Tras una semana tensa para los mercados, y que el peso argentino llegó a 62 pesos por dólar el pasado miércoles, el Gobierno de Argentina decidió tomar medidas para apoyar a sus habitantes.
“Confío será un alivio para el bolsillo de millones de argentinos”, indicó Mauricio Macri. El propio Gobierno reconoció que se acelerará en los próximos meses por la devaluación del peso de esta semana.
Ciudad de México, 16 de Agosto (AP).- El Gobierno de Argentina dio a conocer diversas medidas, entre las que destacó eliminar impuestos a los alimentos y el precio del combustible, luego de una semana caótica ara su moneda, la cual abre este viernes en 57.25 pesos por dólar.
El mandatario formalizó este viernes su decisión de congelar por 90 días el precio de los combustibles, una de las medidas adoptadas para hacer frente los efectos de la crisis financiera desatada esta semana.
En un decreto publicado en el «Boletín Oficial», el Ejecutivo de Mauricio Macri dispuso que las entregas de petróleo crudo efectuadas en el mercado local durante los próximos 90 días deberán ser facturadas y pagadas al precio convenido entre las empresas productoras y de refinado el 9 de agosto pasado.
La normativa, que lleva las firmas de Macri y de los integrantes del Gabinete nacional, puntualiza que se debe aplicar un tipo de cambio de referencia de 45.19 dólares y un precio de referencia del crudo Brent de 59 dólares por barril.
Se trata del tipo de cambio oficial que regía el viernes 9, previo a la fuerte apreciación que sufrió el dólar estadounidense en el mercado cambiario argentino tras la derrota sufrida por el oficialismo en las primarias del último domingo.
Además, en lo que resta del año, los alimentos argentinos estarán libres del impuesto sobre el valor agregado (IVA), que actualmente está en 21 por ciento, anunció Mauricio Macri. Esta decisión es un intento por aplacar el costo social que tendrá la abrupta devaluación del peso argentino tras el resultado de las primarias en Argentina, el cual cayó 3 días consecutivos.
Se prevé, también, la reducción de las retenciones aplicadas a los salarios, partidas extras para trabajadores informales y desocupados con hijos, un incremento del salario mínimo -actualmente de 12,500 pesos (cerca de 200 dólares)- y el congelamiento del precio de la gasolina.
Varias apuntan a la clase media que votó mayoritariamente por Macri en 2015 y que luego de sentirse asfixiada por el aumento de las tarifas de los servicios, la inflación y el creciente desempleo podría bajarle el pulgar en las generales.
Adicionalmente, la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) de Argentina publicó este viernes en el «Boletín Oficial» tres resoluciones por las que de manera temporal se rebaja la previsión tributaria sobre los ingresos de los asalariados y jubilados y sobre las pymes y se amplían los planes de facilidades de pago de deudas con el Fisco.
La AFIP dijo en un comunicado que comenzará a aplicar el alivio impositivo sobre los salarios y las jubilaciones de forma inmediata, aunque antes del final del ejercicio fiscal (en marzo próximo) la medida necesitará la aprobación del Parlamento. El Fisco destacó que esta modificación beneficiará a 1.9 millones de trabajadores activos y a 400,000 jubilados.
“Confío será un alivio para el bolsillo de millones de argentinos”, indicó el mandatario. El propio gobierno reconoció que se acelerará en los próximos meses por la devaluación del peso de esta semana.
-Con información de EFE