El primer cambio en el gabinete que anunció a los medios de comunicación Miguel Ángel Mancera Espinosa, Jefe de Gobierno del Distrito Federal (GDF), el 16 de julio fue el de Patricia Mercado Castro, como Secretaria de Gobierno, en sustitución de Héctor Serrano Cortés.
En la sala atiborrada de reporteros, camarógrafos y personal del GDF, se escuchó una ligera expresión de desapruebo y de desencanto cuando Mancera pronunció su nombre. Esperaban quizá a alguien más. Pero fue ella. No José Ramón Amieva, uno de los cercanísimos de Mancera Espinosa. Tampoco fue Manuel Granados Covarrubias, su incondicional. Mancera eligió para el puesto más importante del gabinete, después del propio Jefe de Gobierno, a una mujer que tiene entre su cartas un largo camino recorrido en las organizaciones civiles, principalmente feministas.
La sonorense Mercado Castro llegó a ese sitio con varios detractores, entre ellos las piezas cercanas a Andrés Manuel López Obrador, líder del Movimiento Regeneración Nacional (Morena), porque no la consideran de izquierda y la culpan de robarle votos en 2006 con su postulación a la Presidencia de la República.
En ese grupo y en otros, incluso perredistas, aseguran que Mercado no tiene las cartas suficientes para cubrir ese puesto. No proviene de cuadros perredistas, ni cuenta con un historia de trabajo político al interior del partido. Es una mujer que para algunos no conecta y no tiene la experiencia para ser la interlocutora del gobierno de Mancera Espinosa.
Sin embargo, para la otra trinchera, la de las organizaciones sociales vinculadas a las luchas de género, es la mujer indicada, capaz de construir consensos y aplauden su nombramiento como un logro de la lucha feminista por empoderarse en la política.
Ciudad de México a 25 de julio (SinEmbargo).– A pesar de que Patricia Mercado Castro simpatiza con la panista Josefina Vázquez Mota –la apoyó en su campaña presidencial en 2012– e incluso con Margarita Zavala de Calderón, se considera una mujer de izquierda. Se asume como tal. Para algunos lo es, para otros es de centro-derecha. Pero Patricia sí tiene una formación de izquierda. En sus inicios la joven estudiante de Economía de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) formó parte del extinto Partido Revolucionario de los Trabajadores (PRT) con una fuerte influencia trostskista.
“Es una mujer con una sólida formación de izquierda. Si Andrés Manuel López Obrador no la quiere es porque para él o eres su incondicional o eres su enemigo. Yo formé parte junto con ella del PRT, la conozco desde hace muchos años. Ella empezó en las causas sociales allá en Sonora, en movimientos eclesiásticos, de ahí proviene ella”, dice una fuente fundadora del Partido de la Revolución Democrática (PRD) y cercana a Mercado Castro.
Lo cierto es que Patricia Mercado proviene de una familia modesta de Ciudad Obregón, Sonora. Con un padre dedicado a la agricultura desde muy joven y una madre ama de casa. La nueva Secretaria de Gobierno de la capital del país tiene buena reputación en su natal Cajeme.
–¿Cómo es la familia de Patricia?, se le pregunta a Adalberto Rosas López, dirigente del Movimiento Ciudadano (MC) por el Agua en Cajeme.
–Es gente conocida. Usted sabe que en el pueblo todos nos conocemos. Como todos los de aquí, dependemos de la agricultura.
–Patricia tiene años en el Distrito Federal participando en organizaciones sociales y en política. ¿Qué reputación tiene allá en Ciudad Obregón? ¿Su familia no ha mostrado enriquecimiento repentino?
– ¡Al contrario! (ríe). Es de las gentes honradas que aún quedan. Es gente humilde, modesta. Escasas gentes se conservan honradas y viven de su trabajo.
El dirigente del Movimiento Ciudadano por el Agua en Cajeme es un hombre mayor, relacionado con la política local desde muy joven. La conoció personalmente en 2006 en el Distrito Federal, cuando fue candidata a la Presidencia de la República.
Se la presentó el analista Sergio Aguayo, cuenta, pues Patricia ha realizado toda su carrera en la Ciudad de México y a Sonora sólo va cuando hace campaña o a visitar a sus padres.
“Yo creo que será buena Secretaria de Gobierno y ojalá aspire a otro puesto más fuerte. Ya es la hora de las mujeres oiga. Necesitamos mujeres”, dice Adalberto.
De acuerdo con la fuente cercana a Patricia, muchos de los cuadros que formaron parte del PRT, fueron fundadores del Partido de la Revolución Democrática (PRD) en 1989.
Pero extrañamente, dice, Mercado no se unió a Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano y al resto de los fundadores para dar vida al partido de oposición de izquierda, más importante de la época.
Mercado tenía toda la década de los 80 trabajando con organizaciones de mujeres. Formó parte del Comité de Huelga de la UNAM y tras el sismo de 1985, la joven Patricia se involucró en la lucha de las costureras de la ciudad que fueron afectadas por el derrumbe.
Antes de la fundación del PRD, Patricia participó en la fundación de Mujeres Trabajadoras Unidas (Mutuac) y Mujeres en Acción Sindical (MAS).
“Quien dice que Patricia no es de izquierda y que es de derecha, no sabe sus antecedentes. Con el trabajo que ha hecho en las organizaciones sociales y en el feminismo, se ha relacionado con todo el mundo. Ella conoce muy bien a un Manlio Beltrones, a los panistas, a los priistas, a los perredistas. Quizá el único que no la pueda ver es Obrador, pero ella está muy relacionada. Nunca le he preguntado porqué no fundó el PRD junto con nosotros. Nunca he platicado con ella de eso”, dice.
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El primero en rechazar a Patricia Mercado Castro como Secretaria de Gobierno fue Martí Batres Guadarrama, presidente del Comité Ejecutivo Nacional (CEN) de Morena.
En un evento en la Delegación Iztacalco, Batres Guadarrama aseguró que Mercado se identificó con el Gobierno del priista Ernesto Zedillo Ponce de Léon y también con el del panista Vicente Fox Quesada.
Para el dirigente de Morena, Mancera Espinosa llevó a su gabinete a la derecha y lo alejó de la izquierda y aseguró que los cambios “responden más bien a los reacomodos internos del PRD y a las alianzas políticas del Jefe de Gobierno, no a las demandas de la ciudadanía. Se desconocen los criterios usados para castigar a algunos funcionarios y para premiar a otros”.
El Alcalde electo de Texcoco por el Movimiento Regeneración Nacional (Morena), Higinio Martínez Miranda, dice en entrevista que el líder de Morena López Obrador, se equivocó con Mancera Espinosa.
Higinio asegura que la prueba está en la forma en la que gobernó el Jefe de Gobierno la Ciudad de México durante sus casi tres primeros años y los cambios que realizó a su gabinete recientemente.
“Yo quiero mucho a Andrés Manuel, incluso me atrevo a decir algo que me ha dicho varias veces: ‘tu eres como mi hermano’, si lo sostiene o no, es cosa de él, lo quiero mucho. Pero Andrés también comete errores y un error fue haber impulsado a ese señor Mancera, sólo porque estaba alto en las encuestas. Así no se hace política. Aquí en el DF ganaba la elección algún perredista que tuviera un compromiso claro con el proyecto. Hoy un esfuerzo de años que ha costado de gobernar la Ciudad de México: primero con el ingeniero Cárdenas, luego Andrés Manuel, Marcelo Ebrard y volver a ganar Mancera, para que este señor que no tenía ningún compromiso y que hoy lo comprueba con sus cambios, por supuesto que es una equivocación de Andrés Manuel. Él conoce bien, sabía desde entonces que no era una persona cercana. Ahora Mancera está perdiendo la ciudad”, argumenta.
Higinio Martínez califica la designación de Patricia como una acción “abusiva e irresponsable” de Mancera, pues asegura fue una de las responsables de que López Obrador no llegara a la Presidencia de la República en 2006.
“Si ella lo hubiera apoyado, hubiera ganado Andrés Manuel. Igual hubieran intentado el fraude. Pero ella estuvo en contra, siempre ha estado en contra de los movimientos del PRD en los últimos años. Haciendo negocios con partidos, ahora es Secretaria de Gobierno”, dice.
Mercado fue candidata a la Presidencia y compitió con López Obrador en 2006, por el Partido Alternativa Socialdemócrata y Campesina (ahora Partido Alternativa Socialdemócrata), en donde obtuvo 2.70 por ciento de la votación nacional.
Según varias versiones, no fue directamente Obrador quien le pidiera declinar a su favor, pero sí se acercaron a ella los grupos del PRD que apoyaban la campaña del tabasqueño para solicitárselo.
No era la primera ocasión que la sonorense buscaba contender por la Presidencia. En el año 2000 compitió en la elección interna del entonces partido Democracia Social con Gilberto Rincón Gallardo, sin éxito.
Luego, Mercado Castro fundó el Partido México Posible, del cual fue presidenta entre 2002 y 2003 y la Agrupación Política Feminista Diversa. La fuerza política que dirigió Patricia colocó en la agenda pública la despenalización de aborto, la marihuana y las uniones entre personas del mismo sexo.
Agustín Guerrero Castillo, coordinador de Movimiento Progresista AC, una organización liderada por el ex Jefe de Gobierno Marcelo Ebrard Casaubón, indica que Mercado es una mejor opción que Héctor Serrano, pero no la más indicada.
“Todavía está fresco lo de 2006. Andrés Manuel se quedó a un suspiro de ganar la Presidencia de la República y uno de los factores que jugaron en contra fue que Patricia Mercado no declinó a favor del candidato de las izquierdas”, dice.
Guerrero Castillo relata que fue Jesús Ortega Martínez, líder de Nueva Izquierda (NI) o “Los Chuchos”, corriente interna del PRD con la cual Mercado tiene buenas relaciones, quien le planteó declinar a favor de Obrador.
“Ella decidió que no. Hay una interpretación de que la presencia de Patricia no ayuda a una buena relación en general con Morena. Se esperaba un Secretario mas cercano. Incluso José Ramón Amieva podría ser un buen interlocutor. Mancera ni siquiera informó los resultados de la evaluación que realizó. No se nos ha dicho qué se tomó en cuenta para cada uno de los nombramientos. Cuáles son los méritos que ha hecho Patricia como para saltar a la Secretaría de Gobierno. Ella llega a la Secretaría del Trabajo sin ninguna experiencia previa en materia laboral, sin ninguna militancia partidaria. No es tanto criticar a la persona, pero da la impresión de que el PRD no tiene cuadros y que Mancera tiene que traer gente de otros lados, cuando sí hay gente con trayectoria”, dice Agustín.
El ex perredista recuerda que Mercado participó por primera vez en una responsabilidad de gobierno con Mancera. Una jefatura ganada por el Sol Azteca, partido que la sonorense siempre rechazó.
Para Agustín, Patricia tiene experiencia en las causas feministas, pero no cuenta con una trayectoria orgánica. Aunque dice “siempre hay que dar el beneficio de la duda”.
La ahora Secretaria de Gobierno, le “echa muchas ganas”, pero no es suficiente, asegura.
Además, no es de izquierda, afirma. El nuevo gabinete de Mancera es un gobierno de “personas” no de “grupos”.
“Es el estilo de Mancera. Es un gabinete con un perfil de derecha. El doctor Mancera no escuchó el mensaje de las urnas del 7 de junio que decidió votar por la izquierda. Patricia es una mujer de centro, que no tiene ningún compromiso con la política de izquierda. Alguna vez fue una mujer de avanzada en el PRT, pero se dedicó a dilapidar su fama y echarse a dormir”, asegura.
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Telésforo Nava Vázquez, investigador y experto en la izquierda mexicana de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM), indica que las mujeres tienen una forma distinta de hacer política.
Margarita Zavala felicitó a Patricia Mercado. Posiblemente Rosario Robles Berlanga, Secretaria de Desarrollo Social (Sedesol) telefoneó ese mismo día a la nueva Secretaria de Gobierno.
Ese tipo de mujeres, explica el investigador, se mezclan y hacen proyectos juntas, aunque representen distintas ideologías. Sobreponen el género.
“Para ellas pesa más el aspecto de género, le dan mucho más importancia y diluyen la posición social de cada una. De repente salen desplegados firmados por todas ellas. Sí funcionan diferente a los hombres”, expone.
Para Telésforo la llegada de Mercado a la Secretaría de Gobierno es sana. Incluso lo que algunos le critican, para él, es una de las cartas fuertes: no tener relación con ninguna tribu del PRD. Ni con ningún partido. Es un plus.
María del Pilar Berrios Navarro, investigadora de nuevos enfoques y en organizaciones no gubernamentales, considera un acierto de Mancera el nombramiento de Patricia Mercado.
“Es la persona idónea para abrir los canales de diálogo entre la Jefatura de Gobierno y la sociedad civil organizada. Vínculos que durante los primeros tres años han estado cerrados”, explica.
Berrios Navarro conoce la trayectoria de Mercado y la considera una “persona honesta y coherente con la agenda de los derechos humanos y de las mujeres”.
La falta de partido, es para Berrios una ventaja que coloca a Patricia en condiciones de diálogo con las diversas fuerzas políticas y sociales.
La analista explica que sí existe una forma distinta de hacer política de las mujeres y tiene que ver, más que por una condición de mujer, con el feminismo.
Ahí se circunscribe Mercado, a quien le “tocará lidiar con muchos vicios de la cultura política tradicional”.
“Predomina una cultura política tradicional, junto con ello esos elementos propios del patriarcado. Patricia es una mujer moderna, poco dada a esas prácticas tradicionales y a esa dinámica de juegos opacos por debajo de la mesa”, indica.
María del Pilar detalla que existe un liderazgo femenino caracterizado por dos elementos fundamentales: mayor horizontalidad y una dinámica de alianza.
“A las mujeres nos gusta hablar para ponerlo al servicio de la búsqueda de consensos, de acuerdos, de alianzas en aras de empujar una agenda común. Los rasgos que me ha tocado observar en Patricia en diferentes momentos son esos. Como cuando logró discutir la propuesta de reforma al Artículo 123 hace un par de meses, que venía junto con la Reforma Política del DF. Ella puso en juego la capacidad de generar un espacio de diálogo, convocar a diferentes fuerzas y llegar a acuerdos. Al final se eliminó esa propuesta de reforma laboral que planteaba que los trabajadores del DF, al servicio del Estado, se les vulnerara su derecho de asociación y huelga”, afirma.
Mercado es en definitiva, dice, una buena noticia para el feminismo.
Patricia llega a la Secretaría más importante del gabinete de Mancera Espinosa, aplaudida y rechazada.
