petersburgo y causó la muerte de todos sus ocupantes.
Desde el principio, los servicio de seguridad del Reino Unido y EU sospecharon que se trató de un atentado, pero Rusia no lo reconoció hasta hoy, aunque suspendió todos los vuelos a Egipto pocos días después de la catástrofe.