El documental del colectivo «Más de 131» da cuenta de la vida rarámuri en medio de la sierra y la labor de los Centros Culturales Jesuitas de la Tarahumara.
Ciudad de México, 16 de abril (SinEmbargo).- En medio de las montañas de la sierra madre occidental de Chihuahua se juega la vida. No sólo por las nulas condiciones de servicios, también por la situación de desplazamiento, violencia y crimen organizado en que se encuentra la región.
El más reciente documental del colectivo «Más de 131» da cuenta de la vida de las comunidades tarahumaras o rarámuris, en donde pese a la violencia, hay esfuerzos por una educación pertinente para que la cultura y tradiciones prosperen aunque estén alejadas de sus lugares de origen.
El proyecto de los Centros Culturales Jesuitas de la Tarahumara (CCJT) está por inaugurar en la comunidad de Guaguachique el tercer centro educativo basado en las propias tradiciones rarámuris.
Daniel Vargas, coordinador de los CCJT, describe la necesidad de prestar el apoyo educativo que pidieron las propias autoridades de la comunidad de La Gavilana, al mismo tiempo hacen un análisis de las problemáticas sobre el abandono de la identidad rarámuri, cuestión que refuerzan desde la labor de los maestros, que enseñan en primera instancia en rarámuri y después el castellano. Para ellos esta labor también implica que las personas se interesen menos en dedicarse a delinquir.