Berlín, 15 nov (EFE).- El presidente de los servicios secretos internos de Alemania, Hans-Georg Maaßen, consideró hoy que es «poco probable» que los terroristas islamistas lleguen a Europa como refugiados.
«La ruta de los refugiados es extremadamente peligrosa. Sería arriesgado y no sería típico de personas con una misión de combate que pasaran desde Turquía a una isla griega con ayuda de traficantes», dijo Maaßen en declaraciones al grupo de medios Funke.
No obstante, el organismo que dirige han constituido un nuevo grupo de trabajo para detectar si puede haber extremistas entre los solicitantes de asilo, en estrecha colaboración con los servicios secretos que trabajan en el exterior y con la inteligencia de otros países.
Según apuntó, casi cada semana llegan indicios de que entre los refugiados podría haber personas con experiencia en combate y en el uso de armas y es «posible» que al país lleguen terroristas entre los refugiados, aunque, insistió, es «poco probable».
Sí se ha constatado que los albergues se han convertido en objetivo de organizaciones islamistas radicales que operan en Alemania y que buscan entrar en contacto con determinados solicitantes de asilo.
Hasta el momento se ha detectado un centenar de casos, según apuntó Maaßen, quien explicó que estas organizaciones ofrecen ayuda a los refugiados y les invitan a unirse a sus asociaciones.
El Ministro alemán de Interior, Thomas de Maizière, llamó ayer a no mezclar el debate suscitado en el país por la llegada incesante de refugiados con los atentados de París y a no dejar que la cuestión pueda ser instrumentalizada por la ultraderecha.
Sin embargo, el Ministro de Finanzas de Baviera, Markus Söder, miembro de la Unión Socialcristiana (CSU), socia de la Canciller alemana, Angela Merkel, advirtió hoy de que con los atentados de París «comienza una nueva era» e instó al Gobierno de Berlín a reforzar los controles para acabar con la llegada «descontrolada» de refugiados.
«La época de migraciones descontroladas y de inmigración ilegal no puede continuar. París lo cambia todo», subrayó Söder en una entrevista con el dominical «Welt am Sonntag».