Destacados economistas temen que en el segundo trimestre las repercusiones sean aún más drásticas, con una caída de hasta el 12.2 por ciento con respecto a este trimestre.
«Es posible que hayamos dejado atrás en abril el punto más bajo de la crisis pero la recuperación será lenta y durante mucho tiempo no se podrá hablar de normalidad», dijo por su parte Stefan Kooths, del IfW.
Berlín, 15 de mayo (EFE).- La economía alemana cayó entre enero y marzo de 2020 un 2.2 por ciento respecto al trimestre anterior debido al impacto de la pandemia, informó este viernes la Oficina Federal de Estadística (Destatis) y destacados economistas temen que en el segundo trimestre las repercusiones sean aún más drásticas.
«La caída del PIB en el primer trimestre de 2020 todavía no muestra la verdadera dimensión de la crisis», dijo, por ejemplo, el experto en análisis coyunturales del Instituto Ifo de Múnich, Timo Wollmerhäuser, tras conocerse el dato adelantado publicado por Destatis.
El Ifo calcula incluso que en el segundo trimestre la caída del Producto Interior Bruto será del 12.2 por ciento con respecto a este trimestre.
«Es posible que hayamos dejado atrás en abril el punto más bajo de la crisis pero la recuperación será lenta y durante mucho tiempo no se podrá hablar de normalidad», dijo por su parte Stefan Kooths, del Instituto de Estudios sobre la Economía Mundial de Kiel (IfW).
El IfW estima en el segundo trimestre una caída de en torno al 10 por ciento mientras que el Deutsche Bank es aún más pesimista y calcula caída del PIB del 14 por ciento.
El miedo a pérdidas de ingresos, por desempleo o reducción de jornada, ha hecho que el ánimo de los consumidores baje a mínimos históricos según la Sociedad para Estudios del Consumo (GfK) de Núremberg.
Según una encuentra de la DfK un tercio de los consumidores cree que su situación financiera empeorará en los próximos doce meses.
Aunque en los meses de enero y febrero no se hizo notar la pandemia en la economía alemana, el impacto de marzo fue «grave» para el conjunto del trimestre.
La caída del 2.2 por ciento del primer trimestre es el mayor retroceso del PIB desde la crisis económica y financiera de 2008 y 2009 y la segunda mayor caída desde la reunificación alemana en 1990.
En el primer trimestre de 2009, la economía alemana llegó a contraerse un 4.7 por ciento respecto a los tres meses anteriores.
El Gobierno alemán cuenta con que en este año Alemania sufra la recesión más dura de la postguerra con una caída del PIB del 6.3 por ciento.
De confirmarse esta previsión se trataría del mayor retroceso registrado desde la crisis de 2009, cuando el producto interior bruto (PIB) se redujo un 5.6 por ciento, y superior al pronosticado por los principales institutos económicos del país, que situaron la caída recientemente en el 4.2 por ciento.
La pandemia, con sus repercusiones en toda la economía mundial, ha afectado tanto las exportaciones como la el consumo interno que, en los últimos años, había sido uno de los pilares claves de la coyuntura alemana.
En 2019 las exportaciones ya se habían visto golpeadas por la ralentización de la economía mundial y los conflictos comerciales y el consumo interno se había convertido en el principal soporte de la coyuntura alemana.
El consumo privado registró entre enero y marzo de este año una fuerte caída, así como las inversiones en equipamiento, sobre todo en maquinaria y vehículos.
La producción industrial cayó en marzo un 11,6 por ciento aunque en todo el trimestre solo tuvo una caída del 1.2 por ciento, gracias al repunte que había habido en los dos primeros meses.
En tanto, el gasto público y las inversiones en la construcción tuvieron un efecto estabilizador y evitaron un retroceso aún mayor del PIB.
A nivel externo, las exportaciones y las importaciones registraron asimismo una importante caída en el primer trimestre.
También en términos interanuales la economía alemana se contrajo notablemente un 1.9 por ciento -un 2.3 corregidos los efectos estacionales y de calendario-.
Únicamente en los años de la crisis económica y financiera de 2008 y 2009, la contracción en términos interanuales fue aún mayor, en particular en el segundo trimestre de 2009, con una caída del 7.9 por ciento, o en el primer trimestre, con un retroceso del 6.9 por ciento corregidos los efectos de calendario.