Han pasado dos años desde que un grupo especial de militares y policías falló en su intento por aprehender a Ovidio, uno de los hijos de Joaquín Guzmán Loera, y desató un enfurecido ataque de grupos de civiles armados y con ello el terror.
Por José Abraham Sanz
CULIACÁN, 17 de octubre (Noroeste).– “Hablan mucho de aquel día, cuando la cosa estuvo tensa, la mayor parte del cuento son mitotes de la prensa…”, dice una primera parte en la que el corrido de “El Nini”, interpretado por el grupo norteño Enigma Norteño, toca con propósito del 17 de octubre de 2019.
“Tronaba duro el general Octubre 17, la misión era morirnos o salvar al jefe, hoy ya la podemos contar y eso ya quedó escrito”, completa.
Han pasado dos años desde que un grupo especial de militares y policías falló en su intento por aprehender a Ovidio Guzmán, uno de los hijos de Joaquín “El Chapo” Guzmán Loera, y desató un enfurecido ataque de grupos de civiles armados y con ello el terror para miles de culiacanenses que pretendían llevar un día normal.
«ESTAMOS PEOR AHORA: AGUIRRE MEZA
Y a estos dos años de distancia, según un activista como el abogado Leonel Aguirre Meza, de la Comisión de Defensa de Derechos Humanos del Estado de Sinaloa, estamos peor que antes.
“En lo personal percibo que está peor ahora, permitimos impunidad en un caso como ese, pues con más razón, si tú permites, no haces castigos, no haces algo al respecto, pues pasan las cosas incluso a mayor magnitud, yo veo en lo personal cada vez más en la ciudad, sobre todo y también en la zona rural, más gente armada, más gente que anda en convoy y que la autoridad en lugar de hacerse cargo, se somete, o los encubre, o les permite”, señaló.
“Si queremos un cambio radical, tanto de arriba, como de abajo, debe haber cambio en la política pública; y entiendo que no es fácil, pero hay hechos inmorales e ilegales de la autoridad”, dijo.
El abogado lamentó que la sociedad siga igual de sometida y que las dependencias encargadas de la aplicación de la justicia están aletargadas.
“La sociedad sigue igual arrinconada, esperando que nada nos pase, que no nos asalten, que no nos quiten el carro, que no nos secuestren, que no nos pase nada, pero es un precio muy alto que estamos pagando”, expresó.
Recalcó que no nada más es un tema de la Fiscalía General del Estado, sino de la política de la Secretaría de Seguridad Pública estatal.
LOS NÚMEROS DE LA CEAIV
El hecho disruptivo, según la Comisión Estatal de Atención Integral a Víctimas, no parece ser un cuento o “mitotes” de la prensa, como dice el corrido del grupo norteño.
Al contrario, la CEAIV señala en un análisis que el operativo fallido y la respuesta agresiva del crimen organizado “manchó de negro a la ciudad de Culiacán”, “quebró la tranquilidad de sus habitantes” y fue un acto en el que “todos nos convertimos en víctimas”.
Aún así, agrega, el impacto de la agresión no ha sido dimensionado.
Y aunque reconoce la decisión del Gobierno federal de demandar a la industria norteamericana de armas de fuego, por el llamado “Jueves Negro” todavía hay pendientes.
El recuento de los actos violentos de ese día, de acuerdo a la CEAIV, es de 44 casos: tres personas fallecidas, cinco personas lesionadas, cinco autos robados, 29 carros dañados y dos locales comerciales afectados.
El informe de las autoridades es que el total de personas que perdieron la vida ese día es de ocho.
La comisión ha invertido en estos dos últimos años casi 200 mil pesos en asesorías jurídicas, gestiones para asistencia psicológica, apoyos materiales y gestiones para atención médica.
“El recurso económico se empleó siguiendo el principio de prioridad en la asistencia, establecido por la ley de víctimas, según el cual la gravedad del daño sufrido determina el orden de prestación de los servicios”, explica.
La cifra real es de 187 mil 354.87 pesos, divididos en apoyo material, como transporte, alimentación, cuotas escolares, de 94 mil 650 pesos; gastos médicos por 8 mil 740; asistencia psicológica por 10 mil 440 pesos y gastos funerarios por 73 mil 524.87.
Además, como medidas de reparación del daño contra el patrimonio, se han gestionado con el Fideicomiso del Fondo de Ayuda, Asistencia y Reparación Integral, la entrega de 344 mil 020.11 pesos.
En total, la afectación de las personas afectadas y, solo en apoyos económicos, representan solo 531 mil 374.98 pesos.
¿QUÉ OCURRIÓ EL 17 DE OCTUBRE DE 2019?
CRONOLOGÍA DEL ATAQUE
–14:00 horas: Se confirma la presencia de Ovidio Guzmán y el escalón de la Seguridad Externa del cuartel de la Novena Zona Militar.
–14:30 horas: Inicia el operativo; las fuerzas especiales rodearon el inmueble donde estaba “el objetivo” acompañado de su familia.
–A la par del operativo de fuerzas especiales, elementos del Ejército desplegaron un operativo de contención, un círculo de seguridad en cuatro puntos alrededor de la zona en donde se encontraba el objetivo.
–Tres de estos estaban sobre el bulevar Enrique Sánchez Alonso y resguardados por 77 elementos de las fuerzas armadas, los que fueron atacados por 110 personas armadas.
–El saldo de estos ataques fueron 14 elementos heridos, uno perdió una pierna y un militar muerto.
–15:15 horas: Comienzan los reportes sobre las primeras agresiones a personal militar por parte de grupos de civiles armados, en las calles de Culiacán.
–15:20 horas: Comienzan a difundirse en redes sociales videos e imágenes sobre presencia de grupos de civiles armados que accionan sus armas de fuego, para generar terror entre la ciudadanía.
–15:30 horas: Civiles armados, a bordo de vehículos, rodearon las bases militares de operaciones en los municipios de Cosalá y El Fuerte, además de la sindicatura de Costa Rica.
–En la caseta de la sindicatura de Costa Rica también fueron amagados 30 soldados por un grupo de 150 civiles armados.
–Un total de 20 militares se trasladaron a apoyar a la unidad habitacional militar en Culiacán, pero fueron agredidos por otros 20 civiles armados.
–En la sindicatura de Jesús María, fueron retenidos dos elementos del Ejército que descansaban durante el ataque; los agresores eran 15 civiles armados que viajaban en tres vehículos.
–17:04 horas: Comienzan a reportarse agresiones en las instalaciones y fuerzas militares en distintos puntos de la ciudad, despojos, quema de vehículos civiles y la fuga de 51 reos del penal de Aguaruto.
–La agresión a la Novena Zona Militar, de forma simultánea con los bloqueos, fue perpetuada por 20 civiles en cinco vehículos. En el cuartel se encontraban sólo 50 efectivos de la Sedena, uno de los cuales resultó herido.
–El mismo “Jueves Negro” fueron recapturados cuatro de los reos fugados, otro más fue detenido a finales de 2019 en Mazatlán y el último fue sorprendido mientras robaba una escuela primaria hace unos días en Culiacán.
–19:00 horas: Por decisión del Gabinete de Seguridad Federal, se ordenó el fin de la operación para tranquilizar la zona y la liberación de Ovidio Guzmán.
EL SALDO
Según cifras de la Fiscalía General del Estado de Sinaloa, fueron 46 denuncias por despojo de vehículos presentadas por ciudadanos durante el ataque y bloqueo de los civiles armados en el sector Tres Ríos y en la zona del penal de Aguaruto.
Al día siguiente, el 18 de octubre de 2019, la autoridad reportó que nueve de los vehículos despojados fueron incendiados y utilizados en los bloqueos, incluyendo tres patrullas de la Policía Estatal y del Ejército.
–315 civiles armados perpetraron la agresión, según la Sedena.
–46 denuncias por despojo fueron interpuestas en la FGR.
–9 vehículos fueron incendiados durante los bloqueos.
