El ex Ministro peruano lamenta «la falta de comunicación» de Almagro con él desde agosto de 2017. Además Jiménez señala «que el Estado de Honduras no ha querido aprobar leyes importantes propuestas por la Maccih, como la Ley de Colaboración Eficaz, que cumplió en diciembre último un año desde su entrega».
Tegucigalpa, 15 febrero (EFE).- El jefe de la Misión de Apoyo Contra la Corrupción y la Impunidad en Honduras (Maccih) de la OEA, el ex Ministro peruano Juan Jiménez, informó hoy que renunció de manera «irrevocable» por diferencias con el secretario general del ente hemisférico, Luis Almagro.
«Con gran pesar y luego de una profunda reflexión comunico mi renuncia al cargo de vocero de la OEA_MACCIH», indicó Jiménez en la red social Twitter.
En una carta, reproducida por medios locales de prensa, explicando las razones de su renuncia, Jiménez lamenta «la falta de comunicación» de Almagro con él «desde agosto de 2017».
«Esta tuvo su mayor expresión al no recibirme el pasado 30 de enero a pesar de que había viajado expresamente para reunirme con él e informarle sobre la situación actual de la Misión», añade.
La intención de la visita era para notificarle a Almagro de «los avances en las investigaciones» que está haciendo la Maccih, «las presiones y amenazas que estaba recibiendo con motivo de ellos, la necesidad de contar con autonomía administrativa y los recursos materiales y humanos necesarios para realizar nuestro trabajo», subraya la carta.
La extensa misiva de Jiménez señala, entre otras cosas, que «hay que decir también que el Estado de Honduras no ha querido aprobar leyes importantes propuestas por la Maccih, como la Ley de Colaboración Eficaz, que cumplió en diciembre último un año desde su entrega».
Añade que «el equipo de la Misión se encuentra sumamente preocupado por la reacción de las autoridades del país frente al caso de la Red de Diputados», asociado con un presunto hecho de corrupción a través de una reforma a la Ley de Presupuesto General de Ingresos y Egresos de la República, el 18 de enero.
La consecuencia de la ley referida fue que la investigación hecha sobre la Red de Diputados por parte de la unidad especial de la Maccih que investiga los casos de corrupción, fue archivada el 24 de enero generando una reacción por parte de la Misión y de muchas organizaciones internacionales y nacionales, dice Jiménez en su nota.
La gota que derramó el vaso al parecer ha sido parte de una carta que Almagro le envió el miércoles al Presidente hondureño, Juan Orlando Hernández, en la que le expresa, entre otras cosas que «será necesario fortalecer el funcionamiento de la Maccih», porque no ha arrojado resultados en algunos casos de corrupción que se hubiesen deseado.
La Maccih, «a pesar de haber tenido recursos y plena libertad de acción por parte de la Secretaría General no ha sido capaz de arrojar los resultados en cuanto a investigaciones y procesamientos por casos de corrupción que hubiésemos deseado y que le debemos al pueblo de Honduras», añade la misiva de Almagro a Hernández.