Ciudad de México, 24 de septiembre (SinEmbargo).– Eduardo Sánchez Hernández, Vocero del Gobierno de la República, dijo esta tarde que el Presidente Enrique Peña Nieto ha prometido a los padres y abogados de los 43 normalistas desaparecidos que la investigación no será cerrada, y que “no habrá carpetazo”.
Peña dijo a madres y padres de los normalistas: “Estamos del mismo lado y trabajamos con el mismo objetivo: el de saber qué sucedió con sus hijos y castigar a los responsables. Busquemos juntos la verdad”.
Sánchez dijo en conferencia que el Presidente giró instrucciones precisas a todas las dependencias involucradas para llevar la investigación a «tope donde tenga que topar»; seguir las recomendaciones del Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (GIEI- CIDH); transparentar de manera individual qué pasó con cada uno de los afectados; extender la atención médica y psicológica a familias y estudiantes de la Normal Rural de Ayotzinada; a la Procuraduría General de la República (PGR) le ordenó integrar un equipo de peritos “del más alto nivel” para saber con claridad qué pasó en el basurero de Cocula, en la que podrá participar el perito independiente José Torero, si así lo desea.
En el encuentro, los padres de los normalistas entregaron una carta al Presidente con los siguientes ocho puntos:
- Reconocimiento de la legitimidad de nuestra búsqueda de justicia y de que el caso se encuentra abierto.
- Permanencia del GIEI, aceptación plena del informe del GIEI y sus recomendaciones.
- Replanteamiento de la investigación en una unidad especializada de investigación, con supervisión internacional, compuesta por dos instancias: una que indague a profundidad dónde están nuestros hijos y otra que investigue el montaje con que se nos pretendió engañar.
- Relanzamiento y concentración de la búsqueda a partir del uso inmediato de tecnología.
- Atención digna e inmediata a los heridos y familiares de nuestros compañeros ejecutados extrajudicialmente.
- Respeto a la Normal Rural Raúl Isidro Burgos y cese a los intentos de criminalización de los normalistas.
- Mecanismos de comunicación permanente, digna y con respeto a nuestros derechos.
- Reconocimiento y acciones de fondo frente a la crisis de impunidad, corrupción y violaciones a derechos humanos que vive México.
El vocero de la Presidencia dio detalles tras finalizar la reunión que sostuvieron hoy los padres de los 43 normalistas con el Presidente Enrique Peña Nieto. En conferencia, Sánchez Hernández sostuvo que el Ejecutivo Federal manifestó su solidaridad a los familiares, y reafirmó la voluntad del Gobierno de la República para esclarecer los hechos. El Presidente “les dijo que compartía su dolor y que comprendía su indignación”, precisó.
El vocero destacó que al día de hoy se han celebrado más de 50 reuniones entre padres, estudiantes normalistas y autoridades de diversas dependencias del Gobierno federal.
“Estamos del mismo lado, ustedes y yo buscamos lo mismo: Saber qué pasó con todos y cada uno de sus hijos”, dijo el Presidente Peña Nieto en la reunión de hoy.
En la reunión, estuvieron presentes los integrantes del Grupo Interdisciplinario de Expertos, quienes hicieron la entrega oficial de su Informe al Presidente.
El Presidente, según lo narrado esta tarde por Eduardo Sánchez, les recordó a los expertos que la PGR analizará e incorporará sus recomendaciones a la investigación del caso. “El Presidente dejó en claro que la investigación no se ha cerrado y que no se pretende dar carpetazo”, sostuvo el funcionario.
En cuanto a los avances de la investigación, la PGR precisó en la reunión que hasta el día de hoy han sido detenidas 111 personas por los hechos. De ellos, 52 son policías de Iguala, 19 policías municipales, y 40 integrantes de una organización delictiva en Guerrero.
Se informó que se han realizado 674 dictámenes periciales, 135 muestras de ADN, 577 declaraciones ministeriales. Así como 6770 patrullajes de búsqueda, 275 sobrevuelos de búsqueda, y 94 en aviones no tripulados.
“Las dependencias federales están trabajando para llevar ante la justicia a todos los responsables de este hecho”, aseveró Eduardo Sánchez.
El Presidente, dijo Sánchez, giró esta tarde instrucciones precisas. En primer lugar, pidió investigar todos los hallazgos y posibles responsables que arroje la investigación. Se deberán continuar los trabajos de investigación para saber qué pasó con los normalistas, de manera individual. La subsecretaría de de Derechos Humanos y de la Comisión Especializada para la Atención a Víctimas deberán asegurar que los afectados sean atendidos. Además de garantizar atención medica a quienes resultaron afectados
Además, dijo, instruyó Peña Nieto tomarán en cuentas las recomendaciones del grupo de expertos de la CIDH, por lo que se integrará un equipo de peritos para analizar los hechos ocurridos en Cocula, entre ellos el experto José Torero, si así lo desea. La creación de una fiscalía especializada para la búsqueda de personas desaparecidas.
“Se los reitero estamos del mismo lado y trabajamos con el mismo objetivo el de saber qué sucedió con sus hijos y castigar a los responsables. Busquemos juntos la verdad”, concluyó el Presidente la reunión, según lo narrado por Eduardo Sánchez.
Ante las preguntas de la prensa respecto a la apertura de investigaciones a elementos del Ejército y de la Policía Federal, de quienes se ha documentado tuvieron información de primera mano de la agresión a los estudiantes, el Vocero dijo:
«La PGR tiene un mandato constitucional para llevar a cabo las investigaciones sin restricción y limitación más que lo que el derecho dicta».
Respecto al cuestionamiento de que si la «verdad histórica» dada a conocer por el entonces Procurador Jesús Murillo Karam había caído con las conclusiones de los expertos de la CIDH, Sanchez sostuvo que «Hay dos hipótesis de un mismo tema. Respecto a los puntos que hay contraste se ordenó un tercer peritaje para esclarecer lo que ha ocurrido”.
Los familiares de los 43 normalistas de Ayotzinapa se reunieron esta tarde por segunda ocasión con el Presidente Peña Nieto en las instalaciones del Museo Tecnológico de la Comisión Federal de Electricidad (MUTEC). La primera vez que los padres de los estudiantes y el mandatario mexicano se vieron las caras, fue el 29 de octubre del año pasado, en un encuentro oficiado en Los Pinos.
Los familiares de los jóvenes desaparecidos hace casi un año en Iguala, Guerrero, arribaron pasado el medio día, mientras que el Jefe del Ejecutivo federal llegó al MUTEC alrededor de las 13:30 horas.
«Hoy, a casi un año de los atroces hechos acontecidos en Iguala, Guerrero, en contra de nuestros hijos y de nuestros compañeros, venimos ante Usted a exigir justicia y verdad a una sola voz. Ha sido un año lleno de sufrimiento y de angustia por no saber de nuestros hijos. Un año en el que ha privado la simulación y el engaño. También ha sido un año en el que nuestra digna exigencia de justicia ha movido a todo Guerrero, a todo el país y a la comunidad internacional más allá de las fronteras», manifestaron los padres en un documento.
Dijeron que fue el Estado el que desapareció a sus hijos, «el que permitió que la narcopolítica se afincara en Guerrero, el que generó una mentira histórica que hoy ha sido evidenciada, el que nos torturó al privilegiar los tiempos políticos antes que los derechos de las víctimas».
Los padres de los normalistas dijeron que en la primera reunión con el Presidente firmaron 10 compromisos que no fueron cumplidos cabalmente. «Su palabra no fue honrada. En vez de que se haya procurado la justicia y la verdad, se procuró la mentira».
Los padres de los estudiantes llegaron a la reunión acompañados de integrantes de organizaciones civiles llegaron a bordo de cuatro autobuses, bajo un amplio dispositivo de seguridad. Personal del Estado Mayor Presidencial colocó un cerco de seguridad varios metros a la redonda del museo de la CFE, al que no se permite el acceso.
En el encuentro con los familiares de los 43 normalistas participarán además el Secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong; el Comisionado Nacional de Seguridad, Renato Sales; la Procuradora General de la República, Arely Gómez González, y el subsecretario de Derechos Humanos de Gobernación, Roberto Campa Cifrián, entre otros funcionarios.
El pasado 7 de septiembre el Presidente Peña Nieto dijo estar dispuesto a sostener una nueva reunión con los padres de los 43 estudiantes. En un acto público en el estado de Puebla, el mandatario expresó su “total disposición” para sostener dicho encuentro.
En esa ocasión, el Jefe del Ejecutivo federal aseguró que desde la desaparición de los estudiantes en la ciudad de Iguala el 26 de septiembre de 2014, el Gobierno ha estado “cerca de los padres”, y reiteró “la invariable y permanente disposición” de acompañar y apoyar a los familiares de los jóvenes.
Peña Nieto se pronunció sobre la reunión con los padres de los normalistas de Ayotzinapa un día después de que el Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI) de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) presentara un informe que desmontó la versión de la Procuraduría General de la República (PGR) de que los 43 estudiantes fueron quemados en un basurero de Cocula.
El grupo abrió una nueva hipótesis sobre el móvil del crimen vinculada a que los jóvenes se habrían apoderado, sin saberlo, de un autobús cargado de droga oculta. Por ello, los familiares de los normalistas demandaron: la reestructuración de la investigación tomando como base el informe de los expertos de la CIDH, que se reanude la búsqueda de los jóvenes contemplando las pautas y puntos fijados por los científicos, y dar verdad y justicia a los 43, familiares y al pueblo de México.
SENADORES DEBATEN POR AYOTZINAPA
Senadores de los partidos de la Revolución Democrática (PRD), Acción Nacional (PAN) y Verde Ecologista de México (PVEM) sostuvieron un intenso debate en relación a la desaparición de los 43 estudiantes de la Escuela Normal Rural de Ayotzinapa «Raúl Isidro Burgos».
El Senador del PVEM, Pablo Escudero, responsabilizó de los hechos ocurridos la noche del 26 de septiembre de 2014 en Iguala, Guerrero, a la dirigencia nacional del Sol Azteca, partido por el que ganó el ex Alcalde de ese municipio ahora preso, José Luis Abarca Velázquez.
Escudero también dijo que Andrés Manuel López Obrador, actual dirigente del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), es responsable de la desaparición de los normalistas. En respuesta, el Senador perredista Armando Ríos Piter pidió al partido del tucán y al Revolucionario Institucional (PRI) llamar a cuentas a todos los involucrados, incluido el Presidente Enrique Peña Nieto.
En tanto, la Senadora del Partido del Trabajo, Layda Sansores, criticó el que el Presidente haya recibido hasta ahora a las familias de los 43 jóvenes y también arremetió contra el ex Procurador Jesús Murillo Karam, autor de la «verdad histórica» de la PGR. «No sé con qué cara podrá hablarles a los padres de los jóvenes desaparecidos, no sé cómo se atreve a mirarlos al rostro», dijo la legisladora.
Por su parte, la Senadora panista Pilar Ortega Martínez dijo que para su partido lo más importante es no permitir que estos hechos queden impunes y que se sepa la verdad sobre los motivos que provocaron la desaparición de los normalistas.
«Debemos tener la certeza de quién o quiénes fueron los autores materiales o intelectuales y sobre todo debemos tener la certeza de cuál fue el destino de los desaparecidos», dijo al fijar el posicionamiento del PAN en el Senado.
LA REUNIÓN DE 2014
El 29 de octubre pasado, 33 días después de la tragedia de Iguala, Guerrero, donde fueron asesinados tres estudiantes de la Normal Rural de Ayotzinapa y otros 43 sufrieron desaparición forzada, el Presidente Enrique Peña Nieto recibió a sus padres en Los Pinos.
Fue la del 29 de octubre pasado una reunión tensa. Las familias habían exigido durante cuatro semanas un encuentro con el Jefe del Ejecutivo federal, luego de las ambiguas respuestas de autoridades, como las del entonces titular de la Procuraduría General de la República (PGR), Jesús Murillo Karam, y el propio Miguel Ángel Osorio Chong, encargado de la Secretaría de Gobernación (Segob).
Habían llegado hasta ahí, hasta la casa del Presidente, sólo después de una enorme presión de ellos mismos, de los estudiantes y maestros de Guerrrero, y de la sociedad en general. Sin embargo, el resultado del encuentro fue a todas luces negativo. De Los Pinos, las madres, padres y hermanos de las víctimas salieron con un desencanto mayor de cuando llegaron, y con el coraje a flor de piel.
Se recuerda la intervención de Felipe de la Cruz Sandoval, padre de un estudiante quien, como él mismo relató, sobrevivió al ataque a balazos de policías municipales y fuerzas federales en Iguala.
“Si usted no tiene la capacidad para darnos la respuesta ya, también debe estar pensando lo mismo que el Gobernador de Guerrero, porque también tiene responsabilidad. ¿A los cuántos días el Gobierno federal toma el caso? O sea que hoy estamos aquí con la intención de ponerle un plazo no mayor de tres días de tener resultados concretos”, le dijo a Peña Nieto.
“Si Ángel Aguirre no cumplió es culpable y si usted no actúa también va a ser culpable”, le lanzó Cruz Sandoval a un Peña Nieto que lucía incómodo y con el rostro muy serio.
“Ya llegamos al límite de la tolerancia y de la paciencia, estamos a última instancia como mexicanos exigiéndole a usted como Presidente respuesta inmediata a la presentación de los 43 jóvenes desaparecidos”, agregó Cruz.
Fueron seis horas de reunión con el Presidente Enrique Peña Nieto. Pero la comisión de las familias de los 43 normalistas de la Escuela Normal Rural Raúl Isidro Burgos, externó que había sido insuficiente, refiriéndose a la conversación y los ofrecimientos del Primer Mandatario.
Peña Nieto repitió el “tope donde tope”, en una promesa de que encontrarían a todos los culpables, pero las respuestas del político mexiquense no les gustaron a los padres. Salieron cansados, aún más hartos de las respuestas a medias del Estado mexicano pero, eso sí, con más ánimo para continuar con la búsqueda de sus hijos.
Al salir de Los Pinos, el vocero de los padres de familia, Felipe de Jesús de la Cruz, dijo: “Les adelantamos [lo] que le queremos decir al Presidente: que no es suficiente”. Luego, las familias en grupo dieron una conferencia de prensa. “A más de 30 días, no han hecho nada”, dijo De la Cruz Sandoval, uno de los padres. “Nosotros seguimos en la búsqueda de los estudiantes, con vida”.
“No podemos creer que con todo el poder que tiene el Estado no los encuentren. No confiamos”, agregó. “Que no se le olvide al Gobierno federal que de Guerrero han salido grandes personajes importantes. Le pedimos a la población a mantener la ira hasta que nos entreguen a los 43 normalistas”.
También pidieron un alto a las filtraciones de información que ya entonces inundaban los medios de comunicación. Dijeron que la Procuraduría General de la República no avisaba a los familiares sobre las pistas. Primero las filtra a la prensa, acusaron. “Nos enteramos por los medios de que encontraron fosas, y que pueden ser nuestros hijos, imagínense el dolor. Para nosotros no son confiables los resultados de la PGR”, insistió desde aquél 29 de octubre el vocero de la comisión.