Ciudad de México, 23 de julio (SinEmbargo).– Las asociaciones protectoras Pro Animal y el Santuario Tierra de Animales, de Quintana Roo, modificarán una denuncia ya interpuesta para responsabilizar de abandono y maltrato animal a Lorenza Berumen Luévanos, ex regidora en Cancún, por el caso de «Frijol», un caballo rescatado y recuperado, que fue encontrado en condiciones de salud deplorables el mes pasado.
El 14 de junio, «Frijol» fue encontrado por miembros de la asociación Pro Animal de Cancún en respuesta a un llamado de auxilio vecinal. En el rescate, los activistas se percataron de un mal estado de salud. Desnutrición, huellas de maltrato físico y la falta de herraduras eran los primeros signos visibles.
«[El] caballo se rescató durante una tormenta […] que duró un par de días. Varios ciudadanos, al ver las condiciones de abandono del animal recurrieron a la denuncia con nosotros; y al acudir, [vimos que] tenía claras muestras de abandono y maltrato, encontrándose suelto, empapado, en estado de desnutrición, hambriento y con una soga enredada a una de sus extremidades la cual le estrangulaba dejándole una herida ensangrentada y expuesta»; se lee una publicación del pasado 17 de julio en Facebook, firmada por Mónica Chaverría y Ricardo Pimentel, representantes de las dos asociaciones involucradas.
Tras el rescate, las organizaciones interpusieron una denuncia por maltrato animal y delitos contra la fauna, ante la Dirección de Ecología Municipal, la Procuraduría de Justicia de Q.Roo y la Procuraduría de Medio Ambiente Estatal; y con la aprobación de las autoridades se realizó el traslado de “Frijol” al Santuario Tierra de Animales, espacio en el que se le brindó atención médica.
IMÁGENES DE «FRIJOL» EN SU PROCESO DE RECUPERACIÓN
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- Foto: Facebook Ricardo Pimentel
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- Foto: Facebook Ricardo Pimentel
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- Foto: Facebook Ricardo Pimentel
«Cuando recibimos al caballo estaba flaco ‘hasta los huesos’. Fue diagnosticado con laminitis [una enfermedad que en su etapa aguda provoca un nivel de dolor tan alto que los caballos pueden llegar a autoherirse de muerte]; tenía muchas heridas abiertas en las patas y la cara, es notorio que le pegaban con algo como sogas o fuetes; estaba parasitado, lleno de garrapatas», explica Ricardo Pimentel, fundador de Tierra de Animales, en entrevista con SinEmbargo.
De acuerdo con Pimentel, el caballo estaba bajo tutela de un hombre que utilizaba al caballo para hacer carreras [informales] en sus tiempos de ocio. No obstante esta afirmación, un par de semanas después del rescate de «Frijol» quien se presentó como su propietaria legal fue la ex Regidora Lorenza Berumen, que acreditó la propiedad del caballo con testimoniales firmados por escrito.
«Al parecer el caballo era utilizado para un espectáculo de charrería en el que bailaba, pero como empezó a envejecer y enfermar y ya no lo podían utilizar para el espectáculo y se lo regalaron a este sujeto que también lo maltrataba. [Ahora la ex Regidora] se ostenta como dueña gracias a testimoniales firmados por personas del ejido Andrés Bonfil, incluido el delegado, que tienen peso político en Cancún», continúa.
El pasado 18 de julio, sin haber respetado los protocolos pertinentes tras la denuncia interpuesta de maltrato animal, el Ministerio Público sacó a «Frijol» del Santuario Tierra de Animales para entregárselo a la ex Regidora. Además, la mujer decidió presentar una demanda contra los activistas involucrados por robo de ganado.
De acuerdo con las declaraciones de Pimentel, se trata de un caso impune debido «favores políticos»: «no es posible que no se haya dado seguimiento a la denuncia de maltrato y le regresaran el caballo a la persona que inicialmente lo maltrató; y encima, que se nos acuse de robo, cuando lo que buscamos es proteger el animal y antes y habíamos interpuesto una denuncia».
Ante estos hechos, algunas personas han manifestado su solidaridad al caso haciendo circular imágenes como las siguientes en las redes sociales:
E inclusive algunas de ellas acudieron a una manifestación pacífica «Apoyando a frijol y todos los animales» el pasado domingo 19 de julio.
Mientras tanto, los activistas buscarán desacreditar el acuso de robo y ya han logrado un amparo por un juez federal para que «Frijol» sea devuelto al santuario y la denuncia de maltrato atendida correctamente de acuerdo a los protocolos establecidos por la Ley de Protección Animal de Quintana Roo.
«Lo único que pedimos es que las autoridades hagan valer la Ley que elaboramos para proteger a los animales y, lejos de acusarnos por robo, se castigue a quienes realmente cometen actos de abandono y maltrato», expresan los activistas a través de una publicación en la red social.
