Washington, 22 sep (EFE).- Estados Unidos aseguró hoy que se reserva la opción de sancionar a China por su ciberespionaje, pero no impondrá ninguna restricción a ese país antes de la visita del Presidente chino, Xi Jinping, este viernes a la Casa Blanca.
El Presidente estadounidense, Barack Obama, adelantó la semana pasada que su Gobierno estaba preparando una serie de medidas para presionar a China para que ataje el ciberespionaje y el robo de secretos comerciales.
El asesor adjunto para seguridad nacional de Obama, Ben Rhodes, afirmó hoy que las sanciones «siguen siendo una herramienta de la política exterior estadounidense» y la Casa Blanca estará «preparada para imponerlas» si cree que hay algún caso que merezca «ese tipo de acción punitiva».
No obstante, matizó que no se impondrá ningún tipo de sanción a China antes de la visita de Xi, que llegó hoy a Seattle (EU) pero no será hasta el jueves cuando viaje a Washington, donde mantendrá una reunión en el Despacho Oval con Obama, quien además le agasajará con una cena de Estado.
Las diferencias en torno al ciberespionaje serán una parte importante de la agenda entre las dos mayores economías del mundo durante su reunión, según Rhodes, que matizó que no se espera que haya «un acuerdo formal en particular» sobre la materia.
«El área donde más queremos llegar a un mayor entendimiento con los chinos es en la protección de la propiedad intelectual y la capacidad de los negocios para operar sin preocupaciones de robos en el ciberespacio», indicó el funcionario en una conferencia de prensa telefónica.
China «debería ser consciente» de que «si no está dando pasos para afrontar temas como la ciberseguridad o los roces en el área comercial, se arriesgan a que se erosione el apoyo de la comunidad empresarial» estadounidense, agregó Rhodes.
Para Estados Unidos, además, es importante que «China demuestre que sus reformas económicas están encauzadas», con el fin de tranquilizar a los mercados tras las dudas generadas en agosto, según dijo a periodistas Caroline Atkinson, una asesora de Obama para asuntos económicos internacionales.
Además, la principal asesora de seguridad nacional de Obama, Susan Rice, se reunió hoy en la Casa Blanca con representantes de organizaciones no gubernamentales estadounidenses que están preocupadas por el «impacto potencial» de un proyecto de ley chino que limitaría el margen de acción de las ONG en China.
Rice les reiteró «la preocupación de Estados Unidos sobre esa legislación» y el «fuerte apoyo para la sociedad civil en China», según indicó la Casa Blanca en un comunicado.