Colima, 16 Oct (Notimex).- La actividad explosiva del Volcán de Fuego genera caída de ceniza en esta capital y la zona conurbada de Villa de Álvarez, por lo que se sugirió a la población tomar las precauciones necesarias.
La Unidad Estatal de Protección Civil (UEPC) refirió que, de acuerdo con el monitoreo que se realiza, es probable que continúe la actividad explosiva con presencia de gases y ceniza durante los siguientes días o semanas.
“Existe la probabilidad de que se registre lluvia de ceniza en comunidades cercanas al volcán, dependiendo de la dirección y velocidad del viento”, indicó.
La Secretaría de Salud estatal (SS) recomendó a la población evitar salir a la calle, pero si es necesario hacerlo proteger ojos, nariz y boca con un pañuelo húmedo para evitar irritación en garganta y vías respiratorias.
“La caída de ceniza volcánica puede causar irritaciones en vías respiratorias y garganta, así como enfermedades gastrointestinales y afectaciones en los ojos, como conjuntivitis y desgaste severo de la córnea en los ojos, por lo que es importante que la población adopte medidas de prevención para evitar daños a su salud”, explicó.
Asimismo pidió que en los lugares donde se registre caída de ceniza se cierren puertas y ventanas y sellar con trapos húmedos las rendijas y las ventilas para evitar su entrada, así como sacudirla con plumeros para que no se raye la superficie a limpiar.
Respecto a la situación del Volcán de Fuego o de Colima, Protección Civil dio a conocer que durante esta semana prevaleció la actividad explosiva de baja intensidad, así como desgasificaciones intensas de mayor duración y contenido de ceniza.
Algunos de estos eventos han generado pequeños derrumbes de rocas incandescentes, principalmente hacia el sur, con alcances no mayores a dos kilómetros desde el cráter, además de la ceniza que es depositada sobre el edificio volcánico o que es transportada por los vientos dominantes.
También se han registrado pequeños flujos de lodo o lahares sobre las barrancas Montegrande y La Lumbre, sin que hasta el momento representen un riesgo para la población.
Debido a ello se mantiene la zona de exclusión a todo tipo de actividad a cinco kilómetros a la redonda del cráter, con excepción de la barranca Montegrande, donde es de 12 kilómetros por la temperatura que existe en el flujo piroclástico.