Ciudad de México, 20 de septiembre (SinEmbargo).– «Vienen los aniversarios, y todo el mundo recuerda el sismo del 85. Pero lo que pasa en realidad es que en México falta hacer tarea en casa: la gente no conoce ni siquiera cómo elaborar su plan de familiar de contingencias. Un mínimo de la sociedad está apenas preparada en temas de protección civil», explica Julio Velázquez, coordinador del Programa de Manejadores de Perros de Búsqueda y Rescate (PMPBR) de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
Preparar un plan de protección familiar puede ser determinante para salvar vidas. Las nuestras, y junto a nosotros, las de nuestras mascotas.
De acuerdo con una encuesta realizada por Porter Novelli México, tan sólo en la capital del país, un 40 por ciento de los habitantes ha experimentado una situación de emergencia con sus mascotas y alrededor de un 87 por ciento del total de los propietarios de animales carecen de un plan de contingencia para protegerlas en caso de sismos.
Las siguientes son algunas recomendaciones de World Animal Protection y Personas para el Trato Ético de los Animales (PETA, en inglés) para cuidar a tus mascotas durante una emergencia sísmica.
Plan de emergencia en que incluyas a tu mascota
Considera que cuidar a tu familia es, finalmente, cuidar a tus mascotas. Entre las acciones a realizar están: Detectar y reducir riesgos, revisando el estado de la construcción de tu casa, el mantenimiento de las instalaciones (agua, gas, luz) y el mobiliario, (libreros, repisas, etc); diseñar rutas de evacuación y realizar simulacros con perioricidad, incluyendo a tu mascota para que éste se familiarice con ella.
En esta liga puedes consultar cómo se prepara un plan de protección familiar.
Botiquín de emergencia
Las mascotas también se lastiman, tener vendas de gaza y alcohol es importante. Además, debe tenerse a la mano una correa (que sea resistente). Es necesario que tu perro esté acostumbrado a que se la pongas y le guíes con ella. También es recomendable que tengas a la mano una jaula para transportarla y enseñarle a entrar y salir de ella para que no se resista en caso de una evacuación.
Algunas veces, durante las evacuaciones, las autoridades podrían instar a que dejes a tu mascota. Entonces debes procurar dejarlo en un lugar seguro y tener preparado platos irrompibles con un suministro de al menos 72 horas o 7 días de agua y alimentos secos.
Identifica a tu mascota
Durante el sismo los animales pueden huir en búsqueda de un sitio más seguro y pueden llegar a extraviarse, por eso, es necesario que todo el tiempo porten una placa de identificación con tus datos de contacto, o un chip de identificación. También es recomendable tener una fotografía reciente de la mascota que podría servir para encontrarla.
Considera sus papeles
Así como deben guardarse los documentos importantes de la familia, la propiedad, las pertenencias, etcétera, debes incluir los de tu mascota: tarjeta de vacunación, historial médico y fotos recientes. Si puedes enviar copias de estos documentos a otras personas sería ideal.
También debes tener guardados teléfonos de asociaciones animalistas que pudieran ayudarte a refugiar o localizar a tu animal en caso de ser necesario.
¿Y durante el temblor?
El veterinario Mauricio Fabry, explicó para el sitio La Tercera que «dependiendo del tipo de mascota es el cuidado que debemos tener para contenerlos, [por ejemplo], ‘los gatos en general tienden a arrancar y pueden exponerse a situaciones peligrosas, como quedar cerca de muebles o estantes que puedan caer. El gato requiere que lo podamos tomar en brazos y llevar a un área segura. En cambio el perro, tiene la tendencia a guarnecerse, siente el ruido y se esconde. Se acerca mucho a nosotros, incluso, se meten debajo de nuestras camas. Ellos reaccionan como nosotros reaccionamos, porque nos perciben como los líderes de la manada, de modo que si permanecemos en calma ellos también lo harán”.
Considera la correa, la transportadora y las rutas que has elaborado para actuar de acuerdo con las necesidades de tu mascota. Si estás en un piso alto enséñale a tu perro a permanecer junto a ti en un punto seguro de tu casa (lejos de ventanas, objetos que se derrumban, etcétera).