El Proyecto sobre Organización, Desarrollo, Educación e Investigación acusa que ninguno de los cargos que conforman el Comité Técnico del Fonatur posee experiencia o conocimiento en ecología o desarrollo sustentable y, por el contrario, tienen en común una acentuada experiencia en áreas como la banca y las finanzas públicas.
Ciudad de México, 20 de febrero (SinEmbargo).- A poco más de un mes de la devastación en el manglar Tajamar, el Proyecto sobre Organización, Desarrollo, Educación e Investigación (PODER, por sus siglas en inglés), pone las cartas sobre la mesa: el destino de Tajamar ahora depende de que el Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur) evalúe qué es más importante, si el buen desarrollo económico o la preservación de la excepcional flora y fauna de la zona.
La madrugada del sábado 16 de enero, un grupo de trabajadores con maquinaria pesada, escoltados por policías, ingresaron al Malecón Tajamar para devastarlo y preparar la construcción de desarrollos inmobiliarios, promovidos por Fonatur. Activistas, ciudadanos y organizaciones civiles han acusado al Gobierno de Quintana Roo, Roberto Borge Angulo, a Paul Michell Carrillo de Cáceres, Presidente Municipal de Benito Juárez, a la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), a la Procuraduría Federal de Proteccion al Ambiente (Profepa) y al propio Fonatur de haber cometido un ecocidio en la zona.
No obstante, será esté último quien tendrá la última palabra: «[Fonatur] tiene de dos: ya que pasó todo este problema [la devastación], parar y repensar hacia dónde va el proyecto, incluso dar un tiempo para que se intervenga y se salve lo que queda, o continuar con las obras. En sus manos está volver a solicitar el permiso de impacto ambiental ante la Semarnat y si lo hace y se lo dan, continuaría el proyecto y se concluiría la destrucción que comenzó en enero pasado», dijo a SinEmbargo Paola De Loera, integrante de PODER.
Para continuar con las obras se tiene que renovar la licencia ambiental que venció el 8 de febrero de 2016, ante la Semarnat. La NOM 059 da a los manglares una protección especial y reconoce su gran importancia ecológica. Al Fonatur le corresponde gestionar (o no) la renovación.
El Fonatur es un fideicomiso regido por un Comité Técnico, cuyos siete miembros no aparecen en la web oficial; para encontrarlos hay que revisar informes y evaluaciones de años anteriores, con lo cual se pasa por alto la Ley General de Transparencia, informó en su sitio web Rinde Cuentas, el proyecto periodístico de PODER.
Asimismo, agrega que los proyectos de la dependencia se ubican principalmente en Quintana Roo -donde está Tajamar- y Baja California Sur, destinos preferidos de los turistas internacionales. Las perspectivas son buenas: el dólar fluctuando en 19 pesos alentará la llegada de visitantes extranjeros que aportan el 80 por ciento de los ingresos turísticos.
En un hecho inédito el superávit del sector turismo podría cubrir el déficit de la balanza energética estimado en unos 7 mil millones de dólares al cierre de 2016, explicó Enrique de la Madrid Cordero, secretario de Turismo, durante una conferencia organizada por la Universidad Anáhuac. “El turismo esta vez puede estar compensando un déficit que obviamente antes no teníamos y simplemente se los pongo para ver otra dimensión de lo que está representando el turismo hoy en día para nuestro país”. El hijo de Miguel de la Madrid, ex Presidente de México, funge además como presidente del Comité Técnico del Fonatur.
LOS BANQUEROS DEL FONATUR
PODER acusa que ninguno de los cargos que conforman el Comité Técnico del Fonatur posee experiencia o conocimiento en ecología o desarrollo sustentable, y por el contrario, tienen en común una acentuada experiencia en áreas como la banca y las finanzas públicas.
«Si hablamos de que es un fideicomiso que se dedica a procurar que se concreten inversiones sustentables, lo deseable sería que hubiera algún perfil que tuviera este corte con experiencia en turismo o desarrollo sustentable, de otra manera, es muy difícil que se asegure que los proyectos tengan estas características porque una visión bancaria ve más por la productividad y por la rentabilidad –no es que esté mal–, pero debería existir un balance que ahora mismo no está existiendo», comentó De Loera.
El comité está conformado por el Secretario de Turismo, quien ha trabajado por 13 años en la banca y las instituciones asociadas al sector entre las que se encuentran: el Banco Nacional de Comercio Exterior (Bancomext), la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV), Financiera Rural y en el ámbito privado el banco HSBC. Su perfil demuestra que no cuenta con experiencia previa en el sector turístico, reveló PODER.
Otro de los integrantes es José Bernardo González Rosas, quien funge como jefe de la Unidad de Banca de Desarrollo de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), fue también directivo del Banco del Ahorro Nacional y Servicios Financieros (Bansefi) y de Financiera Rural en 2007, donde coincidió con De la Madrid. Alejandro Sibaja Ríos, director general de Programación y Presupuesto B de la SHCP, quien es otro de los miembros, trabajó en Nacional Financiera y ha desempeñado diversos cargos dentro de la secretaría.
Raul Joel Orozco López, Director de Intermediarios Financieros de Fomento del Banco de México, también es parte del comité y labora en dicha institución desde 1985. Raúl Murrieta Cummings, subsecretario de Infraestructura de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT), quien es integrante del consejo, es un funcionario cercano a Enrique Peña Nieto, con quien se desempeñó como secretario de Finanzas cuando el hoy Presidente era Gobernador del estado de México, y fue coordinador de política económica en el equipo de transición entre Peña y Felipe Calderón Hinojosa.
La persona que tiene más experiencia en el ramo turístico, es Guillermo Javier Haro Bélchez, titular de la Profepa, pues trabajó en la dirección de administración y finanzas del Fonatur. Sin embargo, el 28 de enero aseguró en conferencia de prensa que no hubo «indicios de daños ni responsabilidad ambiental atribuible a Fonatur por el manglar Tajamar”.
Ante esta situación, es posible hablar de que se anteponen los intereses económicos sobre los intereses ambientales y sociales: «desde que se pensó en la constitución del comité no se consideró el poner algún perfil que peleara por estos intereses [ambientales y sociales]. Digamos que al momento de poner un proyecto sobre la mesa, se supone que no sólo se privilegiarían los intereses económicos y de productividad, sino también esos otros intereses de sustentabilidad y de desarrollo social», dijo De Loera.
Por ello, PODER propone que se incluya en el comité a miembros de la sociedad civil y/o de las organizaciones no gubernamentales, ya que «son quienes sin ningún conflicto de interés pueden velar más por este tipo de cuestiones».
EL REPRESENTANTE DE LA ÉLITE MEXICANA
El responsable final del futuro de Tajamar, señala PODER, es el hijo de Miguel de la Madrid, quién como Presidente de México entre 1982 y 1988, inició la privatización de empresas estatales: «políticamente el joven De la Madrid sigue los pasos del padre», señalan en su sitio web.
Y agregan: «Enrique está muy bien relacionado con las élites económicas y políticas del país. Estudió en Harvard y está acostumbrado a trabajar con empresarios. Empezó como presidente ejecutivo del Consejo Mexicano de la Industria de Productos de Consumo (ConMéxico) donde trabajaba, entre otros, para el presidente de Grupo Bimbo, Daniel Servitje Montull; de Grupo Industrial Lala, Eduardo Tricio Haro; de Grupo Hérdez, Héctor Ignacio Hernández-Pons Torres; y de Coca-Cola Femsa, José Antonio Fernández Carbajal. Todos ellos son miembros del Consejo Mexicano de Negocios».
Además, en la mesa directiva del Banco Nacional de Comercio Exterior (Bancomext), del que fue director general, destacaba Valentín Diez Morodo, vicepresidente del consejo de administración de Kimberly-Clark de México y miembro propietario en por lo menos una docena de corporativos como Grupo Financiero Banamex, Grupo Ferroviario Mexicano y Grupo Modelo.
Sus relaciones con empresarios y políticos extranjeros han sido cultivadas desde que era estudiante y después como trabajador. Fue director de Relaciones Institucionales y Comunicación para México y América Latina de HSBC, el banco inglés señalado por lavar dinero de cárteles mexicanos, la mafia rusa y de organizaciones terroristas, de acuerdo con un informe del Senado de Estados Unidos. Por si fuera poco, la fiscalía belga lo acusó de fraude fiscal, blanqueo de dinero, organización criminal y ejercicio ilegal de intermediación financiera, puntualiza laONG.
«El hecho de que una persona como Enrique de la Madrid esté en un puesto tan estratégico como es la Secretaría de Turismo y que él tenga un perfil banquero habla de que hay una conciencia muy clara de que será un muy buen año para el turismo y por ello se privilegió a una persona con estas características y no a alguien con conocimientos de sustentabilidad», subrayó la licenciada, quien se interesa en la captura del estado (intentos de las empresas para influir en la formulación de las leyes, las políticas y la reglamentación del Estado a cambio de pagos ilícitos —con carácter privado— a los funcionarios públicos, de acuerdo con International Monetary Fund).
CANCÚN, UNA METRÓPOLI DE DIMENSIÓN INTERNACIONAL
Fonatur obtuvo en 2005 de la Dirección General de Impacto y Riesgo Ambiental (DGIRA) de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), la Manifestación de Impacto Ambiental (MIA), la cual permitía realizar trabajos en el área del Malecón Tajamar. Posteriormente los terrenos fueron vendidos a 22 empresarios, aunque el desmonte no se inició sino hasta enero pasado. «El desarrollo inmobiliario Tajamar quería convertir a Cancún en una metrópoli de dimensión internacional», revela PODER.
El proyecto tenía que abarcar “aspectos: cívicos, financieros, habitacionales, náuticos, culturales y ecológicos”, según Miguel Gómez-Mont Urueta, director general del Fonatur de la época. Gómez-Mont, cesado en julio de 2010 sin explicación alguna, es hermano de Fernando Gómez-Mont Urueta, quien se desempeñara como secretario de Gobernación durante la Presidencia de Calderón y como titular del despacho Zinser, Esponda y Gómez Mont Abogados.
PODER señala que la actual dirección del Fonatur no tiene responsabilidad en la expedición de los permisos para el desmonte del terreno y la dependencia asegura que se hizo conforme las licencias ambientales otorgadas por la Semarnat en julio de 2005, aunque la organización Salvemos Manglar Tajamar ha denunciado que no realizó el despalme del terreno ni resguardo de los animales antes de iniciar las obras. Por su parte la Profepa defendió el proceder de ambas instituciones y señaló como responsable a una de las empresas involucradas (Bi&Di Real Estate de México S.A. DE C.V.).