Elba Esther Gordillo Morales consiguió un permiso para estar presente en los funerales de su hija, la Senadora Mónica Arriola, quien falleció anoche a causa de un tumor cerebral. Mónica Arriola de 44 años había superado el cáncer de mama hace dos años, sin embargo, poco después le fue detectado un tumor inoperable en el cerebro. A pesar de su estado de salud, Arriola decidió seguir trabajando y presentó diversas iniciativas en el Senado hasta hace unas semanas.
Ciudad de México, 15 de marzo (SinEmbargo).– Elba Esther Gordillo Morales, ex dirigente magisterial acusada de lavado de dinero y de delincuencia organizada, obtuvo un permiso para asistir al funeral de su hija, la Senadora Mónica Arriola, quien falleció anoche a causa de un tumor cerebral.
Antes del medio día Gordillo Morales asistió la Funeraria Gayosso de Las Lomas, donde fueron velados los restos de la legisladora del Partido Nueva Alianza (Panal).
Poco después de las 4 de la tarde, «La Maestra» salió del lugar en ambulancia del Sistema Penitenciario capitalino para regresar al Hospital María José Roma, Colonia Roma, en donde permanece internada desde hace dos meses.
Según información proporcionada por la prensa nacional, tras enterarse del deceso Elba Esther Gordillo solicitó a sus abogados tramitar los permisos para poder estar presente en el funeral de Arriola.
Mónica Arriola de 44 años había superado el cáncer de mama hace dos años, sin embargo, poco después le fue detectado un tumor inoperable en el cerebro. A pesar de su estado de salud, Arriola decidió seguir trabajando y presentó diversas iniciativas en el Senado hasta hace unas semanas.
Mónica Arriola Gordillo nació el 14 de mayo de 1971 en la Ciudad de México. Era hija de la ex lideresa del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), Elba Esther Gordillo y de Francisco Arriola Urbina, ex contralor del mismo gremio.
Arriola era licenciada en Literatura Latinoamericana por la Universidad Iberoamericana. Asimismo, fue Diputada en la V Legislatura de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal entre 2009 y 2012, Diputada federal en la LX Legislatura entre los años de 2006 y 2009, secretaria general de Panal y coordinadora de campaña del Gobernador del Estado de México, Eruviel Avila.
Como Senadora, Arriola formaba parte de las comisiones de Derechos Humanos, Gobernación, Para la Igualdad de Género, entre otras.
Elba Esther Gordillo Morales, su madre, estuvo al frente del SNTE por más de 20 años hasta que el 26 de febrero de 2013, agentes de la Procuraduría General de la República (PGR) la detuvieron por delincuencia organizada y operaciones multimillonarias con recursos de procedencia ilícita.
La ex dirigente magisterial alegó problemas renales y de secuelas de Hepatitis para salir del penal de Tepepan. Ahora se encuentra en la clínica María José, en la colonia Roma de la Ciudad de México.
En el hospital en el que se encuentra actualmente, las habitaciones cuestan entre mil 430 y tres mil 900 pesos diarios; su página electrónica agrega que cuentan con teléfono, televisión y conexión a la Internet.
“Se trata de un hospital pequeño, aunque con todos los servicios de alta calidad, personal médico y de enfermería con formación en su mayoría militar, muy experimentado”, informó la defensa de Gordillo, encabezada por Marco Antonio Del Toro Carazo, después del traslado al María José.
“Sus instalaciones minimizan riesgos de infecciones e incluso se realizaron adecuaciones para esos efectos. De igual modo, se privilegió el que la maestra Gordillo cuente con la posibilidad de tener la movilidad que le permita recuperarse en aspectos clínicos que se vieron afectados por el prolongado enclaustramiento en un cuarto hospitalario”, agregó la defensa.
El exterior del sanatorio no presenta más vigilancia que dos agentes uniformados que permanecen en una camioneta tipo van sin placas y estacionada en la esquina de la Cerrada de Salamanca. Fernando Martínez Gómez, subdirector de Difusión de la Subsecretaría de Sistema Penitenciario del Distrito Federal, declinó informar cuántos agentes están asignados a la vigilancia de la reclusa y sólo mencionó que los gastos del internamiento privado corresponden a la defensa.