Dice que extraña Tecate y que pronto le toca vacaciones, así que irá a su ciudad natal a tomar cerveza y a no hacer nada, que es lo primero que añoran los artistas exitosos como ella. Pronto participará en el disco de homenaje a José Alfredo Jiménez, Un mundo raro, producido por Camilo Lara.
Ciudad de México, 14 de octubre (SinEmbargo).- En el acto central de Entijuanarte 2017, fue Carla Morrison la encargada de cerrar el segundo día de actividades.
La sudcaliforniana cortó varias calles alrededor del CECUT, en un récord, con muchas parejas que cantaban sus canciones, demostrando entre otras cosas que es una de las cantantes más exitosas de México.
Claro que lo suyo no se queda aquí, internacionalmente comienza a irle muy bien en países como Colombia, Argentina, Perú, claro que con tanto trabajo lo único que desea ahora es descansar, tomar cerveza en Tecate y liberarse un poco de las presiones a las que siempre somete una carrera como la suya.
Sencilla y compleja, así puede ser descrita Carla. “Dios me ha dado mucho con esta carrera, una carrera que a veces es muy difícil porque soy independiente y no encontrado a nadie que valore mi arte de la manera que yo lo hago, pero he aprendido mucho, he crecido y sufrido diferentes tropiezos, pero todo vale la pena cuando llegas a Entijuanarte, eso está muy padre”, dijo en la conferencia de prensa.
“Estoy muy contenta de estar aquí, me conmueve mucho y seguramente voy a salir y voy a llorar, que bueno que me trajeron, se me iluminó el alma cuando aterricé, porque he ido a muchas partes del mundo y ningún lugar me hace sentir como Tijuana, como Tecate, como Baja California, como en casa, gracias por hacerlo posible”, dijo la autora de Amor Supremo, el disco que sacó en 2015.
–¿Cómo te sientes a pocos minutos de estar sobre el escenario?
–Bien contenta, muy contenta de estar otra vez en Tijuana, crecí en Tecate, es casi lo mismo para mí.
–Tecate lo conocemos por la cerveza, ¿hay otra cosa?
–Sí, claro (risas). Tecate es bien chiquito y muy bonito, aprendí mucho de esa ciudad. Es muy simple todo, muy sencillo, es todo muy claro ahí.
–¿Cómo ha sido tu carrera tan exitosa ahora?
–Definitivamente ha habido mucho trabajo, para mí ha sido muy sorprendente, no esperaba que todo fuera a pasar tan rápido. Estoy contenta porque he aprendido muchísimo, por los viajes, por estar tan expuesta a diferentes públicos, a diferentes situaciones y justo eso hace que yo componga distinto. Siempre he compuesto canciones alrededor de mis impresiones personales, una película, una flor, pero el viajar y el que te vaya tan bien te trae mucha soledad. La soledad es donde uno compone, uno trabaja todo lo que vivió, por lo general siempre hablo de mis experiencias.
–En un país tan patriarcal como México, ¿cómo es ser una cantante aquí?
–Cuesta mucho. No sé si fue por mi mamá, que nunca me enseñó a ser victimizada por nadie, no sé si porque soy del Norte, el tema es que el machismo siempre lo usé a mi ventaja. Si mi padre me cuestionaba el hecho de que estaba haciendo mi carrera yo sola, le contestaba enseguida: Sí, yo sola, ¿cómo ves? Nunca era como por qué me dices eso si me duele. Es muy difícil, difícil en muchos aspectos y muchas maneras, pero nunca me he sentido menos por ello. Trato de luchar siempre, en contra. México es un país muy machista.
–En la parte del espectáculo, ¿cómo te manejas con los representantes, con los bookings?
–Tengo un gran equipo. Soy independiente, pero mi booker es hombre, pero mi manager es mujer. Lo bueno de estas nuevas generaciones es que muchos hombres son feministas, me protegen, me cuidan y me comprenden. Al principio, todo era muy difícil y había días en que tenía que ponerme “muy mamona”, para que me respetaran, para que me pagaran.
–¿Cómo va tu actividad ahora?
–Acabo de sacar el disco Amor supremo en 2015 y pronto va a terminar la gira. Lo único que pienso es en descansar. El año pasado saqué un disco navideño, hace poquito saqué un disco acústico, pero ahora lo que quiero es descansar. Suena muy bien eso.
–¿En lo internacional cómo te va?
–Me va muy bien. Experimenté con un nuevo sonido, al principio mucha gente se sacó de onda, no queremos a Carla con sintetizadores, internacionalmente me fue mucho mejor en el último disco. Fue como muy impresionante para mí. En Argentina se llenaron todos los lugares, en España igual, en Estados Unidos, igual. Me va bien en Chile, en Colombia, lo cual se me hace muy bueno, pues yo hago música para que la gente se sienta acompañada, en una sociedad tan dividida y tan distraída.
–Eres muy joven, ¿cómo te ha ido con el cine?
–Me ha ido bien, solamente he actuado un par de veces, es un área de arte que me interesa pero no sé si lo haría al ciento por ciento. Pero me parece muy interesante. En el futuro me gustaría tomar clases de programación, de audio, de composición…hay muchas maneras de crecer. Quiero escribir algo profundo y me gustaría componer para cine y para televisión.
“Era el momento de hacer un álbum nuevo, un proyecto fresco e invitar a los jóvenes y a las nuevas generaciones a redescubrir las grandes canciones de mi padre”, afirmó al respecto José Alfredo Jiménez Jr., mientras habla de Un mundo raro, el disco producido por Camilo Lara y co-producido y arreglado por Sergio Mendoza.
Participan Enrique Bunbury, Andrés Calamaro, Lila Downs, Julieta Venegas, Celso Piña, Beto Cuevas, Jarabe de Palo, Ximena Sariñana y nuestra Carla Morrison.
“Este es un proyecto que cruza fronteras. Es un modesto homenaje hecho por importantes exponentes de la música contemporánea, con los que se buscó que sus interpretaciones mantuvieran la esencia de las maravillosas canciones de José Alfredo Jiménez”, agrega Camilo Lara, productor del álbum.
